Más palabras de Palin

08/07/2010

 

Hace calor, ¿eh? La verdad es que yo estoy sudando la gota gorda. Y encima con la subida del IVA, la horchata está por las nubes y yo sin horchata a mano no soy capaz de escribir media docena de líneas que valgan la pena. Je, je, je, estaba pensando que diciéndoles esto igual alguno de ustedes deduce que soy valenciano. Tal vez lo sea, ciertamente. Es una posibilidad. El caso es que tengo lectores muy listos y me siento muy orgulloso de ello porque ¿cómo me iba a imaginar yo que sería capaz de merecer su atención?  Sobre el libro que les tengo prometido, America is ready!, puedo avanzarles que la entrada del próximo domingo irá dedicada en exclusiva a contarles todos los pormenores de los preparativos que ya tengo hechos. Creo haber terminado con la parte de la documentación previa y estoy a punto de empezar con la de redacción. Es la única ventaja que tienen estas noches sofocantes, que se está muy a gusto con el fresquito de la noche  buscando información sobre Sarah Palin en internet. Por cierto, que no puedo esconderles que conforme he ido adentrándome en la materia, he empezado a darme cuenta de la que se me viene encima. Escribir un libro no es nuevo para mí; ya he escrito uno (un tremebundo novelón) que, por descontado, no logró interesar ni a una de la docena de editoriales a las que le envié una copia de mi manuscrito. Lo que sí es nuevo para mí es escribir una obra de no ficción. ¿Pues qué quieren que les diga? Lo confieso. Tengo miedo de no responder, de que se trate de un empeño superior a mis fuerzas y de acabar escribiendo una sarta de obviedades o incluso de meras tonterías. En mis momentos más audaces, pienso que eso no son más que nervios y que se me pasaran tan pronto como empiece a escribir y vea que me van saliendo las palabras como siempre, pero en otros momentos, sobre todo cuando me pongo a desarrollar en mi mente los diferentes capítulos, me entra una especie de vértigo y me siento abrumado. Como ya les digo, imagino que es sólo exceso de responsabilidad y que lograré superarlo a poco que me ponga manos a la obra (o al teclado), pero ahora mismo… ¡brrr! ¡Qué susto tengo encima!

Sarah Palin, la bandera de las barras y las estrellas y un gesto suyo en el que se lee la firme voluntad de ésta de que todo lo que esa hermosa bandera significa y ha significado en la historia de la Humanidad no se pierda para las generaciones venideras: eso es lo que sentimos en nuestros corazones cada vez que vemos a esta mujer. Y es por eso también por lo que nunca, jamás, bajo ninguna circunstancia, la abandonaremos y permaneceremos siempre a su lado. Porque ella es la única esperanza de un futuro de paz y libertad para nuestros hijos y es nuestra obligación asegurarles ese futuro, cueste lo que cueste.

El fin de semana pasado les ofrecí el discurso de Sarah Palin en la California State University, la Stanislaus. Fue un excelente discurso, pero hubo poco de política en él, es cierto. Hubo mucho de educación, del futuro de los jóvenes y del legítimo orgullo que deberían sentir por ser estadounidenses y que algunos insensatos se han empeñado en extirpar de sus corazones. Sin embargo, hay comentaristas que insisten en que Sarah Palin no tiene un programa político adecuadamente detallado y ofrecido para el conocimiento de todos. Y yo me pregunto, ¿por qué debería tenerlo? O al menos, ¿por qué debería ofrecerlo ahora mismo? Ella no es candidata a nada, las elecciones de noviembre no le afectan de ninguna manera, no está siendo valorada por el electorado en competencia con otro candidato… En consecuencia, ¿por qué tiene que mostrar sus cartas? No es el momento para ello. Ya lo hará cuando le corresponda hacerlo, cuando sea candidata a algo (¡sí, sí, sí, Palin 2012!) y entonces sí que tenga que descubrir su programa político. Pero es que aún así, yo creo que con sus palabras y sus actos, Palin ya nos ha ofrecido suficientes datos como para que podamos escribir nosotros mismos cuál va a ser ese programa político. ¿O es que acaso alguien tiene alguna duda a estas alturas acerca de cuáles son sus posturas con respecto a la economía, la sanidad, la política de seguridad en Estados Unidos, la política exterior y la política de inmigración, por ejemplo? Pues yo no. Por sus actos los conoceréis, dice el Evangelio. Pues repasen Going Rogue (mis resúmenes les pueden servir también) y comprueben cuál fue su actuación en Alaska durante sus dos años como gobernadora del estado. En sólo esos dos años, Palin hizo más cosas que muchos otros gobernadores en dos mandatos. Y las hizo bien, muy bien. Y ahí les duele a los demócratas que, recordemos, cuando McCain anunció que iba a ser ella su compañera de ticket, la apoyaban fervorosamente en Alaska, gobernando con ella y la pequeña fracción del Partido Republicano que no estaba todavía en la cárcel por corrupta, algo que esos tipos se empeñan en ocultar.

De todas formas, cuando ya estamos a punto todos de tomarnos nuestras merecidas vacaciones, es la propia Palin quien ha querido hacer una especie de recopilatorio de cuáles son sus ideas sobre la política de defensa y de seguridad y, aprovechando su reciente intervención en la Freedom Fest celebrada en Norfolk (Virginia), poner los puntos sobre las íes sobre estas cuestiones (y de paso ponerle las orejas de burro al presidente). Lo que les ofrezco no es el discurso completo (¡lástima!), pero sí una especie de mezcolanza que la propia Palin publicó en su página de Facebook, para ilustración de todos sus seguidores y susto de sus adversarios que, y bien que lo saben desde siempre, se dan cuenta cada vez más de que la supuestamente tonta del bote de Alaska es más lista que los ratones colorados y que como la dejen tener un solo debate televisado con el presidente, el adicto al teleprompter ese está perdido. ¡Oh, qué ganas de verlo! ¿Falta mucho todavía para 2012?

Me temo que sí que falta, así que de nuevo me callo, que ya toca, y les dejo con mi (como siempre) lamentable traducción de la nota de Sarah Palin. Disfrútenla y piensen lo que sería tenerla a ella como comandante en jefe y líder del mundo libre en lugar de tener al organizador comunitario en jefe que tenemos ahora. Mejor no sigo porque me sulfuro. Disfruten pues de la mejor Sarah Palin.

LA PAZ MEDIANTE LA FUERZA Y EL ORGULLO DE AMÉRICA CONTRA LA POLÍTICA “ENEMIGO-CÉNTRICA”.

A principios de esta semana, hablé en el Festival de la Libertad en Norfolk, Virginia; y, evidentemente, se pidió a los medios de comunicación que se fueran -no por mí, eso es seguro. Yo quiero dar a conocer mi mensaje así que, a pesar de los periodistas que se inventan una historia acerca de «la gente de Palin nos sacaron a patadas» (¡eh!, mi comitiva de “gente de Palin” estaba integrada por una persona -mi hija de 15 años de edad, Willow- y no tengo duda de que podría enfrentarse a cualquier periodista, pero sé con certeza que ella no «sacó a patadas” a nadie del evento). De todos modos, aquí están algunas de las cuestiones clave sobre las que hablé.

Nota del traductor: Sarah Palin hace referencia burlona a la denuncia de un bloguista izquierdista que alegaba haber sido agredido, pateado concretamente, por “gente del entorno de Sarah Palin”. Evidentemente, eso no es más que una mentira porque, como bien dice la propia Palin, allí no había nadie más con ella que su hija Willow y aunque ésta tiene ya 15 años y es una digna alasqueña que sabe cazar, pescar, descuartizar un caribú y, sin duda, dar una patada en el culo a cualquier chico que pretenda tomarse demasiadas libertades con ella, es también una chica demasiado bien educada como para hacer eso. Vamos, que el bloguista ese es un vulgar mentiroso y se le van a caer los dientes, como me decía mi madre cuando era pequeño.

Gastos de defensa

Se necesita una gran cantidad de recursos para mantener la mejor fuerza de combate en el mundo -especialmente en un momento en que nos enfrentamos a la incertidumbre financiera y a una montaña de deuda que amenaza el futuro de todos.

Tenemos un gobierno federal que está gastando billones y que ha nacionalizado sectores enteros de nuestra economía: la industria automovilística, la industria de seguros, la atención de salud, los préstamos estudiantiles, la lista es interminable -todo ello a un coste enorme para el contribuyente. El coste de Obamacare por sí solo es probable que exceda los 2,5 billones de dólares.

Como resultado de todas estas leyes billonarias de gasto, Estados Unidos va a toda prisa hacia la quiebra. En 2020 podemos llegar a niveles de deuda de 20 billones de dólares -¡el doble de la deuda que tenemos hoy! Me recuerda a esa broma que leí el otro día: «¡Por favor, no le digas a Obama lo que viene después de un billón!

Algo tiene que hacerse con urgencia para detener la descontrolada máquina de gasto de Obama-Reid-Pelosi y ninguna agencia del gobierno debería ser inmune al control presupuestario. Debemos asegurarnos, sin embargo, que no hacemos nada para socavar la eficacia de nuestras fuerzas armadas. Si perdemos guerras, si perdemos la capacidad de disuadir a los adversarios, si perdemos la capacidad de proporcionar seguridad a nosotros y a nuestros aliados, ¡nos arriesgamos a perder todo lo que hace grande al país! Ese es un precio que no podemos permitirnos el lujo de pagar.

Esto puede ser obvio para usted y para mí, pero no estoy seguro de que lo sea para la administración Obama. No hay una sola tonta causa progresista por la que no hayan estado dispuestos a tirar miles de millones. Pero cuando se trata de gastos de defensa, de repente empiezan a predicar un mensaje de «austeridad fiscal». Nuestro secretario de Defensa declaró recientemente que el “chorro» de los gastos de defensa había terminado y que era hora de que el Departamento de Defensa se apretara el cinturón. Hay un chorro de gasto, de acuerdo, pero no es en defensa. ¿Sabía usted que EE.UU. en realidad sólo ocupa el puesto 25 en todo el mundo en gastos de defensa como porcentaje del PIB? Gastamos tres veces más en prestaciones y el servicio de la deuda que en defensa.

Ahora no me malinterpreten: no hay nada malo con la predicación del conservadurismo fiscal. ¡Quiero que el gobierno federal equilibre su presupuesto ahora mismo! Y no a la manera de Washington – que es aumentando sus impuestos para pagar sus irresponsables hábitos de gasto. Quiero que se haga a la manera americana: recortando el gasto, reduciendo el tamaño del gobierno y dejando que la gente retenga más de su dinero duramente ganado.

Pero la administración Obama no practica lo que predica. Es un gobierno que no produce un presupuesto por miedo a que nos percatemos lo imprudentes que han sido como gestores fiscales. Al mismo tiempo, amenaza con vetar un proyecto de ley de defensa ¡a causa de un motor a reacción extra!

Esta administración puede estar dispuesta a recortar el gasto de defensa, pero lo está incrementando en todas las otras partes. Creo que deberíamos hacerlo al revés: reducir el gasto en otros departamentos – aparte de la defensa. No debemos reducir la calidad de nuestra seguridad nacional.

La armada de Estados Unidos

El secretario Gates habló recientemente sobre el futuro de la Armada de EE.UU. Dijo que hay que «preguntarse si el país realmente puede permitirse una marina de guerra que se basa en destructores por valor de 3 a 6 mil millones de dólares, submarinos de 7 mil millones de dólares y portaaviones de 11 mil millones de dólares». Llegó a preguntar: «¿Necesitamos realmente… más grupos de combate por otros 30 años cuando ningún otro país tiene más de uno?».

Bueno, mi respuesta es bastante simple: sí, podemos y sí, lo hacemos porque debemos hacerlo. Nuestra Armada tiene responsabilidades mundiales. Patrulla las vías marítimas y salvaguarda las libertades de nuestros aliados – y de nosotros mismos. La Armada ahora mismo sólo tiene 286 buques y ese número podría reducir. Eso limitará nuestras opciones, amplia los turnos de servicio para el personal de la Armada, reduce nuestra capacidad de asegurar a nuestros aliados y disuadir a nuestros adversarios. La administración Obama parece extrañamente despreocupada ante esta perspectiva.

La herencia en política exterior de Obama

Cuando George W. Bush llegó al poder, heredó un ejército que había sido recortado profundamente, una Al Qaeda que no había sido desafiada y una aproximación al terrorismo que se centraba en casos judiciales en lugar de destruir a los que trataban de destruirnos. Hemos visto el resultado de todo ello en el 11-S.

Cuando el Presidente Obama asumió el poder, heredó un ejército que estaba ganando en Irak. Heredó fieles aliados y alianzas fuertes. Y gracias a los cojos medios de comunicación que le adulaban, tenía la ventaja de una popularidad mundial sin precedentes. ¡Qué ventaja! Así que los esquemas de su política exterior deberían haber estado claros. Comprometerse en la Guerra contra el Terror. Comprometerse a ganar -no a terminar, sino a ganar la guerra en Afganistán. Comprometerse a luchar contra el extremismo islámico violento dondequiera que éste encuentre refugio. Trabajar con nuestros aliados. Ser firme con nuestros adversarios. Promover la libertad, algo no menos importante porque mejora nuestra seguridad. Lamentablemente, estos principios básicos parecen haber sido descartados por Washington.

La guerra contra el terror

Su gobierno ha prohibido la frase «guerra contra el terror», prefiriendo en su lugar tonterías políticamente correctas como «operaciones de contingencia en ultramar.» Su secretario de Seguridad Interior llama a los actos de terrorismo «desastres causados por el hombre». Su temerario plan para cerrar Guantánamo (ya que no hay lugar al que ir después de que éste sea cerrado) se enfrenta ahora a una oposición bipartidista.

La Fiscalía General acaba de anunciar que la decisión sobre dónde juzgar a los terroristas como el cerebro del 11-S Khalid Sheikh Mohammed no sería anunciada hasta después de las elecciones del midterm. ¿Hay algo que tenga miedo de decirnos?

La nueva Estrategia de Seguridad Nacional del presidente ni siquiera utiliza la palabra «islámico» para referirse a la violencia extremista. ¿Cree que la ideología de aquellos que tratan de matar a los estadounidenses es irrelevante? ¿Cómo podemos tratar de derrotar a un enemigo si no reconocemos lo que los motiva y cuáles son sus objetivos finales? El presidente Obama puede pensar que está siendo políticamente correcto eliminando el término, pero va en contra de la realidad. Como señaló el senador Joe Lieberman, negarse a utilizar la palabra “islámico” para describir la naturaleza de la amenaza que enfrentamos es «orwelliano y contraproducente».

Afganistán

En Afganistán, es cierto que el presidente Obama aprobó el despliegue de fuerzas adicionales para el conflicto  -la mayoría, pero no todas las tropas solicitadas por los comandantes sobre el terreno. Pero tuvieron que pasar meses de indecisión para llegar a ese punto y vino a un precio muy alto -un julio de 2011 como fecha para comenzar la retirada.

¡Esta fecha fue arbitraria! No tiene ninguna relación con las condiciones sobre el terreno. Se envían todos los mensajes erróneos a nuestros amigos y a nuestros enemigos. Sabemos que nuestros comandantes en el terreno no se sienten cómodos con ella.

Como el gran héroe de guerra de la Armada, el senador John McCain, ha dicho recientemente: «La decisión de comenzar a retirar nuestras fuerzas de Afganistán arbitrariamente en julio de 2011 parece tener exactamente el efecto que muchos de nosotros predijimos que tendría: el de convencer a los actores clave dentro y fuera de Afganistán de que Estados Unidos está más interesado en irse que en triunfar en este conflicto».

¿Cree el presidente realmente que los talibanes y Al Qaeda no se sienten reforzados por su señalamiento de una fecha de inicio de la retirada? Ellos ahora creen que pueden ganarle simplemente sobreviviéndonos. ¿Qué tipo de efecto se cree que esto tendrá en la moral de nuestras tropas -y de nuestros aliados?

Enajenándose a nuestros aliados

No es la única área donde el gobierno de Obama ha fallado a nuestros aliados. Agravó una cuestión de límites de menor importancia en Jerusalén hasta convertirla en una importante controversia con nuestro aliado más importante en Oriente Medio, Israel. Trató pobremente al primer ministro israelí en Washington. Cuando una flotilla patrocinada por los turcos amenazó con violar un bloqueo legal israelí de la Gaza dirigida por Hamas, la administración Obama se quedó callada. Cuando comandos israelíes fueron asaltados mientras trataban de evitar que transportes sin control fueran entregadas a los terroristas de Hamas, la administración Obama envió señales de que podría permitir una investigación de la ONU sobre la materia -una investigación que estaría seguro de condenar a nuestro aliado Israel y quejarse por la difícil situación de Hamas. Los leales aliados de la OTAN en Europa central fueron socavados por la cancelación de un programa de defensa antimisiles, prácticamente sin previo aviso. Al mismo tiempo, da un trato preferencial a Rusia y China mientras permanece en silencio sobre sus violaciones de los derechos humanos.

Mimando a los adversarios

Mientras tanto, la administración Obama se acerca a algunos de los peores regímenes del mundo. Se dan la mano con los dictadores como Hugo Chávez, envian cartas a los mulás iraníes y enviados a Corea del Norte, reducen las sanciones a Cuba y hablan de hacer lo mismo con Birmania. Y eso cuando no están en una de sus giras de petición de disculpas por todo el mundo.

¿Obtenemos algo a cambio de todas estas reverencias y peticiones de perdón? No, no lo obtenemos. Sí, Rusia votó a favor de una floja resolución de sanciones contra Irán, pero de inmediato dijo que podría vender misiles antiaéreos avanzados a Irán de todos modos y que no pondrían fin a su cooperación nuclear. En respuesta al no provocado hundimiento de un buque de la Armada de Corea del Sur por Corea del Norte, China nos advirtió de que no participáramos en maniobras militares con nuestro aliado.

Y mientras el presidente Obama deja que Estados Unidos sea zarandeado a gusto de Rusia y China, nuestros aliados se preguntan sobre el valor de una alianza con EE.UU. Tienen que estar preguntándose si vale la pena.

Una política exterior «enemigo-céntrica»

Un prominente funcionario checo ha llegado a llamar a la política exterior de Obama «enemigo-céntrica». Y esta aproximación «enemigo-céntrica» tiene consecuencias reales. No sólo desconcierta a nuestros aliados, les preocupa. Cuando se combina con menos gastos de defensa, indica al mundo que tal vez ya no puedan contar con nosotros y que tenemos otras prioridades que ser el líder del mundo que mantiene la paz y proporciona seguridad en Europa, en Asia y en todo el mundo.

Junto con esta política exterior enemigo-céntrica, se observa una disminución de la larga tradición bipartidista de hablar de derechos humanos y de democracia. La secretaria de Estado dijo que no sacaría el tema de los derechos humanos con China porque «ya sabe lo que van a decir». Los programas de promoción de la democracia han sido cortados. Apoyar a los valientes iraníes que protestan contra su gobierno no prosperará porque el presidente Obama prefiere intentar llegar a un acuerdo con sus opresores.

Cuando los dictadores del mundo ven a Estados Unidos despreocupado por los derechos humanos y la libertad política, exhalan un suspiro de alivio porque saben que tienen las manos libres para reprimir a su propio pueblo.

Esto va en contra de los mismos ideales en que se fundó nuestra república. Hay una larga tradición bipartidista de hablar en favor de la libertad –desde Franklin Delano Roosevelt hasta Ronald Reagan. Estados Unidos pierde algo muy importante cuando su presidente relega los derechos humanos y la libertad a un segundo plano de sus prioridades internacionales.

Una visión diferente de Estados Unidos

Tenemos un presidente, quizás por primera vez desde la fundación de nuestra república, que no parece creer que Estados Unidos sea la mayor fuerza para el bien sobre la tierra que el mundo ha conocido jamás.

Cuando se le preguntó si creía en el excepcionalismo estadounidense, el presidente Obama respondió: «Creo en el excepcionalismo estadounidense como sospecho que los británicos creen en la excepcionalidad británica y los griegos creen en la excepcionalidad griega». Asombroso, asombroso.

Creo que esta declaración dice mucho de su visión del mundo. ¿No ve nada único en la experiencia estadounidense? ¿En serio? ¿Nuestra fundación y nuestros padres y madres fundadores? ¿En serio? ¿Y nuestra historia en los últimos dos siglos y medio?

¿En serio? ¿Él no ve nada único en unos Estados Unidos que lucharon y ganaron dos guerras mundiales y en cuya victoria no buscaban ni una pulgada de territorio ni un dólar de saqueo? ¿Él no ve nada único en unos Estados Unidos que, aunque agotado por los conflictos, aún sentó las bases para la seguridad en Europa y Asia después de la Segunda Guerra Mundial? ¿Él no ve nada único en unos Estados Unidos que prevaleció contra la ideología del mal durante la Guerra Fría? ¿Él sólo ve un país que tiene que disculparse por todo el mundo, especialmente ante los dictadores?

El presidente Obama en realidad parece renuente a aceptar incluso el poder norteamericano. A principios de este año cuando se le preguntó sobre su vacilante proceso de paz en Oriente Medio, dijo que «nos guste o no, seguimos siendo una superpotencia militar dominante». ¿Nos guste o no?! ¿En serio? Señor presidente, esto puede una novedad para usted, pero a la mayoría de estadounidenses realmente les gusta. Y también les gusta a nuestros aliados. Ellos saben que fue nuestro poderío militar lo que liberó a incontables millones de la tiranía, la esclavitud y la opresión en los últimos 234 años. Sí, nos gusta. Como una superpotencia dominante, Estados Unidos ha ganado las guerras calientes y frías, nuestras fuerzas armadas han promovido la causa de la libertad y mantuvo en jaque a los poderes autoritarios.

Es en el mejor interés de Estados Unidos y del mundo que nuestro país siga siendo la superpotencia militar dominante, pero bajo el liderazgo del presidente Obama ese dominio puede estar escapándose. Es el resultado de una agenda que huele a complacencia y derrotismo.

(Continué hablando a partir de entonces acerca de nuestra necesidad de poner fin a las actitudes negativas y derrotistas de aquellos que están en la cima. Hablé más sobre el excepcionalismo estadounidense y Willow y yo terminamos una gran noche con algunos grandes patriotas. Sentimos que los medios optaran por reportar de otras cosas que no fueron de hecho lo que realmente sucedió en el evento).

Sarah Palin

Pues hasta aquí este magnífico avance de lo que será una presidencia Palin. Y recuerden que sigo en mis trece de que el vicepresidente debería ser el actual gobernador de Texas, Rick Perry. Sí, ya sé que hay opiniones y que algunas de las más populares prefieren a Liz Cheney, Marco Rubio, Michelle Bachmann, etc. Cualquiera de ellas me gustan, pero si hay alguna que no soporto y que nunca lograré tragar es ésa que pretende que sea Mitt Romney su compañero de ticket en aras de una supuesta unidad del partido de cara a las elecciones de 2012. En primer lugar, a Romney no quiero ni verlo porque no lo soporto; en segundo lugar, Romney y sus padrinos, los RINO del Partido Republicano, lo que deberían hacer es pedir la baja del partido y largarse a donde realmente pertenecen, al Partido Demócrata; en tercer lugar, meter a Romney en el ticket es lo mismo que irse a la cama con un escorpión enfurecido entre las sábanas; en cuarto lugar, Sarah de tonta no tiene un pelo y estoy seguro de que se ríe a mandíbula batiente cada vez que lee algo en ese sentido. Y punto final que ya he hablado demasiado acerca del chulo ese. Vamos, hombre, faltaría más.

Y el domingo, les hablaré de mi libro (que en realidad es nuestro libro), como decía aquél.


El discurso de Sarah Palin en Stanislaus University – La izquierda, loca de atar (y II)

05/07/2010

 

¡Lo prometido es deuda! (si yo tuviera escudo de armas y lema familiar, sería éste, ciertamente). Me callo por fin y paso a ofrecerles mi lamentable traducción del discurso de Sarah Palin en la California State University, Stanislaus. Aquí tienen el video también. Disfrútenlo. El discurso dura cuarenta minutos y Sarah Palin lo dio sólo con unas pocas notas delante de ella. “¿Y el teleprompter? ¿Dónde estaba el teleprompter?”, clama desesperado el enano izquierdista que tengo infiltrado en el blog. “¡Nadie puede hablar durante cuarenta minutos sin teleprompter! ¡El presidente no lo hace y estudió en Harvard!”, insiste frenéticamente. Sí, es cierto, el presidente no lo hace pese a que estudió en Harvard, pero Sarah Palin, sí y tal vez precisamente porque no estudió en Harvard. Ventajas de las universidades pequeñas: sus estudiantes tienen que ganarse el título y demostrar su excelencia realmente y no simplemente pretender que todos den por supuesto lo excelentes que son. Sí, sí, ya me callo… Perdón.

Haga clic aquí para ver la intervención de Sarah Palin en Stanislaus University

DISCURSO DE SARAH PALIN EN STANISLAUS UNIVERSITY

Muchísimas gracias. Gracias. Bueno, muchas gracias. Oh, valoro mucho esta cálida presentación y así se lo digo. Usted es un hombre audaz. Usted es un hombre audaz [refiriéndose a Hamid Shirvani, el presidente de la Stanislaus].

Me siento muy honrada de estar aquí y antes de empezar déjenme que revisemos rápidamente una cuestión de logística en primer lugar. Tengo mi agua. ¿Tengo mis pajitas? Quiero mis pajitas. Y las quiero dobladas, por favor. Gracias. Al menos eso es lo que he leído en algunos de los cojos medios de comunicación, que yo estaba exigiendo pajitas o alguna otra cosa ridícula.

Así que estoy muy contenta de quitarnos de en medio algunas de esas demandas contractuales y haber llegado a un acuerdo. Aunque creo que para mi oficina de oradores, el Washington Speakers Bureau, creo que éste fue uno de los contratos más difíciles que nunca hayan llegado a cerrar. Encontraron que era un caso difícil de resolver porque les parecía estar negociando con todo el estado de California.

Y,  ya saben, el resto de nosotros buscando y buscando a santo de qué venían algunas de esas travesuras, que es lo que parecían. ¡Ah,  Jerry Brown [fiscal general del Estado de California que se mostró muy crítico con la presencia de Sarah Palin] y sus amigos! Vamos, esto es California, ¿no tienen nada mejor que hacer? Santo Cielo. Prioridades.

Y aunque, ya saben, esperaba unas pocas protestas, manifestantes, pensé en, ya saben, ponerme un poco en plan de Ann Coulter. Y pensé; “Hey, sería genial”. Me encanta Ann Coulter. Y, ya saben,  bien por ella que va a campus universitarios y habla sobre Estados Unidos y los valores estadounidenses y principios y lo que significa ser un estadounidense. Y yo esperaba un poco de eso, pero no ha habido nada más que belleza absoluta aquí en esta parte de California y yo a disfrutar de tanta hospitalidad. Y, de nuevo, aprecio mucho su audacia. Gracias por la invitación.

A pesar de alguno alborotos previos a la cena, estoy, tal y como les digo, muy contenta de estar aquí y haber vuelto a la hermosa California, especialmente a Turlock. Es precioso. Y refiriéndome a muchos de ustedes que son dueños de negocios agrícolas familiares en esta parte del país, siento un gran respeto por ustedes.

De hecho, si en algo nos parecemos ustedes y yo, Todd y yo, es en que nosotros tenemos un negocio familiar de pesca y eso también es un negocio que se desea transmitir de generación en generación. Y hoy Todd no podía estar conmigo porque ha ido a nuestra zona de pesca esta mañana en la bahía de Bristol y es ahí donde está. Pero después de hablar con muchos de ustedes hoy y oírles hablar sobre su espíritu emprendedor y su ética laboral al tiempo que educan a sus hijos para ayudarles a hacerse cargo de algunas de las empresas agrícolas familiares. Es muy impresionante y he aprendido mucho acerca de su negocio incluso en este día y nunca voy a llamar a una almendra una almendra de nuevo. Voy a llamarla una amendra, como dicen ustedes. ¿Sí? Pero es esa relación entre esa empresa familiar agrícola y nuestro propio negocio de pesca comercial la que realmente ha trabado una conexión maravillosa.

Y es bueno estar aquí en la casa de los Warriors. Yo me crié como una Warrior también. Wasilla Warriors es nuestra mascota, así que siento la conexión. Y yo le hablaba a Willow sobre eso y estoy feliz de que mi hija, Willow, pueda estar hoy aquí conmigo. Y sí, mi entorno está conmigo hoy, el único, Willow, eso es lo que tengo. Por lo tanto, va a ser divertido que este contrato acabe siendo llevado ante los tribunales y se acabe viendo cuáles eran las demandas que se impusieron antes de acordar este evento. Yo creo que van a quedar realmente sorprendidos de que en realidad no haya ninguna. No hay ninguna controversia creo en esto. Y me siento tan feliz de que ustedes se ciñeran al programa, se ciñeran a lo pactado y no cancelaran mi presencia. Se lo agradezco mucho, chicos. De verdad.

Es evidente que hay algo especial aquí, algo diferente, y realmente creo que se pone de manifiesto en un evento como éste. Y yo lo aprecio tanto.

El Estado Dorado. Siempre ha sido agradable estar aquí, siempre me sentiré especial aquí, un lugar especial en mi corazón es California porque éste es territorio Reagan. Y tal vez fuera cosa del destino que el hombre que fue al Eureka College de California se convirtiera en parte intrínseca del Estado Dorado. Y fue aquí donde, por supuesto, Reagan se hizo famoso como actor y luego se distinguió como un buen gobernador y luego lanzó su candidatura a la presidencia. Y entonces, por supuesto, encontró su lugar final de descanso bajo el cálido y azul cielo de California.

Pensé en Reagan cuando me preparaba para esta noche porque, por supuesto, hablando en una universidad de California, como digo, me di cuenta de que probablemente tendría un comité de bienvenida de un puñado de, quizás, enojados manifestantes. No pude dejar de recordar que, como gobernador de California, Reagan también tuvo su parte de enfrentamientos en su estado con los manifestantes universitarios de aquí. Y, recordándolo, ellos le llamaron fascista. Le llamaron idiota. Pero el Gipper [se refiere al pseudónimo de Reagan] les devolvería el cumplido y él no era uno de los que rehuían la confrontación. Leí una cita de él, al hablar de esos manifestantes, donde dijo que «se parecen a Tarzán, caminan como Jane y huelen como Chita». Así, tal vez no han cambiado mucho en los últimos cuarenta años.

A Reagan le gustaba gastar una broma o dos sobre las protestas universitarias esencialmente porque reconocía que estaban protestando sobre diferentes puntos de vista y no porque pretendiera dejar de aplicar la libertad de expresión a aquellos con los que quizá estaría en desacuerdo. Pero nunca dejó de insistir en la importancia de la educación que sus estudiantes en el estado, que los estudiantes estaban recibiendo. Y de eso quiero hablar esta noche.

Y una vez más es un gran honor el estar aquí. Con esta organización, asociada a uno de los sistemas universitarios más prestigiosos de la nación y uno de los más grandes del mundo. Felicitaciones por su éxito y por ayudar a preparar a nuestros próximos líderes, los guerreros que conducirán esta nación. Felicidades por su éxito.

Y con un magnífico campus, magnífico.

Ciertamente he estado pensando mucho acerca de este tema, la enseñanza de la próxima generación.

Quiero hablar acerca de nuestra educación cívica y la forma en que tiene que ver con los ideales de nuestra juventud y los ideales de nuestro país. Y el tema me llegó hace unas semanas cuando estaba pronunciando un discurso en Denver y tuve el privilegio después de la intervención de participar en una sesión de preguntas y respuestas junto a dos locutores de radio muy respetados: Hugh Hewitt y Dennis Prager, los dos individuos muy audaces y por los que tengo un gran respeto. Así que estuve encantada de participar.

Una de las cuestiones planteadas por el moderador fue: «Si usted pudiera nombrar una sola amenaza a nuestra sociedad, una por encima de las demás, ¿cuál sería?». Y Dennis Prager fue el primero en responder a esta pregunta. Ahora, él podría haber escogido cualquier número de importantes amenazas para la vida de nuestro país y nuestra cultura. Podría haber dicho que la mayor amenaza es nuestra explosiva deuda nacional y los déficits rompedores de records porque es ahí donde vamos, poniendo a nuestro país en el camino hacia la insolvencia. Y eso es inmoral, no es ético, está mal, es un robo generacional porque estamos robando la oportunidad a nuestros hijos ya que incurrimos en esta gran deuda y seremos un país insolvente si seguimos por este camino.

Así, él podría haber dicho eso y recordar a la gente que con esta deuda que estamos menos seguros y somos menos libres. O podría haber dicho que la creciente amenaza a nuestra seguridad energética es la amenaza número uno porque Washington, y parece que nuestro presidente, no entiende el vínculo inherente entre la producción de energía doméstica y nuestra propia prosperidad, o la energía y nuestra libertad, la energía y nuestra seguridad. Parece ser que hay un eslabón perdido ahí que en Washington no entienden. O podría haber dicho que es el intento del terrorismo internacional de destruirnos, tanto en casa como en el extranjero, o de destruir a nuestros aliados, a un aliado consistente y fuerte como lo es Israel, una amenaza para ese país. Podría haber mencionado eso.

Pero, en cambio, Prager miró más allá de estas amenazas inmediatas y se centró en algo que nos afectaría a todos para siempre a más largo plazo. Su temor más grande era que no estuviéramos transmitiendo lo que significa ser un estadounidense a esta nueva generación. Y yo estuve de acuerdo con sus preocupaciones, pero le ofrecí un alivio cuando fue mi turno de respuesta. Tuve que preguntarle a continuación, reconociendo que si no lo estamos haciendo lo mejor que podemos, transmitiendo lo que significa ser un estadounidense a la próxima generación, entonces cómo podía ser si no estamos enseñando a la próxima generación lo que significa ser libre y lo importante que es ser libre, cómo podía ser entonces que tengamos a los mejores de Estados Unidos, a nuestros miles y miles de hombres y mujeres jóvenes que han escogido ser patriotas, y mi propio hijo adolescente es uno de ellos , haber elegido, pese a que nunca han probado nada distinto a la libertad, alistarse en nuestro ejército de los Estados Unidos. Pues porque saben inherentemente lo importante que es luchar por la libertad y proteger nuestra Constitución y que Estados Unidos es digno de ser defendido.

Ellos se alistan pues, voluntariamente, en nuestro ejército para defender la libertad. Y eso es alentador. Así que, cómo podía ser, no puede ser posible que estemos perdiendo a esta nueva generación, no cuando ves la prueba de ese reconocimiento de la importancia de América y la vida de ese ideal americano es cuando ves a quiénes están reclutando nuestras fuerzas armadas. Tal vez estos niños, y muchos de ellos son sólo niños, tal vez no sean capaces de articular lo que es, lo que inculca en ellos esa creencia inherente de que necesitan proteger a los beneficios de la libertad, pero lo entienden. Y gracias a Dios que lo entienden. Y están dispuestos a sacrificar sus vidas por nosotros. Y arriesgarlo todo para el sacrificio, para defender y servir a algo más grande que uno mismo, para defender la idea estadounidense de la libertad. Gracias a Dios por estos niños.

Pero incluso teniendo en cuenta el ejemplo de los jóvenes, como nuestros soldados masculinos y nuestros soldados femeninos, Prager tiene razón. Tal vez es que no estamos educando a nuestros jóvenes adecuadamente en el carácter excepcional de Estados Unidos y nuestra libertad. Es preocupante porque esta creencia en el excepcionalismo estadounidense es algo que cada nueva generación tiene que hacer suya si esperamos que nuestra república y nuestras libertades sean seguras y podamos vivirlas. Para que Estados Unidos sobreviva tenemos que pasar esto a la próxima generación. Y para entender eso tenemos que volver al comienzo de nuestra república y al corazón de lo que significa ser un estadounidense.

Y yo deseo realmente que tuviéramos mucho tiempo esta noche para hablar de un montón de ejemplos de las cosas que estamos haciendo bien, pero cosas que podríamos hacer mejor. No tenemos mucho tiempo pero quiero centrarme en ello. Ya saben, la mayoría de países son el resultado de accidentes de la historia, ya sea guerras de conquista o tratados de paz, cosas así. Pero Estados Unidos es diferente. No somos el producto de un accidente histórico, sino de un plan. Somos el único país en la historia que fue fundado sobre un ideal. Y ese ideal es la libertad. «Sostenemos que estas verdades son evidentes por sí mismas: que todos los hombres son creados iguales, que son dotados por su Creador con ciertos derechos inalienables, entre los que se cuentan la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad». Y el genio de nuestros Padres Fundadores es que cogieron eso, cogieron lo que la Declaración de Independencia llama las leyes de la naturaleza y del Dios de la naturaleza y las leyes que, como el apóstol Pablo dijo, están escritas en nuestros corazones, y estos antepasados providenciales nuestros diseñaron una constitución que los consagraba y permitía a la gente a vivir según ellos. Y es un regalo maravilloso el que se nos da en la presente Declaración de Independencia, que en realidad era una declaración de responsabilidad también, y en nuestra Constitución, incluyendo la Declaración de Derechos.

Hay una anécdota sobre Margaret Thatcher, que es un gran admiradora de Estados Unidos, fue una buena amiga de Ronald Reagan, que recuerdo. Ella estaba de acuerdo con esta consagración de la libertad dada por Dios. Se dice que durante una reunión del partido conservador británico sobre el mejor curso de acción a tomar durante una crisis económica en los años 70, estaba discutiendo con uno de esos llamados pragmáticos que argumentaba a favor de una tercera vía entre el capitalismo de libre mercado y el socialismo, y antes incluso de que terminara, Margaret Thatcher buscó en su bolso y sacó una copia de “La constitución de la libertad”, de Hayek, y la tiró sobre la mesa diciendo: «¡Esto es en lo que creemos!». Esta “constitución de la libertad».

Y de esa misma forma, todos los estadounidenses deberían y podrían cada vez que se enfrentan al reto de definir lo que Estados Unidos realmente significa, cada estadounidense debería ser capaz de sacar una copia de nuestra propia constitución de la libertad y decir: «Esto es lo que defendemos. Esto es lo que nos hace diferentes». Es la misma cosa que todos nuestros políticos y nuestros hombres y mujeres en uniforme, es lo que juran conservar y defender. Y es el pegamento que nos mantiene juntos como estadounidenses en nuestra lucha por una unión más perfecta.

Pero algo parece faltar, sobre todo en este último año o dos. Algo falta en este día más ilustrado, que supongo que es como algunas personas desean considerar el día de hoy. Pero aquí está el quid de la cuestión. Es a lo que Dennis Prager estaba tratando de llegar. La Constitución nos ha dado una sorprendente serie de valiosos principios de gobierno e instituciones. Esta constitución nos proporciona controles y balances y un gobierno limitado con los poderes enumerados y un poder judicial independiente y derechos de los estados, que están amparados por la Décima Enmienda.

Pero aunque los principios que están consagrados siguen siendo la mejor protección posible contra la tiranía, no son suficientes por sí mismos para asegurar la supervivencia y el éxito de la libertad o la supervivencia de nuestro país. Ha habido otros países que han intentado a veces vivir por las mismas leyes de la naturaleza que Estados Unidos tiene, que nosotros consagramos en nuestros documentos fundacionales. Países que han intentado copiar nuestra constitución y nuestras instituciones, pero que si lo piensas bien, no todos ellos son libres todavía. Pero están en la naturaleza humana el querer ser libre. Las personas que viven en estos países sí quieren ser libres. Hay países que han intentado copiar lo que es Estados Unidos, sí, pero no han tenido éxito.

En todos los países, incluso en las peores tiranías, hay gente lo suficientemente valiente para defender la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad. Y es este esfuerzo el que contribuyó a la caída del Muro de Berlín, recuerden, e hizo a un hombre valiente que miraba venir una columna de tanques cerca de la Plaza de Tiananmen y reunió a miles de personas en las calles de Teherán para desafiar al dictador no electo de su país. Qué contraste, por cierto, entre el último sacrificio hecho hace un año por la bella y joven iraní Neda Soltan. Ella recibió un tiro en el corazón y se desangró hasta la muerte en las calles de Teherán mientras se manifestaba por su libertad y por los derechos de las mujeres, por la igualdad de derechos. Qué contraste entre ella y los estudiantes o los agitadores, tal vez ni siquiera estudiantes aquí, que malgastan su precioso tiempo volcando contenedores de basura antes de este evento con el fin de acallar a alguien con quien piensan por adelantado que tal vez estarán en desacuerdo. ¡Qué desperdicio de recursos!

Y ahora una sugerencia para los que gustan de volcar contenedores de basura: en lugar de tratar de decirle a la gente que se sienten y se callen no vayan a decir algo, pasad algún tiempo diciéndole a la gente, como nuestro presidente, que se levanten de una vez y hablen por aquellos que, como Neda mientras buscaba la libertad, por la que estaba dispuesta a morir, y hablen de la represión brutal, brutal del Movimiento Verde  en Irán y así tal vez se convierta en una Revolución Verde. Los estudiantes y los agitadores que han sido parte de la controversia de este evento esta noche, así lo quiera Dios, tenéis la posibilidad de sostener el liderazgo de Estados Unidos en los altos ideales sobre los que se fundó este país. Por favor, aprovechad esa oportunidad. Realmente es mucho más digno e importante que hurgar en los cubos de basura para revelar al mundo tal vez la demanda de alguien por pajitas dobladas.

Hablando con un par de nuevos amigos que he hecho en este día, que han venido de Irán, me han recordado la oportunidad de Estados Unidos de exportar nuestra democracia. Eso es muy alentador e inspirador para mí para seguir dando la buena batalla.

Pero, bien, volviendo de nuevo al tema, sin embargo, tan inspiradoras como son estas revoluciones, estas revoluciones mencionadas, y tan afortunados como puedan ser los esfuerzos de emular nuestra exitosa Constitución, al final podemos aprender mucho tanto de los intentos fallidos de copiar nuestras instituciones como de los exitosos. Y de nuevo, me gustaría que tuviéramos más tiempo.

Una forma de obtener más ejemplos de algunas de estas revoluciones fallidas y de lo que podemos aprender de ellos para no repetir los errores de otros países en el pasado, voy a hacer un pequeño anuncio aquí. Si usted ve los viernes Los Viernes de los Fundadores, Glenn Beck lo destaca mucho… Los Viernes de los Fundadores, este es mi recordatorio. Sí, la versión pobre de un teleprompter. Eso es una cosa que olvidaron, no proporcionarme un teleprompter. Pero, sí, cuando los medios de comunicación te dan limones, haz limonada. En cada discurso que pronuncio, hago un anuncio gratuito porque sé que ustedes, muchachos, van a recogerlo. Así, Los Viernes de los Fundadores de Glenn Beck. Él les dirá mucho más acerca de esos intentos fallidos, tal vez de los intentos exitosos de otros países, incluso en el pasado.

Y aunque los historiadores coinciden en que, por ejemplo, un ejemplo del que se habla mucho, la república alemana de Weimar tenía la constitución más democrática del mundo. ¿Lo sabían ustedes? En toda la historia humana. Los historiadores miren hacia atrás y dicen que su constitución era aún más democrática que la nuestra. Pero esa misma constitución permitió a un hombre llamado Adolf Hitler tomar el poder debido a algunas vaguedades en la ley y algunas malas interpretaciones de lo que realmente decía la constitución. Permitió, permitió entonces a Adolf Hitler tomar el poder y sumir al mundo en un período de pesadilla de caos y guerra y genocidio. Estos fallos muestran que la libertad no sólo depende de las garantías institucionales o palabras escritas en un documento. Es también y sobre todo una cuestión de cultura.

Y aquí es donde el sistema universitario entra en juego. Para la mayoría de los estadounidenses, la libertad no es sólo un ideal o palabras escritas en una carta de libertad. Es una forma de vida para la mayoría de nosotros. Está en nuestros animados debates públicos que nos dan la oportunidad de ejercer nuestro derecho constitucional a la libre expresión. Y está en nuestro mercado libre que da a cada uno la idea y la voluntad de trabajar duro, trabajar realmente duro, hacer algo de sí mismos en este país. Y es en nuestras asociaciones de voluntarios y en nuestra cultura de las mayores y más generosas donaciones caritativas voluntarias. Cuando vemos a alguien que tiene problemas, por ejemplo, nuestra respuesta instintiva para la mayoría de nosotros no es: «¿Qué va a hacer el gobierno al respecto?». No, nuestra respuesta es: «¿Qué puedo hacer para ayudar? ¿Cómo puedo ir allí y ayudar?».

Es este amor por la libertad y el capital moral que se genera a través de este mercado libre y estas asociaciones libres lo que ha ayudado a mantener nuestro gran experimento republicano vivo durante más de doscientos años. Así que cuando vemos a Washington apartarse de esos ideales, del sistema de libre mercado que ha convertido a Estados Unidos en el país más fuerte, más fuerte y más generoso de la tierra es porque sabemos que estamos en el camino equivocado ahora mismo y que tenemos que cambiar algunas cosas.

Estados Unidos puede fundarse en las leyes, pero se sostiene por una moral que es reconocida por muchos otros países incluso. Como dijo el escritor francés Alexis de Tocqueville, Estados Unidos es un gran país porque Estados Unidos es un buen país. Y el dato de Dennis Prager esa noche en Denver fue que esta cultura tan estadounidense de la libertad necesita protección y cuidado y debe ser cuidadosamente entregada de una generación a la siguiente y Reagan solía hablar de esto también. Por lo tanto, desearía que  las escuelas, las universidades, tomaran nota de este mensaje. Es donde la educación entra realmente en juego.

El presidente Kennedy habló una vez de la «supervivencia y éxito de la libertad». Bueno, no puede haber supervivencia y éxito de la libertad sin una educación en la libertad y los valores que hicieron grande a este país. Valores como el ahorro y la perseverancia y la responsabilidad y el trabajo ético, la recompensa por el trabajo duro y honrado.

Y algunos podrían decir que hay una contraindicación aquí tal vez. Dirían que la libertad académica es incompatible con nuestra necesidad de una educación cívica que inculque en los jóvenes la sabiduría y la gracia patriótica necesaria para la supervivencia y el éxito de la libertad. Pero creo que están equivocados. Creo que están peligrosamente equivocados. El hecho de que permitamos o debamos permitir un debate académico saludable y libre de todas las ideas no significa que tengamos que creer que todas las ideas son igualmente válidas. Por desgracia eso se encuentra demasiado a menudo a  tan sólo un pequeño paso de afirmar que no hay sólo una respuesta correcta a la pregunta: «¿Qué es lo correcto, qué es bueno o justo o verdadero?». De decir que no hay respuestas correctas a esas preguntas. Ahí es donde entra en juego el relativismo que se convierte en nihilismo. Y luego nos encontramos con gente que dice: «Bueno, entonces nada es verdad. Por lo tanto, todo vale. Sólo tienes que hacer. Todo está permitido. No existe la verdad”. Que ese relativismo cultural se limite sólo a unos pocos individuos, las excepciones a la norma, eso es una cosa, pero ya hemos visto lo que ocurre cuando sectores enteros de la sociedad caen en esa trampa.

Tomen nota de ello. Consideren si la brutalidad del comunismo hubiera durado tanto tiempo como lo hizo si no hubiera sido por un gran grupo de personas aquí en el Oeste que estaban dispuestos a acogerlo esencialmente por miedo a atreverse a siquiera condenarlo. Durante mucho tiempo, amigos, fue una especie de sofistificación el  tomar una postura intermedia entre la libertad y el comunismo. Y tuvo que ser un supuestamente poco sofistificado postgraduado del humilde Eureka College el que hiciera agachar la cerviz al comunismo y lo hizo con sólo llamar “imperio del mal” a lo que era el mal.

Hay una lección importante para nosotros hoy. Una república libre sólo puede sobrevivir si sus ciudadanos están dispuestos y son capaces de defenderlo ideológicamente y defender sus principios fundacionales. Y hay una vieja broma conservadora. Dice que un elitista liberal es alguien que es tan amplio de mente que ni siquiera puede defender sus propias creencias en una discusión. Creo que puedo aplicárselo a algunos de los profesores universitarios que he conocido.

Pero ya saben, eso no es realmente una broma cuando tal y como hemos visto recientemente, diplomáticos estadounidenses van pidiendo disculpas a una dictadura comunista porque uno de nuestros estados hermanos aquí en nuestros buenos y viejos Estados Unidos de América, Arizona, está simplemente tratando de hacer cumplir una ley federal americana, pedir disculpas por ello.

O si tenemos una administración, si tenemos un gobierno que trata de poner fin unilateralmente a una guerra contra el terrorismo, no ganándola, sino por no referirse más a ella como una guerra contra el terrorismo. Como si los terroristas fueran a dejar de atacarnos una vez que proclamamos que simplemente no les llamaremos terroristas o terrorismo nunca más. No es así como vamos a ganar esta cosa.

Eso es tan peligrosamente ingenuo como los intelectuales supuestamente de mente abierta que defienden prácticas repulsivas como la mutilación femenina en algunos países, simplemente porque dicen, bueno, eso es parte de su cultura por lo que no debemos hablar de ello. Lo toleraremos. Eso es parte de su cultura. Eso me recuerda al general británico del siglo XIX sir Charles Napier. Fue comandante en jefe en la India. Hace años, tomó una controvertida decisión de prohibir la práctica bárbara de la suttee. Y eso es cuando los indios quemaban viva a una viuda poniéndola en una plataforma funeraria, una pira, junto a su esposo muerto. Cuando los hombres indios protestaron de que, eh, ese ritual es sólo una parte de nuestra cultura, bueno, Napier respondió que si insistían en el ejercicio de ese derecho cultural entonces él les daría a conocer una costumbre británica. Y lo que les dijo fue, bueno, en Gran Bretaña, cuando los hombres queman viva a una mujer, los colgamos. Así que construyan sus plataformas funerarias y nosotros construiremos nuestros patíbulos. Ustedes siguen con su costumbre. Nosotros seguiremos con las nuestras. Y ni que decir tiene que ese crimen terrible contra las mujeres se volvió cada vez en más y más infrecuente ante la insistencia de Napier.

Como él, también nosotros, tenemos que tener el coraje de nuestras convicciones y adoptar una postura contra el mal cuando nos enfrentamos a él y a veces eso significa llamar al mal por su nombre. Por ejemplo, independientemente de lo que algunos intelectuales políticamente correctos digan, un terrorista como Osama Bin Laden no es un luchador por la libertad. Él no lucha por la libertad; lucha contra ella. Y luchando contra la democracia y todas nuestras antiguas libertades, ¿cómo se atreven a querer que lo etiquetemos con algo que tiene una connotación positiva como lo es un luchador por la libertad?

Y no se trata sólo de llamar al mal, mal. No se trata sólo de estar en contra de algo, sino de estar por algo correcto. Se trata de no sentir vergüenza por defender lo que es bueno sobre nuestra cultura y en nuestro país. No pensar que tenemos que pedir disculpas por lo que Estados Unidos representa. Pero debemos honrar nuestra creencia en los derechos fundamentales y la dignidad de todo ser humano inocente. Y tenemos que celebrar nuestro implacable brillante optimismo. Recuerden que eso es por lo que Reagan era conocido. Eso tenía que venir de California, ese brillante optimismo. Y ese espíritu pionero que construyó este país. Nos inspiró a cruzar océanos y labrarnos una vida en el desierto y, con el sudor de nuestra frente, contribuir a crear y construir una vida mejor en Estados Unidos.

Debemos asumir nuestra capacidad de iniciativa empresarial para crear y producir e innovar y permitir que Estados Unidos sea el abanderado de la excelencia por todo el mundo. Y debemos afirmar nuestra voluntad de defender a las personas de todo el mundo que anhelan ser libres. Ellos esperan de nosotros. Nosotros somos esa luz de esperanza para lo que significa ser libre. Y en verdad que no es nada de qué disculparse.

Ahora estoy segura de que podríamos pasar un tiempo valioso tratando de construir algunos complicados y burocráticamente bendecidos nuevos planes de estudios de educación cívica nacional en todas nuestras escuelas. Pero para ser honesta, al final todo se reduce al buen sentido común tradicional. Y sé que en muchos de los campus universitarios eso no está realmente de moda. No está de moda el tener algo de sentido común. Lo sé. Lo sé. Pero pregunten a los padres lo que quieren que sea la educación de sus hijos. Y probablemente van a decir que no se preocupan mucho por todas estas cosas políticas. Lo que un padre desea en la educación de sus hijos es lo fundamental. Quieren que las tres R [Reading, wRiting and aRithmetics, leer, escribir y contar] y quieren que les enseñen la verdadera historia de nuestro país, nuestras leyes, nuestras tradiciones, nuestras artes y nuestra literatura, nuestros héroes y nuestros hombres de Estado. Quieren la verdadera enseñanza de nuestra geografía y biología y conocer el mundo en que vivimos y las hermosas criaturas con las que compartimos este planeta. Dentro de la ciencia, descubrir cómo funcionan las cosas y desentrañar los misterios del universo y no rehuir de la posibilidad de debatir los diferentes puntos de vista de las teorías e ideas. Y un conocimiento básico del bien y del mal. Eso es lo que deseamos en la educación de nuestros hijos.

Y, obviamente, estas cosas no son exclusivamente del ámbito de las universidades, sino que las escuelas y las universidades juegan un papel tan crucial en la educación de los jóvenes acerca de lo que significa ser un estadounidense. Y toca a las universidades el ayudar a asegurarse de que nuestras libertades están garantizadas para la próxima generación.

Y lo hacen mediante la promoción de los valores en los que se ha construido nuestra sociedad libre. Y a veces también por oponerse a aquellos que la socavan teniendo la audacia, el coraje, como lo tiene Ham en esta universidad, navegando contra corriente, no siguiendo la corriente. Como pescadora comercial miro allí abajo al mar y me doy cuenta de que sólo los peces muertos siguen la corriente. Pero alguien como Ham no sólo hace lo que cree oportuno, sino que no le asusta el hacerlo. Y lo hace para permitir ese debate de los diferentes puntos de vista. Eso es lo que es valioso aquí en este campus.

Los políticos tienen que hacer su parte también por garantizar la supervivencia de las instituciones en las que se asienta nuestra sociedad libre. Uno no puede hacer nada sin el otro. El presidente Kennedy dijo: «La libertad sin aprendizaje está siempre en peligro y el aprendizaje sin libertad es siempre en vano». Desde Valley Forge a Gettysburg y a Omaha Beach, el destino de Estados Unidos siempre ha bordeado una especie de precipicio. Pero a la mayoría de nosotros no nos cabe duda de que ha habido una mano providencial que nos ha guiado y nos guía hacia un futuro mejor. El objetivo prioritario de la educación debería ser el inculcar en los estudiantes un sentido de esta situación exclusivamente estadounidense, de la fragilidad de la misma, así como la grandeza de este experimento republicano nuestro y la conciencia de que la supervivencia y el éxito de la libertad dependen de ellos.

Y yo realmente creo que América es grande porque es buena. Y que somos una fuerza del bien en este mundo, no para disculparnos sino para sentirnos orgullosos. Estados Unidos es verdaderamente el país excepcional y somos en las palabras de Lincoln la última y mejor esperanza en la tierra. Y si lo hacemos bien, seguiremos siendo en las palabras del Ronald Reagan del Estado Dorado, la ciudad brillante sobre una colina. Somos “la alternativa apasionada a la tiranía», así que vamos a ayudar a nuestra gente joven a entender esto. Vamos a enseñar a la próxima generación lo que significa ser estadounidense. Y están tan en el camino correcto aquí en CSU. Que Dios les bendiga.

Gracias por ser parte de la solución. Dios les bendiga y Dios bendiga a Estados Unidos.

FIN

Un magnífico discurso, como es habitual en ella por otra parte. Con sustancia, con contenido y con mensaje. Un discurso que no sólo se escucha sino que también se puede leer y reflexionar largamente sobre él. Por cierto, una tontería que ha levantado un cierto eco en los tontos medios de comunicación estadounidenses. Es cierto que durante su discurso, Sarah Palin hizo mención al Eureka College “de California”. Esto es un error porque el susodicho lugar está en Illinois y ella lo sabe perfectamente al haberlo mencionado hace unos pocos meses en un discurso que pronunció precisamente en Illinois. Sencillamente, un lapsus. Y nada más. Y si alguien se empeña en sacarle punta a esta bobada, recuérdenle que el presidente Obama cree que Estados Unidos está formado por 57 estados, que Europa es una nación y no un continente y que los austríacos hablan austríaco y no alemán. ¡Toma del frasco, carrasco! Si es que no tienen remedio.

Y en la próxima entrada, más palabras de Sarah. Hasta entonces pues.


El discurso de Sarah Palin en Stanislaus University – La izquierda, loca de atar (I)

04/07/2010

 

Nuestro amigo Educantabro ha escrito recientemente un comentario en el que, entre otras cosas de lo más interesantes, se preguntaba si es Alaska realmente el estado más machista (sea lo que sea que signifique eso) de la Unión, ya que él piensa que semejante” honor” le corresponde a Texas. El caso es que esa calificación de Alaska como un estado machista no es mía, sino de una de las autoras cuyos artículos traduje recientemente, mujer y estadounidense ella y, por tanto, en mejor posición que yo para determinar la veracidad de ese aserto. Es cierto que Texas tiene una cierta fama al respecto, pero eso es simplemente porque Texas aparece como escenario de muchas películas y series de televisión y la imagen típica del tejano es la de un tipo con sombrero vaquero, bruto pero de buen corazón y no muy dado a reconocer el mérito que les corresponde a las mujeres, al menos hasta que la chica le demuestra que ella pega tan fuerte como él, sabe desencasquillar una semiautomática y le deja bien claro que ella no es una de ésas y que si la quiere besar, tendrá que merecérselo primero. Por lo que he podido averiguar, Alaska no le anda a la zaga a Texas. Pero es que Alaska es un estado especial, siquiera por sus características geográficas, y el que no tiene arrestos suficientes para, por ejemplo, cazar su propia comida, poco tiene que hacer allí y mejor haría mudándose a algún otro estado más complaciente con los se desmayan ante la sola idea de tener que descuartizar un caribú recién cazado; por ejemplo, California. Cómo será Alaska que en 2007, poco después de que Sarah Palin fuese elegida gobernadora del estado, se hizo muy popular una pegatina que rezaba así: “Alaska, el estado donde los hombres son hombres y las mujeres, gobernadoras”. Vamos, que mucho me temo que Chuck Norris en su papel de Walker, Texas Ranger estaría encantado de tener a un compañero que fuera un trooper alasqueño.

¡Guau, miren lo que he encontrado! Sarah Palin con chupa y tejanos, durante el pasado Election Day en Alaska. ¿A qué está estupenda? Cierto, la chupa no es de cuero, pero también sirve, ¿eh? Está un poco triste porque ya sabía que McCain iba a perder. Y eso que todavía no se imaginaba siquiera la que se le iba a venir encima. Pero si lo hubiera sabido, ¿creen ustedes que hubiera cambiado de opinión? No, indudablemente no. Sarah tiene más valor que un pelotón de marines y bien que nos lo ha demostrado una y mil veces a lo largo de todos estos años. O sea, que sí, que en Alaska los hombres son hombres (échenle un vistazo a Todd Palin los que quieran saber qué significa eso) y las mujeres, tan mujeres que no sienten el más mínimo interés en volverse como hombres (échenle un vistazo a Sarah Palin los que quieran saber qué significa eso; por cierto, feminifobas abstenerse so pena de sufrir un ataque de rabia).

Hace mucho tiempo que tenía ganas de esto: traducirles un discurso de Sarah Palin. Y es que, para mí y creo que también para ustedes, la mejor manera de conocer a una persona es a través de sus propias palabras, algo que en su caso se nos hizo plenamente evidente cuando pudimos leer Going Rogue. Uno habla como piensa y esto, que los antiguos conocían perfectamente y por eso fomentaban el estudio de la gramática, de la lógica y de la retórica, es algo que ha desaparecido por completo de los actuales planes de estudio de las escuelas y bien que se nota; sólo hay que oír hablar a sus víctimas… digo a sus alumnos. De verdad que en muchas ocasiones soy incapaz de entender lo que pretende decirme uno de estos niños o jóvenes por más que sepa que me están hablando en mi propio idioma; sencillamente, no comprendo lo que me dicen ni cómo me lo dicen. Incapaces de pronunciar correctamente la mayoría de las palabras, cuyo significado en muchos casos confunden o desconocen directamente, lo peor es que el contenido, lo que pretenden decir, es tan lamentable como el continente. ¡Oh, qué tiempos estos! Tan buenos para los dictadores, que ven como las masas están maduras para quien les ofrezca fútbol, sexo y peonadas gratis, y tan malos para los hombres libres, que sólo piden ganarse su propio lugar al sol.

Al menos hoy me daré el gustazo de ofrecerles la traducción (mala traducción, me temo) del discurso que el pasado día 25 de junio dio Sarah Palin en la fiesta de celebración del 50º aniversario de la California State University Stanislaus en Trulock (California). La intención de los organizadores era la de recaudar fondos para la institución (recordemos que en Estados Unidos todavía no ha arraigado la fea costumbre de vivir a costa del erario público a través de subvenciones y demás OPA sobre el alma de quien las recibe) y sus directivos, más listos que el hambre, consideraron muy acertadamente que las mejores perspectivas de éxito las tenían invitando a Sarah Palin a que acudiera a la fiesta y pronunciara un discurso.

Evidentemente, Sarah Palin cobró por su presencia porque ése es su trabajo y no voy a ser yo quien pretenda que alguien que trabaja e invierte su tiempo y su esfuerzo en una actividad, cualquiera que sea ésta, no cobre por ello porque todos tenemos que ganarnos la vida. Yo puedo ser muchas cosas, pero un hipócrita no. Sin embargo, la izquierda, a través de sus cachorros estudiantes en la universidad, estuvo dando la lata desde el primer día, insistiendo en que Sarah Palin no debería cobrar ni un dólar de la universidad, lo cual equivale a decir que no debería aparecer por allí. El caso es que los honorarios de Sarah Palin fueron de 75.000 $ y la recaudación total del acto ascendió a 200.000 $. Si esos 125.000 $ de beneficio no son suficiente argumento para que los niñatos izquierdistas esos se callen de una vez es que son definitivamente irrecuperables para cualquier actividad racional lo cual es algo que mucho nos tememos que es así y es una verdadera lástima dado lo jóvenes que son. Como muestra, les cito parte de un artículo de la prensa local referida al evento en cuestión:

Directivos de la California State University, Stanislaus, dijeron que no podían estar más felices con su aparición [la de Sarah Palin]  en la gala del 50º aniversario, aportando la mayor cantidad de dinero recaudada en cualquier evento de la historia de la universidad.

Y para abundar más en el tema, aquí están las palabras de su presidente:

“Estoy realmente satisfecho”, dijo el sábado el presidente de la universidad, Hamid Shirvani. “Fue un acontecimiento extraordinario, sin precedentes durante los pasados cinco años que llevo en la universidad y, de acuerdo con muchos, sin precedentes en todo el tiempo que llevan en la universidad”.

Y otra más todavía, hurgando en la herida:

El supervisor del condado estaba feliz. “Creo que han metido un gol por toda la escuadra en lo que se refiere a recaudar dinero. No sabía a qué venía tanto rencor; ella vino por la universidad y lo que dio fue un discurso sobre educación”.

Y para terminar, de nuevo unas palabras del presidente de la universidad poniendo el punto final a la cuestión del dinero que se le ha pagado a Sarah Palin por su presencia:

Este evento está financiado al 100% con dinero privado, aportado recientemente a la fundación de la universidad.

De cualquier forma, tanto da que el dinero sea privado o no porque el meollo de la cuestión es que se trata de Sarah Palin, la mayor amenaza existente actualmente contra el presidente Obama y, por extensión, la secta estatista que le rodea, ansiosa de convertir Estados Unidos en la nueva Unión de Estados Socialistas Soviéticos, ocupando ellos los puestos de la antigua nomenklatura, por supuesto. Si el invitado hubiera sido Mitt Romney, por decir un nombre, seguro que nadie se hubiera preocupado por él, claro que entonces tampoco hubieran recaudado ni la décima parte de lo que han recaudado con Sarah Palin porque ¿a quién se le va a ocurrir pagar por oír a Romney decir una sarta de tonterías? A nadie, por supuesto.

Así pues, ya pueden los niñatos izquierdistas esos alegar que Sarah Palin es una “celebridad polarizante y divisiva sin la más mínima conexión con nuestra universidad o comunidad” y llamar a protestar contra su visita y “contra el racismo, el fanatismo y el odio” que, según ellos, representa Sarah Palin (¿?). Sobre lo primero, es un argumento bastante estúpido que, si se siguiera al pie de la letra, provocaría que, muy posiblemente, la Stanislaus no pudiera invitar a nadie de relevancia a dar un discurso, convirtiéndose esa universidad en algo tan endogámico como una familia en la que todos los matrimonios fueran entre primos, lo que a la larga conllevará su ruina. En cuanto a lo segundo, creo que se trata de un lapsus freudiano (por más que considero a Freud un magnífico majadero) y que en realidad se refieren a sí mismos y no a Sarah cuando hablan de racismo, fanatismo y odio. ¿O quién si no enloquece a la mera mención de su nombre? Por eso digo que la izquierda está loca de atar. Y cada vez más. Ya lo demostró Bill O’Reilly en su programa en Fox News Channel, The O’Reilly Factor, cuando entrevistó a dos estudiantes de esa universidad y tras dejarles exponer sus puntos de vista, los desenmascaró como los agentes provocadores que son ni más ni menos. Meros altavoces gritones de otros que no se molestan en dar la cara o no se atreven porque saben perfectamente que si lo hicieran se la partirían (intelectualmente hablando, ¿eh?, que luego igual me acusan de fomentar el odio).

Y ya que estamos con recortes de prensa, aquí tenemos otro referido a una valoración de lo que supuso la asistencia de Sarah Palin a la dichosa fiesta.  La firma un tal Bill Mattos y fue publicada en el Gustine Press-Standard, un periódico de la zona:

Palin fue un bombazo, les guste o no les guste.

La antigua gobernadora de Alaska, Sarah Palin, arrancó al menos cinco ovaciones de pie, la mayoría por ser simplemente quien es, y su sentido del humor el pasado viernes por la noche en la California State University Stanislaus fue una parte bien recibida de su discurso. Fue breve pero bueno, dejando a los casi 400 propietarios de una entrada para el evento con ganas de más. Pero claro, ésa es la esencia de un buen orador. Realmente ella no habló de política, pero propinó un guantazo al fiscal general de California, Jerry Brown, cuando se preguntó por qué se quejaba sobre su presencia en California cuando tiene tanto trabajo “de verdad” que hacer en California. Ella no sólo utilizó la mención a Ronald Reagan para evocar amor sino que también alabó al antiguo presidente John F. Kennedy. En su mayor parte, habló sobre educación y sobre cómo quieren realmente los padres que las universidades enseñen sentido común en lugar de meter la política en las aulas. No puedo estar más de acuerdo con ella y su ingenio y su carisma llenaron la pasada semana el comedor de la universidad como pocos lo hubieran hecho.

Usted puede preguntar a los residentes en Newman y Crows Landing Doug y Carol Stephens, a Tom Dompe y Beth Lawwill, a Vince y Toni Butero y a Gary Mall. Y realmente no tenía que “amar” a Palin para disfrutar de la recepción, la cena y el baile. Éste fue un evento del que podremos hablar durante largo tiempo. Gente feliz por todas partes con otros que aman la universidad y querían asegurarse de que recaudaba más dinero que nunca para becas escolares y otras actividades. Todos los registros se rompieron cuando el evento de Palin recogió más de 200.000 dólares para la fundación escolar. ¡Más que cualquier otro jamás celebrado! Por supuesto hubo unos pocos protestones gritando obscenidades, pero eso hizo el evento memorable. La seguridad fue magnífica y el servicio de aparcacoches soberbio. Los asistentes dejaban los coches en sus manos y los automóviles estaban listos para irse tan pronto como uno decidía que ya era hora de volver a casa. Y mientras la universidad encuentra maneras de utilizar ese dinero (hay montones de necesidades), la controversia sobre Palin ya es historia en la seguridad de que los políticos encontrarán otro motivo para despotricar antes de las próximas elecciones. No es ninguna sorpresa que estemos tan hartos de algunos cargos electos que usan sus despachos para causar aflicción a nuestra universidad local. Les guste o no, Cal State Stanislaus estuvo en el mapa y será siempre conocida como la institución con valor y un corazón tan grande como el de Palin.

Evidentemente, no les gustó a muchos. Fueron muchos más los que disfrutaron de la presencia de Sarah Palin en la universidad, pero un puñado de amargados permanecieron por los alrededores gritando estupideces tan ilustrativas de su bajo coeficiente intelectual como: “¡Racista, sexista y anti-gay, Sarah Palin fuera de aquí!”. Por lo que he leído, un corresponsal de Conservative News Media (más audaz que el reporter Tribulete, ése que en todas partes se mete, por lo que se ve) se acercó a ellos para pedirles pruebas de que Sarah Palin es sexista y, según ha contado, nadie supo darle una respuesta aparte de algunos gruñidos, muchos aspavientos y alguna que otra amenaza más o menos velada.

Por supuesto, Sarah Palin tuvo también sus partidarios concentrados a las puertas de la universidad, ¡faltaría más! Gente corriente, honrada y sensata que llevaban banderas estadounidenses, cantaban “God Bless America” y recitaban el juramento de lealtad a la bandera estadounidense. Gente que ama Estados Unidos y que no tiene el más mínimo reparo en confesar que, precisamente por eso, aman también a Sarah Palin porque ella apoya a las tropas estadounidenses en el extranjero y ruega por su victoria, cree en la Constitución y en la libertad de las personas y, sobre todo, porque es una persona normal y corriente a quien todos podemos imaginarnos cambiándole los pañales a Trig, leyendo un cuento a Piper antes de acostarse o ayudando a Willow a hacer los deberes.

Ciertamente hacía tiempo que no teníamos a Sarah Palin en sus propias palabras en este blog y ya tocaba, ¿verdad? Pero como quiera que (mi correctora de estilo acaba de mandarme un mensaje al móvil advirtiéndome que no me haga ilusiones porque me sigue vigilando y que no me consiente ni un “como quiera que” más) este repaso a lo que ha supuesto la presencia de Sarah Palin en California me ha quedado ya muy larga, les emplazo a mañana para que puedan leer el discurso completo que son más de 5.000 palabras ni una de las cuales sobra. Entonces prometo callarme yo y dejar que hable sólo Sarah. ¡Ah, y tendrá video incluido! Palabra de Palin.

Hasta mañana pues.


LA SEMANA DE SARAH PALIN: LA CASA BLANCA CONTRAATACA

15/03/2010

 

Una cosa que me estoy empezando a encontrar leyendo por ahí es que cada vez hay más opiniones en el sentido de que es posible que el actual presidente estadounidense pierda las elecciones en 2012. Sí, sí, algo que hasta hace poco era considerado como una locura y que, de hecho, si recuerdan los primeros meses de su administración, cuando todo eran albricias y parabienes y hasta algún estúpido congresista demócrata pretendía que se reformara la Constitución para permitir que el presidente mesiánico pudiera optar a un tercer mandato, nadie se planteaba siquiera… ¿Nadie? Quizás Sarah Palin sí. Y bien que calculó porque a poco más de medio año de cumplirse la mitad de su mandato, parece claro que el vuelco electoral que se va a producir este mes de noviembre va a ser monumental. Ya no se discute si los republicanos lograrán la victoria sino que lo que se discute es si lograrán la mayoría en ambas cámaras del Congreso o no. Y tal y como están yendo las cosas últimamente las apuestas empiezan a inclinarse por el lado del “yes, we can” (darle una buena patada en el culo al presidente y su cuadrilla). Y si no, ¿qué sentido tiene eso tan delirante del “Coffe Party” (ver más adelante) si no es el de buscar camorra simplemente que es lo que ha hecho siempre la izquierda cuando ve las barbas de su vecino pelar?

En esta foto vemos a Sarah Palin junto a Anthony Imperato, presidente de Henry Repeating Arms Company, durante un acto de recaudación de fondos celebrado por el Partido Republicano de Arkansas en Little Rock el pasado 16 de febrero. Sarah posa orgullosa con el rifle Henry Big Boy .44 Magnum con el que sus compañeros de partido le obsequiaron como agradecimiento por su firme apoyo a la Segunda Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, que garantiza a todos los estadounidenses el derecho a poseer armas,  uno de los derechos constitucionales más cuestionados desde siempre por la izquierda en aquel país, tan pronta a dejar indefensos a sus compatriotas por mor de una bonita idea (en este caso, la de que todo el mundo es bueno y que los asesinos son así porque tuvieron una infancia difícil y a las víctimas que les zurzan). Y es que cuando uno descubre de pronto que hay un intruso en su casa amenazando a su familia, ¿qué preferiría usted tener más a mano? ¿El número de teléfono de la policía o un Henry Big Boy .44 Magnum?

Y antes de entrar en materia, una gran noticia. Uno de nuestros amigos, el que se hace llamar “El primo tonto” pero que de tonto no tiene ni un pelo ha editado el vídeo de la intervención de Sarah Palin en el programa de Jay Leno y le ha añadido subtítulos en castellano para que podamos disfrutarlo todos de una manera más satisfactoria. ¡Buen trabajo, primo! Para verlo, hagan clic aquí. De verdad que le ha salido más que bien.

Primera noticia: SARAH PALIN EN OHIO DEFIENDE GALLARDAMENTE EL DERECHO A LA VIDA.

Uno de los colaboradores de Conservatives4Palin, Doug Brady, publicó hace algunos días esta reseña que otra persona, un tal PatrickinOH, había escrito sobre el discurso que pronunció Sarah Palin en Ohio el pasado 5 de marzo durante un acto organizado por el Ohio Right to Life. Como quiera que sé lo mucho que les agrada a todos ustedes el tener constancia de lo que pasó realmente en los sitios a los que acude nuestra admirada Sarah, quién mejor que él para darnos cuenta de todo ello. Así pues, me callo y dejo que el buen PatrickinOH nos cuente este cuento: “Érase una vez en Ohio…” Por cierto, Patrick tiene 22 años. Será muy interesante poder leer el testimonio de alguien tan joven, ¿verdad? Y es que no todos los jóvenes son idiotas perdidos todavía. Algunos se resisten.

Sarah Palin en Ohio
por PatrickinOH

Me fui al acto del Ohio Right to Life un poco después de las 3 PM. Compartí coche con una mujer que iba a asistir a la recepción privada que ofrecía la gobernadora Palin junto con su marido y otra amistad suya. La mujer con la que iba es la dirigente de una organización pro-vida en Dayton llamada Elizabeth’s New Life Center. De camino a Colombus charlamos sobre lo que hizo a la gobernadora Palin tan especial y por qué la apoyamos. Todos estamos de acuerdo en que era su valor, sus convicciones, sus ideales para nuestra gran nación y su fuerza en medio de todo el odio dirigido contra ella y su familia.

Llegué al Aladdin Shrine Center unos 10 minutos después de las 4 PM. Lo primero que noté fue que había alrededor de cinco manifestantes allí, todos niños de instituto por sus pintas. Yo iba delante y la mujer con la que iba me preguntó si quería que ella cogiera mi libro para llevarlo junto al suyo que conseguir que me lo firmara. Se lo di junto con una carta para la gobernadora Palin dándole las gracias por venir y un pequeño regalo para su hijo Track. Era una medalla de San Benito, que ofrece protección a quienquiera que la lleve. Había oído de compañeros católicos a lo largo de los años que cada soldado en la Segunda Guerra Mundial que la llevó había vuelto a casa santo y salvo. Era lo único en que pude pensar para darle. A pesar de que no es católica, espero que lo aprecie. Podría haberle dado un libro, pero pensé que probablemente ya había leído cualquier libro que yo pudiera querer darle.

Entré y enseñé mi entrada y fui a la sala principal que era donde ella iba a hablar en sólo unas pocas horas. Escogí un asiento muy cerca del escenario para que pudiera verla de cerca. Dejé mi chaqueta en el asiento para guardarlo y salí al vestíbulo a comprar unas pocas chapas con la imagen de Sarah. Regresé a mi asiento para guardar algunos más para la gente con la que vine, así como más asientos para mi mamá y mi hermana, que iban a venir más tarde junto con otra pareja que conocemos. Mientras esperaba, me di la vuelta y hablé con la gente sentada detrás de mí. Eran un matrimonio con una hija que era casi de mi edad (yo tengo 22, casi 23). Nos presentamos el uno al otro y charlamos un buen rato sobre lo que estaba sucediendo en el país con Obama como nuestro presidente y la gran persona que es Sarah Palin entre otras cosas.

Alrededor de las 6 en punto la otras dos personas con las que vine llegaron y me llamaron para saber dónde estaba. Me levanté y les saludé con la mano de manera que pudieran verme. Ellos habían llegado después de comer fuera. Cuando llegaron a los asientos que había guardado para ellos, me dieron las gracias por haberlo hecho. Poco tiempo después mi mamá llamó y me dijo que acababan de llegar y estaban esperando para aparcar. La gente con la que vinieron les había dejado a la puerta y había ido a aparcar el centro comercial del otro lado de la calle. Una vez más, me puse de pie y saludé con la mano para que mi mamá y mi hermana pudieran ver dónde estaba. Recibí otra llamada telefónica de una mujer a la que sólo conocía de Twitter. Algunos de ustedes pueden estar familiarizados con @ginthegin. Ella vive no muy lejos de mí, en Dayton, pero nunca nos habíamos conocido antes. Ella no podría haber sido más agradable conmigo, mi mamá y mi hermana. Explicó que éramos amigos en Twitter y mi mamá le preguntó si me comportaba bien en Twitter. Ginny me hizo sudar un poco y dijo que era muy bien educado casi todo el tiempo. Ginny alcanzó su asiento y volvió a expresar su felicidad de que por fin nos hubiéramos conocido. Me hice eco de sus sentimientos y procedí a reservar dos asientos más para la pareja con la que mi mamá y mi hermana habían llegado. La pareja llegó por fin un poco después de las 7 porque tuvo que tomar un autobús-lanzadera desde el centro comercial al otro lado de la calle hasta el centro.

Por fin, el acto principal dio inicio con la dirigente del Ohio Right to Life agradeciéndonos el que hubiéramos vendo y contribuido a la causa de la defensa de los niños por nacer. Hubo una procesión de gaiteros que fueron increíbles. Nos levantamos todos y pronunciamos el Juramento de Lealtad seguido por un sacerdote de pie que nos guió a todos en la oración. Luego, Chris Spielman dio una charla sobre la muerte de su esposa, afectada de cáncer, sólo un mes antes. Fue desgarrador y arrancó lágrimas de los ojos de muchas personas. Después de sus palabras, una película de introducción acerca de Sarah Palin, que consistía principalmente en gente de los medios de comunicación hablando sobre ella junto con música dramática. Luego fue el momento de la verdad. Vi a la gobernadora Palin llevando un top rojo y una falda tubo negra caminar hacia el escenario con su famosa sonrisa en el rostro. Se dirigió al podio y nos dio las gracias por dejarla estar allí esa noche para hablar sobre un tema que estaba muy cerca de su corazón. Ella dio un montón de saludos a Ohio, uno de ellos referido a que éramos personas que nos aferrábamos orgullosamente a nuestras armas y a nuestra religión. Repitió algunas de las bromas que había hecho cuando estuvo con Leno.

Eran aún más divertidos escuchados en persona. Ella mencionó que tenía un signo de dólar escrito en su mano recordándole un mensaje que quería darnos. Habló acerca de todas las ciudades que visitó en Ohio durante la campaña. Cuando mencionó que fue presentada en Dayton, aquellos de nosotros de esa zona la vitoreamos. A continuación, habló sobre lo que había sido invitado a hablar: la defensa de los aún por nacer. Se hizo eco de su historia de cuando se enteró que estaba embarazada a la edad de 43. Recordó la ecografía cuando se enteró de que el bebé era un niño y ella estaba muy feliz porque ella y Todd siempre había querido tener otro niño. Habló de cómo había oído que el cuello del bebé era más grueso que de costumbre y recordó a continuación que eso era un signo de Síndrome de Down. Confesó haberse sentido desolada en un primer momento y la comprensión que tuvo por sólo un instante de por qué las mujeres podrían sentir la necesidad de «hacer desaparecer el problema.» Luego se refirió de su certeza de que toda vida es sagrada y que cada vida tiene un propósito y significado.

Uno de los momentos más emotivos se produjo cuando una chica en una silla de ruedas, que estaba sentada al otro lado de donde estaba yo, empezó a llamar a la gobernadora Palin. Su madre siguió intentó calmarla. La gobernadora Palin la miró, sonrió y dijo: «¡Está bien, está bien!». Reiteró su apoyo a la comunidad con necesidades especiales y que ella siempre hablaría contra la gente hiciera sus vidas difícil, tal y como malhablados miembros de la administración Obama [se refiere a Rahm Emanuel]. Luego volvió  a lo que el signo del dólar en su mano significaba. Nos imploró a todos a actuar en contra del aborto y a profundizar en ello y a entregarnos a esta gran causa de salvar a niños inocentes en el vientre de la madre. Ella nos sorprendió a todos diciendo que sus honorarios como conferenciante serían devueltos al Ohio Right to Life. La gente se volvió absolutamente loca cuando dijo eso. Su discurso fue interrumpido en numerosas ocasiones por ovaciones de pie. Dio un gran discurso y me di cuenta que estaba disfrutando plenamente con ello. Cerró su discurso diciendo: «¡Dios os bendiga a todos y que Dios bendiga América!»

Después de terminar, la gente se apresuró a subir a escena para conseguir libros, revistas, gorras, camisetas, chapas, entradas e incluso teléfonos celulares firmados. Cogí mi libro y mi chapa para que los firmara. Yo estaba de los primeros de la multitud que se había lanzado al escenario. Fue toda una experiencia ser espachurrado entre todas esas personas. Mientras me encontraba entre la multitud, esperando para conseguir que firmara mis cosas y estrecharle la mano, sonaron dos canciones que realmente captan el ambiente del momento para mí, How To Save A Life de The Fray y Viva La Vida de Coldplay. Cuando levanté mi libro para conseguir que lo firmara, ¡alguien en el escenario lo cogió y fue firmado en tinta roja! También alargué mi chapa para que lo firmara. Pensé en abandonar, pero quería un apretón de manos de esta mujer extraordinaria. Levanté mi mano y esperé el momento en que iba a tomar mi mano para apretarla. Ella se inclinó y me estrechó la mano. Me quedé allí y hablé con un hombre que se hacía llamar «el hombre de Palin».

Miré hacia arriba y vi a Piper. Me volví a alguien a mi lado y dije: «¡Hey, mira, es Piper!» Decidí que sería genial si pudiera tener mi libro firmado por Piper también. El hombre Palin tomó mi libro y se lo entregó a Piper para que lo firmara. Estaba tan emocionado: ¡mi libro fue firmado por Sarah y Piper! Yo todavía estaba atascado entre la multitud, así que decidí ir para otro apretón de manos. Tuve éxito. ¡Me fui a casa esa noche pudiendo reclamar dos apretones de manos con la gobernadora Palin! Finalmente me liberé de la multitud y me fui a casa con la gente con la que había venido, todos nosotros hablando de la experiencia. Fue una noche memorable, una que no olvidaré en mucho tiempo

¿A que ha sido una crónica realmente excitante? ¿A que ha valido la pena leerla? ¿A que el tal Patrick tiene un morro que se lo pisa: dos apretones de mano de Sarah y encima consigue que le firmen el libro no sólo ella sino también Piper? ¡Ah, estoy muerto de envidia! ¡No lo puedo soportar! ¡Yo también quiero el autógrafo de Piper! De esta no pasa, este verano me largo a Estados Unidos aunque tenga que empeñar el ordenador. Tengo que conseguir que Sarah me firme el libro, tengo que conseguir que Sarah me firme el libro, tengo que conseguir que Sarah me firme el libro… ¡y Piper también!

Segunda noticia: LA CASA BLANCA SUFRE UN ATAQUE DE PÁNICO, MONTA LA CONTRARREVOLUCIÓN Y AÚN ESPERA QUE NOS CREAMOS QUE NO ES COSA SUYA.

Ustedes ya saben que no leo la prensa, no escucho la radio ni veo la televisión y que toda mi información la obtengo de internet. ¿El motivo? Sencillamente que detesto la prensa tradicional, tan huérfana de objetividad y de vergüenza profesional, hasta el punto de que ni siquiera se molesta en disimular su escandaloso partidismo y aún pretende hacer de ello motivo de orgullo. Son unos vulgares gacetilleros y no tengo la más mínima duda de que no me pierdo absolutamente nada prescindiendo de ellos.

Sin embargo, uno a veces coge alguno de esos periodicuchos que reparten gratuitamente por las calles aquí en España, más que nada porque me van de perlas para ponerlos en el suelo cuando friego mi casa y no puedo esperar a que se seque para pasar. Así sucedió hace unos días con tan buena fortuna que mientras lo hojeaba buscando la página del horóscopo para reírme un rato con las tonterías que salen, me encontré con un artículo titulado “Café contra té en EE.UU” (me niego en redondo a publicar un enlace a semejante basura; el que lo quiera leer, que se ponga una pinza para la nariz y lo busque en algún vertedero).

El artículo de marras, dejando aparte que está escrito en el mejor estilo agit-prop de los tiempos de Stalin, cuando los periodistas no eran periodistas sino meros comisarios políticos, es un cúmulo de falsedades y un prodigio de manipulación que me reafirmó en mi propósito de jamás, jamás, jamás volver a comprar un periódico, escuchar la radio o leer la televisión, al menos hasta que la Fox se establezca por fin en España.

Sin embargo, no es del artículo en sí de lo que me interesa hablarles hoy (al gacetillero ése que firma el artículo ya lo conocemos de sobras todos y sabemos perfectamente de qué pie cojea) sino de lo que implica. Resumiendo, el artículo anuncia a bombo y platillo que la izquierda estadounidense ha constituido espontáneamente un movimiento que han bautizado como Coffee Party con el fin de oponerse al Tea Party. Según el artículo, el movimiento ya cuenta con 70.000 seguidores en 30 estados y su objetivo, según la supuesta fundadora, una tal Annabel Park, es “fomentar el diálogo político mientras nos tomamos un café y hablamos de asuntos importantes y con compasión hacia los otros ciudadanos”.

Por supuesto, el del artículo aprovecha la ocasión para difamar al movimiento Tea Party diciendo que:

Los que mezclan té con política suelen ser matrimonios blancos de más de 50 años, que viven en el medio Oeste, de misa semanal, odian a Obama, son antiaborto y antigays, y tienen en casa una estampita de Dick Cheney.
Los cafeteros han superado ya la treintena, están casados y con hijos pequeños o viven con alguien, no han pisado una iglesia, tienen amigos homosexuales, odian a George W. Bush y sus guerras, y creen que Palin es analfabeta.

Semejante par de párrafos bastarían en mi opinión para provocar el despido fulminante de quien se pretendiera titular de “periodista” en cualquier periódico con un mínimo de vergüenza profesional. Todo eso no es periodismo, no es contar la verdad y quien lo ha escrito lo sabe perfectamente. Eso no es más que una sarta de mentiras y un vano intento de perjudicar al Tea Party fuera de Estados Unidos creando en torno a ellos una imagen falsa que únicamente se la puede creer quien en su vida ha estado en Estados Unidos, en su vida se ha preocupado por informarse adecuadamente y en su vida ha pensado por su propia cuenta.

Por lo que se refiere al Coffee Party salta a la vista que se trata de una operación diseñada y ejecutada desde la Casa Blanca, tal y como ya ha denunciado el Tea Party. Una operación que da pena y que al igual que la reciente operación “Ellie Light” (¿se acuerdan de que aquella famosa carta al director en defensa del presidente que apareció firmada prácticamente por la misma persona en hasta 68 medios de comunicación de 31 estados diferentes de los Estados Unidos, declarándose la “autora” en todos los casos residente en la misma población del medio de que se tratase?), acabará volviéndose contra ellos mismos. El Coffee Party apesta a maniobra de David Axelrod que tumba de espaldas; sin duda, esos 70.000 partidarios de que se ufanan son todos los que tienen algún despacho en la Casa Blanca o en el Congreso, sus familiares, sus amigos y sus paniaguados.

Por mi parte, estoy informándome sobre el asunto y cuento con publicar próximamente un comentario sobre ello en Semanario Atlántico, más que nada para que llegue a la mayor cantidad posible de gente y así poder contribuir a desenmascarar a unos impostores que mientras se han pasado meses acusando al Tea Party de astroturf (o sea, de ser una campaña de relaciones públicas disfrazada de movimiento espontáneo), van ahora y montan un verdadero astroturf y pretenden que nos lo creamos. Pues mira, David, so tarugo, no nos lo creemos. Es más, el hecho de que hayas tenido que recurrir a esto nos alegra mucho porque es señal de lo muy asustados que estáis todos en la Casa Blanca por lo que va a suceder este noviembre que viene. Primero despreciasteis al Tea Party acusándolo de ser cuatro gatos, luego les acusasteis de ser cuatro gatos extremistas que parecían más bien una milicia de Montana, luego que si eran astroturf, luego que estaban todos locos y ahora por fin, cuando una gran parte de los estadounidenses declaran que confían más en el Tea Party que en los dos partidos mayoritarios y que están más dispuestos a apoyar a sus candidatos que a los de ellos, vas y nos sales con esto. Pues sólo puedo decir una cosa, David, y te la diré en inglés para que la puedas entender fácilmente: You stink, guy! (¡Apestas, muchacho!).
 
SARAH PALIN, DÍA Y LUGAR

Por fin tenemos la agenda de Sarah en lo que se refiere a su respaldo a la reelección del senador John McCain. Creo que ya está más que zanjada la controversia sobre si dicho respaldo es apropiado o no. Sencillamente tenía que hacerlo y no hay más que discutir. Por lo que parece, su apoyo va a ser más que especial pues no sólo va a celebrar dos rallies junto a él sino que también va a ser la anfitriona de una cena de recaudación de fondos (a 2.500 $ el cubierto, incluyendo eso sí una hora de reunión con ella previa a la cena y una foto con ella y McCain). Sólo faltaría que después de esto McCain no ganara las elecciones, ¿verdad?

Y la otra novedad que tenemos es una de ésas que tanto le gustan a ella. Un acto de recaudación de fondos a celebrar en septiembre en Minnesota a favor de una asociación, Teen Challenge, dedicada a ayudar a los adolescentes a bregar con los problemas de la vida enseñándoles valores cristianos. El acto se titula “Take a stand for God, Country and Family” (Toma partido por Dios, el país y la familia) y estoy convencido de que será de lo más interesante porque es en este tipo de actos donde Sarah da lo mejor de sí mismo ya que no se trata de política sino de vida, la vida que merece ser vivida y que para ello debe estar basada primero en unos valores firmes y positivos como son los de la fe. ¿Y quién mejor que ella para ofrecernos su propio testimonio?

Y sigue la cuenta atrás. Ya falta menos para noviembre. Ya verán lo que nos vamos a reír entonces.


MÁS COSAS SOBRE LA CONVENCIÓN TEA PARTY DE NASHVILLE

11/02/2010

 

Hay que ver la que se ha armado con el discurso de Sarah Palin. Por si acaso a alguien le quedaba alguna duda acerca de quién es la única alternativa posible al actual presidente, este fin de semana la ha visto despejada. Y es que en el panorama político estadounidense, ya todos asumen que sin Sarah Palin, o al menos sin su aquiescencia, no hay nada que hacer. Ni Romney ni Huckabee ni Pawlenty… Todos esos nombres están muy bien, pero son meros actores de reparto en una película, la de la oposición a la actual administración demócrata, que está protagonizada por ella. De hecho, sólo hay un partido, el Tea Party (porque el GOP está más perdido que un pato en un garaje), y éste ha hablado claramente: Run, Sarah, run! (¡Preséntate, Sarah, preséntate [a las elecciones]). Y ésta ha escuchado ese grito y, si bien no ha dicho todavía que sí, al menos sí que nos ha confirmado que contempla esa posibilidad aunque todo depende de cómo evolucionen los acontecimientos durante estos tres años. ¡Ja, cómo si alguien pudiera creerse que de pronto el de la Casa Blanca va a recuperar la sensatez y hacer las cosas bien! O sea, que todos tranquilos porque sí, sí, sí, habrá Palin 2012. ¡Menos mal!

¿Saben qué día es hoy? ¿No? Pues hoy es 11 de febrero… ¡Es el cumpleaños de Sarah! Por supuesto no soy tan maleducado como para echar la cuenta de cuántos cumple. Sarah es todavía una chica jovencita. No me extraña, con esas carreras de 10 km que se pega cada día. De cualquier forma, le mando desde aquí mis felicitaciones y hasta un par de besos (hay que ver lo que molestan los cuernos para dar un beso).  Confío en que reciba muchos regalos y que el de Todd sea tan especial como lo es ella. Seguro que sí.

¿A que está guapísima últimamente? Pues imagínense cómo tiene que resplandecer hoy. Tengo que averiguar qué le ha regalado Piper. Como mínimo, un dibujo con una nota diciendo: “Te quiero mucho, mami”. ¡Ah, qué bonito es que tu hijo te haga un regalo! ¿A que sí?

Ustedes ya saben que uno de mis lemas favoritos es “Lo prometido es deuda” (además de “El presidente es un tarugo” y “A la bim, a la bam, a la bim, bom, bam, Sarah, Sarah y nadie más”). Y como que lo saben, huelga todo comentario. Aquí tienen la segunda parte de mi traducción del discurso de Sarah en la convención del sábado. En concreto, ésta es la parte en la que Sarah responde a las preguntas previamente hechas por el público. O sea, que sus intervenciones son completamente improvisadas. Disfrútenla.

DISCURSO DE SARAH PALIN EN LA 1ª CONVENCIÓN NACIONAL  DEL MOVIMIENTO TEA PARTY
Nashville (Tennessee), 6 de febrero de 2010

Q&A (Query and Answer, preguntas y respuestas)

MODERADOR: Hace unas semanas, preparamos algo en que hubiera una breve sesión de preguntas y respuestas. Y pedimos a algunas personas en Tea Party Nation que pudiéramos hacer preguntas a la gobernadora Palin esta noche. Y ella ha accedido amablemente a responder unas pocas preguntas. Así que vamos a tomarnos unos minutos y preguntar y responder algunas preguntas.

SARAH PALIN: Gracias.

MODERADOR: Por cierto, ¿es ésta su primera vez en Nashville?

SARAH PALIN: Así es. Ni siquiera he estado aquí para un concierto como Piper. He traído a Piper conmigo y ella está loca por salir por ahí y ver si puede salir y encontrar Miley Cyrus y a Taylor Swift. Mi primera vez aquí, sin embargo.

MODERADOR: Bueno, odio tener que decirle esto a ella. Miley Cyrus vive no muy lejos de donde estamos. Así que siento que no pudiéramos haberlo arreglado para ustedes. La próxima vez. Muy bien, un par de preguntas muy rápidamente. Y de nuevo, éstas han sido presentadas por la gente de Tea Party Nation. En primer lugar, ¿cómo ve el futuro del movimiento Tea Party? ¿Ve este movimiento Tea Party convirtiéndose en una parte del Partido Republicano o lo ve como que se va a convertir en un tercer partido independiente?

SARAH PALIN: El Partido Republicano sería realmente inteligente si empezara a intentar absorber la mayor cantidad posible del movimiento Tea Party porque éste es el futuro de nuestro país. El movimiento Tea Party es el futuro de la política y como he dicho antes, éste es un bello movimiento porque está dando forma a la manera como se lleva a cabo la política. Tienen realmente a las maquinarias de ambos partidos asustadas porque no saben qué vamos a hacer si no contamos con el apoyo del Tea Party. Ellos saben que no tendrán éxito.

MODERADOR: Sobresaliente. En la convención aquí, tenemos al menos a tres personas que conozco que se están presentando para el Congreso. Así que déjeme preguntarle esto, si usted tuviera la oportunidad de entrevistar a alguna de esas personas, ¿qué preguntas les haría para determinar si las iba a apoyar o no?

SARAH PALIN: Voy a preguntarles si piensan que ya pagamos bastantes impuestos. Y si dicen que sí, voy a decirles que bien y que qué van a hacer al respecto. Porque, en realidad, no sólo queremos escuchar eso. Queremos saber que hacen lo que prometen, ya sea a través de un historial con el que nos puedan demostrar que lo han hecho en otros cargos electivos que hayan ocupado. Pero quiero alentar a las personas que no tienen ninguna experiencia en cargos electos, sin un prolijo currículo elitista en su bolsillo trasero. Quiero que la gente nueva salga y se presente a los puestos y empezar a cambiar el mundo a través de estos puestos locales y estatales y los puestos  nacionales.

Pero si creen que ya pagamos bastantes impuestosa y se comprometen ante nosotros en el sentido de que van a hacer algo al respecto y sólo si creen en ese gobierno limitado constitucional que el gobierno federal tiene que empezar a acatar de una vez. Muchas de las cosas que tal vez los detalles, las cosas en la periferia con las que quizá no estaría de acuerdo con cada aspecto de la agenda que les gustaría poner en práctica, tienen que ir a lo básico, creo que sería prudente para nosotros el darles apoyo.

MODERADOR: Voy a tener que aprender a esperar a que la gente aplaude. ¡Sí! Huelga decir que el objetivo para el movimiento Tea Party en 2010 es una Cámara de Representantes conservadora y un Senado conservador o como tuve la oportunidad de decirle a algunas personas el día de hoy, el próximo año a estas alturas tenemos que ver los títulos de ex Speaker Nancy Pelosi y ex senador Harry Reid.

SARAH PALIN: Lo veremos.

MODERADOR: Cuando tengamos éxito y tengamos una Cámara de Representantes conservadora y un Senado conservador, tan pronto como eso ocurra, ¿cuáles cree que son las tres cosas que tienen que ser hechas?

SARAH PALIN: Tenemos que frenar el gasto, obviamente, y no aumentar espectacularmente los presupuestos y luego decir, OK, vamos a congelar un par de programas aquí. Eso no nos hace ningún bien en realidad. Tenemos que empezar a frenar el gasto. Tenemos que reactivar estos proyectos energéticos de los que, una vez más, hemos oído hablar mucho porque es ridículo que estemos sentados teniendo almacenados bajo la verde tierra de Dios aquí en los Estados Unidos de América, ricos recursos, petróleo y gas, y nuestro carbón y todos los recursos convencionales. Tenemos que hacer lo que prometemos, permitir que contribuyan a nuestro desarrollo.

Y entonces, creo, es algo más difícil, algo más difícil, pero permitir que el espíritu de Estados Unidos crezca de nuevo no teniendo miedo – no teniendo miedo a volver a algunas de nuestras raíces como nación temerosa de Dios donde no tenemos miedo a decir, sobre todo en tiempos de problemas potenciales para el futuro, no teniendo miedo a decir, ustedes ya saben, que no tenemos todas las respuestas como hombres y mujeres falibles.

Por lo tanto, sería prudente para nosotros el comenzar a buscar algún tipo de intervención divina, de nuevo en este país, para que podamos estar a salvo y seguros y ser prósperos de nuevo. Tener a gente implicadas en el gobierno que no tengan miedo de ir por ese camino, no tanto miedo a la corrección política que, ya saben, tengan que tener miedo de lo que los medios de comunicación puedan decir de ellos si fueran a proclamar su confianza en nuestro Creador.

MODERADOR: Eso está bien. Amén. Ahora, sabemos que los conservadores no son acosados nunca en los medios de comunicación, así que lo siguiente es claramente una cuestión hipotética. En el caso de que alguna vez algún conservador fuera acosado en los medios de comunicación, ¿qué les diría usted a ellos?

SARAH PALIN: Pasa directamente a través de ellos. En realidad, al final del día, ¿a quién le importa lo que un irrelevante medio de comunicación va a decir de ti?¿ A quién le importa? Los tiros políticos que te disparan por ponerte de pie y decir lo que creemos y proclamar el amor patriótico que sientes por el país, muchos de esos en los medios de comunicación no quieren oírlo. Al final del día, realmente no importa lo que tienen que decir acerca de ti porque realmente creo que hay más de nosotros de lo que nos quieren hacer creer. Eso debería fortalecernos y permitirnos pasar a través de ellos, por favor.

MODERADOR: Hemos mencionado que hoy es… o hubiera sido su 99º cumpleaños, el 99º aniversario de su nacimiento. Y una de las cosas sorprendentes que hizo Ronald Reagan cuando estaba en la Casa Blanca fue crear esa gran mayoría que no se basaba en republicanos y demócratas, pero había una mayoría conservadora en el Congreso. ¿Qué cree que podemos hacer para que los demócratas conservadores, los libertarios conservadores, los independientes conservadores suban a bordo con el movimiento Tea Party para que en el año 2011, cuando un nuevo Congreso y un nuevo Senado asuma su cargo sean conservadores?

SARAH PALIN: Oye, que ya están asomando. Es muy agradable ver a algunos de los demócratas conservadores asomando bajo la tienda, ya saben, y descubrir, de qué va todo este movimiento, y tengo miedo si no soy parte de ello.

Y lo bueno del movimiento Tea Party, no es sólo un montón de republicanos estrictos registrados. Voy a hacer una confesión ahora mismo. Mi marido, no es un republicano registrado. Es demasiado independiente, pero probablemente más conservador que yo incluso, pero creo que es una especie de ejemplo de tantos otros estadounidenses que no quieran ser parte de un partido porque ven los problemas dentro de la maquinaria .

Ven algunas de las idiosincrasias de los personajes que controlan la maquinaria política y no quieren perder el tiempo tratando con eso, así que son independientes, pero creen en el movimiento y creo que vamos a ver a muchos de los independientes y de los demócratas más conservadores fortalecerse y decir con fuerza, sí, voy a salir del armario y voy a decirles que yo también creo en ello.

Ahora, cuando hablo de Todd explicando que él no es un republicano registrado, creo que tengo que pedir disculpas al Partido Republicano debido a que algunas personas han dicho, eres una portavoz republicana muy floja si ni siquiera puede conseguir convertir a tu propio marido, pero es que es demasiado independiente.

MODERADOR: No se sienta mal. Mi esposa dejó el Partido Republicano también. Hemos oído sobre el plan de Obama. ¿Cuál es el plan de Palin?

SARAH PALIN: El plan de Palin es bastante simple y puedo darles un anticipo de él. Creo que esto provocarà que algunos de esos elitistas loco se enojen cuando se enteren de ello. Cuando dicen que soy demasiado simple y que hablo de manera muy llana, pero mi plan es muy simple y es apoyar a aquellos que entienden los cimientos de nuestro país.

Cuando se trata de la economía, son los principios de libre mercado que recompensan el trabajo duro y la responsabilidad personal. Y cuando se trata de la seguridad nacional, al remachar el mensaje de la seguridad nacional, es fácil de resumir repitiendo lo de Ronald Reagan cuando hablaba de la Guerra Fría. Y podemos aplicar eso ahora a nuestra guerra contra el terrorismo, ya sabes. Última línea: nosotros ganamos, ellos pierden. Hacemos todo lo posible por ganar.

MODERADOR: Para usted, la seguridad nacional es algo más que un asunto personal. Usted tiene un hijo en el ejército. ¿Cómo lo lleva?

SARAH PALIN: Lo está haciendo impresionantemente. Y estoy muy orgullosa de él y la decisión que tomó junto con otros muchos, muchos hombres y mujeres de uniforme que – miro, miro especialmente los jóvenes hombres y mujeres y pienso, podrían estar haciendo otra cosa o nada en nuestro mundo y han elegido servir a algo más grande que ellos mismos. No están simplemente gastando tiempo de los años de juventud de sus vidas. Los ganan. Ellos entienden la necesidad de proteger nuestra seguridad y estar realmente dispuestos a morir por nuestra libertad. Y cuando hablo de mi hijo, y a él no le gusta que hable de él, como cuestión de hecho, él me va a morder si se entera de esto, pero…

MODERADOR: Puede que le esté viendo.

SARAH PALIN: No creo que jamás haya sintonizado C-SPAN en toda su joven vida. Pero yo estoy orgullosa de él y de la decisión que ha hecho porque, de nuevo, sirven a algo más grande que ellos mismos, pero como Track, como mi hijo me diría, él dice, no me des las gracias a mí, mamá. Da las gracias a las tropas con las que que sirvo y da las gracias a los que han ido antes que yo para permitirme hacer lo que estoy haciendo, sí.

MODERADOR: 2010 es un año increíble porque es un año electoral. Estamos acercándonos a las primarias. Acabamos de llegar de Illinois y ni siquiera estoy seguro de lo que viene a continuación. ¿Va a apoyar a determinados candidatos?

SARAH PALIN: Lo haré. Y voy a asistir a  tantos actos de apoyo a esos candidatos como sea posible. Probablemente indignaré a algunas personas en tanto me involucre, incluso en unas pocas primarias, pero quiero animar esas disputadas primarias. Verdaderamente, ésta es la forma en que vamos a encontrar a los mejores para hacer frente a un rival en las generales. No tengamos miedo a las primarias disputadas. Voy a ayudar en algunos casos, pero voy a salir por ahí y hacer campaña y, si no en todas las elecciones, haciendo campaña por determinados candidatos, voy a estar haciendo campaña por el mensaje, este mensaje de sentido común conservador.

MODERADOR: Puedo pensar en dos palabras ahora mismo que asustan a los  liberales: Presidente Palin.

[APLAUSOS]

MULTITUD: ¡Vamos, Sarah!

Una vez concluida su intervención del sábado, Sarah Palin acudió al día siguiente al programa de Chris Wallace, Fox News Sunday, para ser entrevistada. Es en esta entrevista donde Sarah hizo ese comentario que tantas expectativas ha despertado entre todos nosotros (y tanto miedo ha provocado entre los izquierdistas) en el sentido de que no descarta presentarse a las elecciones presidenciales de 2012. Como quiera que se trata de la primera vez en que Sarah no rehuye pronunciarse sobre ello, me ha parecido importante traducirles ese fragmento para que cada uno pueda decidir hasta qué punto echa las campanas al vuelo ante la perspectiva de una candidatura Palin 2012. Por mi parte, ya les digo: ¡las he echado al vuelo con toda mi alma y el sacristán está persiguiéndome como un loco por todo el campanario diciendo que voy a derrumbarle la iglesia! Por cierto, las negritas son mías, ¿eh?

ENTREVISTA A SARAH PALIN
Fox News Sunday con Chris Wallace
7 de febrero de 2010

WALLACE: (…) Ha aparecido una nueva encuesta esta semana de votantes republicanos de todo el país y muestra que alguien llamado Sarah Palin lidera la carrera hacia 2012 por cinco puntos sobre Mitt Romney. ¿No es usted el caballo ganador de la nominación?
PALIN: Nanay. No sabemos quién condujo esa encuesta y bien que sé que las encuestas suben y bajan. Después de esta entrevista, Chris,  igual vemos una caída en picado en los resultados de la encuesta. Quién sabe. Las encuestas son cambiantes. No puedo hacer ningún comentario sobre lo que significan las cifras de una encuesta hoy
WALLACE: ¿Por qué no presentarse a presidente?
PALIN: Lo haría. Lo haría si creyera que eso es lo correcto a hacer por nuestro país y por la familia Palin. Ciertamente, lo haría.
WALLACE: ¿Y cómo tomará esa decisión de aquí a los próximos tres años?
PALIN: Afortunadamente hay un montón de tiempo para tomar esa decisión. Ahora mismo, estoy mirando, como le digo, a otros potenciales candidatos por ahí que sean sólidos. Ellos están en la situación de tener el lujo de disponer de más información en sus manos ahora mismo. Así que los sucesos actuales de los que estamos hablando…
WALLACE: Espere, espere, espere… Porque… Usted está diciendo básicamente que lo considerará.
PALIN: Creo que sería absurdo no considerar lo que puedo hacer potencialmente para ayudar a nuestro país. No sé si eso implicará finalmente el buscar un cargo. Podría ser que fuera simplemente el hacer un condenadamente buen trabajo como periodista o cubriendo alguno de los sucesos actuales.
WALLACE: Pero usted va a considerarlo, usted va a pensárselo…
PALIN: No me cerraré esa puerta que tal vez esté abierta para mí en el futuro. No quiero que ningún estadounidense se cierre ninguna puerta en su vida personal o professional y se meta en una caja y diga, caramba, voy a hacer esto. O, no hay manera de que haga esto otro cuando no sabemos lo que nos deparará el futuro.

Y por lo que se refiere a la controversia sobre sus honorarios por pronunciar el discurso, aquí está lo que dijo Sarah al respecto en esa misma entrevista.

WALLACE: (…) Corre la voz de que va a cobrar 100.000 dólares por su discurso de este fin de semana. ¿Es cierto?
PALIN: No voy a quedármelos. Están preparando un cheque – un cheque de 100.000 dólares. Y como ya he dicho desde el primer día sobre este tema, voy a devolverlos directamente y hacer que sirvan a la causa. Eso significa a la gente, para actos…
WALLACE: ¿Así que va a usar su PAC y contribuir con ellos a candidatos?
PALIN: No sé si van a ir al PAC o si van a ir a alguna sin ánimo de lucro o qué. Aparte: no voy a beneficiarme personalmente de todo esto. Y lo más divertido es que he tenido a muchas personas, incluyendo a un par de personas de talento de la FOX, diciendo cosas divertidas sobre este tipo de discursos. Sarah, eres rara. Nadie ha cobrado antes. ¿Te van a pagar por eso? ¿Oh, qué vas a hacer con el dinero? Pero ésta es la nueva normalidad que se me viene encima, es la de la gente queriéndome tener bajo el microscopio y sabiendo hasta la última cosa de mí, el más pequeño detalle de mi vida, incluyendo las tarifas por pronunciar un discurso. Aparte: para el movimiento Tea Party. Voy a devolver el dinero a la causa.

Y, por fin, con respecto a la ausencia de dos de las oradoras previamente anunciadas, las representantes por Minnesotta Michelle Bachmann y por Tennessee Marsha Blackburn, tan sólo dejar constancia de que no se trata en absoluto de un repudio por parte de éstas al movimiento Tea Party, al que siguen apoyando como el primer día, sino que el problema ha venido precisamente por su responsabilidad actual como representantes en el Congreso de Estados Unidos.

Dado que Tea Party Nation, la organización de organizaciones que se ha encargado de la organización de todo el evento, es una organización con ánimo de lucro y dado que habían surgido ciertas dudas con respecto al destino que se le iba a dar a todo el dinero recaudado durante el fin de semana (se hablaba de usarlo para financiar candidatos por todo el país de cara a las elecciones de noviembre), los encargados de las cuestiones éticas del Congreso advirtieron a las dos representantes que su asistencia a tal evento podía ser de alguna manera “incompatible” con su status como representantes. Así pues, y tal como dijo la propia Bachmann, ambas han preferido errar si acaso por exceso de cautela y suspender su presencia en Nashville el fin de semana, lo cual ha sido verdaderamente una lástima porque hubiera sido estupendo haber visto a las tres, Sarah, Michelle y Marsha, juntas. En esta ocasión, no ha podido ser. Afortunadamente, Sarah es una mujer libre en todos los sentidos, incluso en el de tener que justificar sus ganancias ante nadie, y ella no ha se ha visto envuelta en la polémica y hemos podido gozar de sus palabras y de su figura sin la menor traba.

No importa. Si esta vez no ha podido ser, lo será en la siguiente. No podrán con ellas. Las dos son chicas y son valientes. Y están más que hartas de tener que pelearse con todos para lograr sus fines. Atentas a ellas porque estoy convencido de que sabremos mucho de ellas en estos años que vienen. Y si no, al tiempo.

Hasta el fin de semana.


EL DISCURSO DE SARAH PALIN EN NASHVILLE (O SÍ, SÍ, SÍ, ¡PALIN 2012!)

09/02/2010

 

Tenía que suceder. Después de tanto tiempo observándose atentamente el uno al otro, el movimiento Tea Party y Sarah Palin han decidido unir sus fuerzas y emprender juntos el camino hacia las elecciones de 2012 con una parada previa el próximo mes de noviembre con ocasión de las elecciones del midterm. El terror se ha adueñado de las filas demócratas por más que estos pretendan disimularlo con sus habituales bobadas. Y lo mejor del caso es que entre las filas republicanas, tan rebosantes de RINO, también se oyen expresiones de temor ante el anuncio de Sarah de que va a apoyar a los candidatos que estime oportunos y no a los que le diga el partido. Más de uno se ve ya en el trance de tener que poner al día su currículo por lo que pueda pasar. Recuerden bien esta fecha: 6 de febrero de 2010. Porque con el tiempo todos nosotros la recordaremos como el día en que Sarah Palin renovó ante el pueblo estadounidense y, por extensión, ante todos los amantes de la libertad de todo el mundo, aquel compromiso que adquirió voluntariamente durante la pasada convención republicana de 2008 de ser nuestra abanderada en nuestra lucha por un gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo. Sarah ha vuelto y esta vez nada la detendrá. Ella nos llama a su lado. ¿Quién puede ignorar esa llamada? Aquí estamos, Sarah. Te esperábamos. Estamos contigo.

Hay que ver lo que les escuece a los demócratas la incapacidad congénita del presidente de Estados Unidos para hilvanar tres frases seguidas sin ayuda y no padecer un colapso nervioso por el esfuerzo. Pero qué se puede esperar de alguien que necesita de su teleprompter para dirigirse a una clase de niños de 6º de Primaria (véanlo aquí). Muertos de celos, los demócratas andan ahora reprochando a Sarah Palin que llevara anotadas en la mano unas pocas palabras para ayudarse en su discurso del sábado pasado. En concreto, son seis palabras: “Energy”, “Budget”, “Taxes” y “Lift America’s spirits”, como se puede ver en la imagen de arriba. Bueno, si resulta que Sarah por tener que anotarse seis palabras de un discurso de más de 5.000 es burra, ya me dirán ustedes lo que es el presidente.

Por cierto, que la mejor respuesta a esta bobada de los demócratas la tuvo la propia Sarah Palin cuando, al día siguiente, participó en un rally de apoyo a la reelección del gobernador de Texas, Rick Perry (Go, Rick, go!). Consciente de que los de los medios de comunicación iban a estar pendientes de su mano, vean lo que se escribió esta vez: “Hi, mom!” La versión educada del “tonto quien lo lea”. ¡Ja, ja, ja!

Y como que lo prometido es deuda, aquí tienen mi (mala) traducción del discurso de Sarah Palin. Histórico discurso, creo yo. Pueden verlo íntegramente aquí abajo. De verdad que merece la pena.

 

DISCURSO DE SARAH PALIN EN LA 1ª CONVENCIÓN NACIONAL  DEL MOVIMIENTO TEA PARTY
Nashville (Tennessee), 6 de febrero de 2010

[COMIENZO DEL DISCURSO]

[APLAUSOS]

Muchas gracias. Gracias.

[APLAUSOS]

Muchas gracias. Dios les bendiga.

[APLAUSOS]

Gracias. Muchas gracias.

[APLAUSOS]

Estoy tan orgullosa de ser estadounidense.

[APLAUSOS]

Muchas gracias por estar aquí esta noche.

[APLAUSOS]

¿Les gusta su libertad? Si aman su libertad, piensen en ello. ¿Alguno de ustedes ha servido de uniforme, antes o ahora? Levante la mano. Vamos a darles las gracias por nuestra libertad. Dios les bendiga, muchachos. Les saludamos. Les honramos. Gracias.

[APLAUSOS]

Estoy tan orgullosa de ser estadounidense. Gracias. ¡Caray! Gracias. Feliz cumpleaños, Ronald Reagan.

[APLAUSOS]

Bueno, una especial bienvenida a los espectadores la C-SPAN. Ustedes pueden no ser bienvenidos a esas negociaciones sobre la atención de la salud, pero tienen una invitación al Tea Party.

[APLAUSOS]

Muy contenta de estar aquí, en Tennessee, el estado voluntario. Es el hogar de la buena música country y una buena barbacoa sureña, y es genial el estar en la convención del Tea Party. Supongo que aquí hay un poco de té dulce del sur. En Alaska tenemos una versión más pequeña de la fiesta del té allí arriba. Y lo llamamos té helado.

[RISAS]

Y yo soy una gran partidaria de este movimiento. Creo que en este movimiento. Tengo muchos amigos y familiares en los 48 de abajo que asisten a estos actos en todo el país, y el hecho de saber que éste es el movimiento y que Estados Unidos está listo para otra revolución y que ustedes son parte de ello.

[APLAUSOS]

Espero poder asistir a más actos Tea Party en el futuro próximo. Es tan inspirador ver a personas reales, no a políticos…

[RISAS]

… ni a los profesionales de la política y salir y ponerse de pie y hablar por el sentido común, por los principios conservadores.

Y hoy quiero comenzar con una nota especial para el más reciente senador de Estados Unidos. Gracias a usted, Scott Brown.

[APLAUSOS]

Ahora bien, en muchos aspectos, Scott Brown representa lo más hermoso de este movimiento. Era sólo un tipo con una camioneta y la pasión de servir a nuestro país. Miró a su alrededor y vio que las cosas no estaban del todo bien en Washington por lo que se levantó y decidió que iba hacer su parte para poner a nuestro gobierno de nuevo al lado de la gente. Le echó valor y le costó un montón de trabajo duro, pero con el apoyo popular, Scott Brown llegó a la meta. Ha sido tan interesante ver ahora las consecuencias del grito de revolución de Massachusetts a cabo la revolución.

La Casa Blanca culpa al candidato. Su candidato. Y Nancy Pelosi, ella culpó a los demócratas del Senado. Y Rahm Emanuel, él criticó a un encuestador.

[RISAS]

Y una vez más, el presidente Obama encontró alguna manera de culpar de todo esto a George Bush.

[RISAS]

Ya saben, considerando la razón por la que los conservadores barren en las elecciones es hora de que dejen de culpar a los demás. Cuando uno va cero a tres, es mejor dejar de sermonear y empezar a escuchar.

[APLAUSOS]

El único lugar en el que la izquierda no ha hecho recaer la culpa está en su agenda. Así que un consejo para nuestros amigos a ese lado del pasillo. Ahí es donde tenéis que mirar porque eso es lo que os metió en este lío. La agenda Obama / Pelosi / Reid nos dejará con menos seguridad, más en deuda y bajo la férula de un gran gobierno. Eso está fuera de perspectiva y fuera de fechas. Y si Scott Brown es un indicador, se le está acabando el tiempo.

[RISAS]

Porque desde Virginia hasta Nueva Jersey y hasta Massachusetts, los votantes están enviando un mensaje por toda la costa oriental y en buenos lugares como Nevada y Connecticut y Colorado, Michigan, Dakota del Norte, que tienen a la izquierda liberal, ese establishment está espantado.

El mensaje de fondo es éste. Ha pasado ya un año. Son dueños de esto ahora y los votantes van a pedirles cuentas. Porque aquí, en las ciudades y en los pueblos por todo este gran país sabemos que tenemos grandes problemas que resolver. Nos hemos cansado ya de mirar hacia atrás. Queremos mirar hacia adelante y, desde aquí, amigos míos, el futuro se ve muy bien. Se ve muy bien. Porque si hay esperanza en Massachusetts, hay esperanza en todas partes.

[RISAS]

La victoria de Brown es emocionante y es un signo de más cosas buenas por venir. Un montón de grandes candidatos conservadores con sentido común van a ponerlo todo en cuestión en 2010. Este año, va a haber primarias difíciles. Y creo que eso es bueno. La competencia en estas primarias es bueno. La competencia nos hace trabajar más y ser más eficientes y producir más. Espero que saldrán fuera y trabajaran duro para los candidatos que reflejen sus valores, sus prioridades, porque a pesar de lo que los expertos quieren que piensen, las primarias disputadas no son una guerra civil. Son la democracia en acción y eso es hermoso.

[APLAUSOS]

Yo fui el resultado de unas disputadas primarias a gobernador. Me enfrenté a cinco tipos en el partido y pusimos nuestras ideas y nuestra experiencia allí sobre la mesa de debate. Y entonces dejamos, por supuesto, que los votantes decidieran. Este es un proceso saludable. Y da a los estadounidenses el tipo de liderazgo que quieren y que merecen. Y así en 2010, me descubro ante cualquiera que tenga el coraje de saltar al ring y permitir que ganen las mejores ideas y candidatos.

Pero mientras esperamos a que den a los candidatos que elijan su mejor esfuerzo, por favor entiendan que son humanos. No hay un candidato perfecto. Y van a decepcionarles de vez en cuando. Y cuando lo hagan, déjenselo saber, pero no se desanimen y se sienten porque las apuestas son demasiado altas. Lo que está en juego ahora mismo es demasiado importante y su voz es demasiado importante, así que trabajen duro por estos candidatos, pero pongan su fe en las ideas.

Y con ese espíritu, les advierto contra el permitir que este movimiento sea definido por cualquier líder o político. El movimiento Tea Party no es una operación de arriba abajo. Es una llamada popular a la acción que está forzando a ambos partidos a cambiar la manera en que llevan su negocio y eso es hermoso.

[RISAS]

Se trata de la gente. Se trata de la gente. Y es más grande que cualquier rey o reina de un Tea Party. Y es mucho más grande que cualquier tipo carismático con un teleprompter.

[RISAS]

El alma de este movimiento es el pueblo, los estadounidenses corrientes, que cultivan nuestros alimentos y llevan nuestros pequeños negocios, que enseñan a nuestros hijos y luchar en nuestras guerras. Son gente en pequeños pueblos y ciudades de toda esta gran nación que vio lo que estaba pasando y que se preocuparon y se involucraron. Al igual que ustedes, ellos van a las reuniones del ayuntamiento y escriben artículos de opinión. Se presentan como candidatos a cargos locales. Todos ustedes tienen la valentía de levantarse y hablar alto. Ustedes tienen una visión del futuro, una que valora los principios conservadores y las soluciones de sentido común. Y si esto suena como usted, entonces usted probablemente también se sienta un poco desanimado por lo que ve en Washington, DC

Ahora, en las últimas semanas, muchos de nosotros nos hemos sentido aún más incómodos sobre el enfoque de nuestra administración para la seguridad nacional, el papel más importante atribuido a nuestro gobierno federal.

[APLAUSOS]

Permítanme decir también que no es politizar nuestra seguridad el hablar de nuestras preocupaciones porque los estadounidenses merecen saber la verdad sobre las amenazas que enfrentamos y lo que el gobierno está o no está haciendo al respecto. Así que vamos a hablar de ellas. Nuevos términos utilizados como «operación de emergencia en el extranjero» en lugar de la palabra «guerra». Eso refleja una visión del mundo que está fuera de la realidad con el enemigo al que nos enfrentamos. No podemos ignorar esta amenaza. Una cosa es llamar a un aumento de sueldo un puesto de trabajo creado o salvado. Otra muy distinta es llamar a la devastación que un suicida homicida puede infligir un «desastre provocado por el hombre». Yo sólo digo, vamos, Washington, de entre todos los sitios, la seguridad nacional, es el sitio donde tienes que llamar a las cosas como son.

[APLAUSOS]

Y con ese espíritu, con ese espíritu, deberíamos reconocer que, el día de Navidad, el sistema no funcionó. Abdulmutallab pasó a través de la seguridad del aeropuerto con una bomba y se embarcó en un vuelo infernal para matar a pasajeros inocentes. Este terrorista se entrenó en Yemen con Al Qaeda. Su visado americano no fue revocada hasta después de que tratara de matar a cientos de pasajeros. El día de Navidad, la única cosa que detuvo a este terrorista fue la ciega suerte y los valientes pasajeros. Fue un milagro de Navidad. Y ésa no es la forma en que el sistema se supone que funciona.

[APLAUSOS]

Lo que siguió fue igualmente preocupante después de su captura. Fue interrogado durante sólo 50 minutos. Tenemos una opción en la forma de hacer esto. La elección fue preguntarle durante sólo 50 minutos y luego leerle sus derechos. La administración dice que no hay ventajas o desventajas en tratar a los terroristas como civiles acusados de delitos penales. Pero muchos de nosotros osamos discrepar. Por ejemplo, hay preguntas que nos hubiera gustado que este terrorista extranjero hubiera respondido antes de que fuera asistido por un abogado e invocara nuestro derecho constitucional estadounidense a permanecer en silencio.

[APLAUSOS]

Nuestros derechos constitucionales estadounidenses.

[APLAUSOS]

Nuestros derechos que usted, señor, luchó y estuvo dispuesto a morir por protegerlos en nuestra Constitución.

[APLAUSOS]

Los derechos por los que mi hijo, como soldado de infantería del Ejército de Estados Unidos, está dispuesto a morir. La protección prevista, gracias a usted, señor, vamos a concedérsela a un terrorista que odia nuestra Constitución y trata de destruir a nuestra Constitución y a nuestro país. Esto no tiene sentido porque tenemos una elección en la forma en que vamos a tratar con los terroristas. No tenemos que seguir ese camino. Hay preguntas que nos hubiera gustado que respondiera antes de que fuera asistido por un abogado, como dónde exactamente fue entrenado y por quién. Usted está presumiendo de todos esos otros terroristas como usted, ¿quiénes son? ¿Cuándo y dónde intentarán atacar la próxima vez?

Los acontecimientos que envuelven la trama del día de Navidad reflejan el tipo de pensamiento que llevó al 11-S. La amenaza de entonces, cuando el «USS Cole» fue atacado, nuestras embajadas fueron atacadas, fue tratada como una ola internacional de crímenes, no como un acto de guerra. Estamos viendo esa forma de pensar de nuevo instalándose en Washington otra vez. Eso me da miedo por mis hijos, por sus hijos. El tratamiento de esta cuestión como una mera aplicación de la ley pone a nuestro país en gran riesgo debido a que no es cómo los extremistas islámicos radicales ven todo esto. Ellos saben que estamos en guerra. Para ganar esa guerra, necesitamos un comandante en jefe, no un catedrático de Derecho de pie en el atril.

[APLAUSOS]

Es el mismo tipo de pensamiento erróneo que es visto en todas las decisiones de política exterior de la administración. Nuestro presidente pasó un año acercándose a regímenes hostiles, escribiendo cartas personales a dictadores peligrosos y pidiendo disculpas por Estados Unidos ¿y qué tenemos que mostrar a eso? Esto es lo que tenemos que mostrar. Corea del Norte prueba armas nucleares de largo alcance y misiles balísticos. Israel, un amigo y un aliado fundamental, ahora se cuestiona la fuerza de nuestro apoyo. Los planes para un sistema de defensa antimisiles en Europa han sido desguazados. Las relaciones con China y Rusia no son mejores y las relaciones con Japón, ese aliado clave de Asia, están en el peor estado en años. Y en todo el mundo, las personas que buscan la libertad de los regímenes opresivos se preguntan si Estados Unidos ese todavía ese faro de esperanza para su causa. La administración corta el apoyo para los programas democráticos. Y cuando el presidente no ha sido claro, me pregunto ¿dónde está su claridad y la fuerte voz de apoyo a los iraníes que están arriesgándolo todo en su oposición a Ahmadinejad?

[APLAUSOS]

Basta con esa corta lista, esa corta lista. Y ustedes saben, no es de extrañar que nuestro presidente sólo dedicara el  9% de su discurso  sobre el Estado de la Unión a discutir la seguridad nacional, la política exterior, porque no hay una gran cantidad de victorias de las que pudiera hablar esa noche. Y esa es una lista corta. Hay tantos desafíos frente a nosotros. Y puede parecer abrumador. Pero a pesar de estos retos, tenemos la esperanza de que podemos cambiar las cosas en la dirección correcta, pero va a exigir que la administración cambie de rumbo. Necesitamos una política exterior que distinga a los amigos de Estados Unidos de sus enemigos y reconozca la verdadera naturaleza de las amenazas que enfrentamos.

[APLAUSOS]

Necesitamos una fuerte defensa nacional. Creo que estarán de acuerdo conmigo. Como Reagan solía hablar de la paz mediante la fortaleza. En ese sentido, aplaudo al presidente por seguir al menos una parte de las recomendaciones hechas por nuestros comandantes en el terreno y enviar algunos refuerzos más a Afganistán. Ahora, sin embargo, él, nosotros, debe dedicar menos tiempo a cortejar a nuestros adversarios y trabajar con nuestros aliados. Y tenemos que construir coaliciones capaces de enfrentarse a regímenes peligrosos como Irán y Corea del Norte. Es hora de algo más que sólo hablar. Soy igual que ustedes, probablemente tan cansada del bla-bla-bla.

[APLAUSOS]

Cansada de oír la conversación.

[APLAUSOS]

Es hora de algunas medidas duras como las sanciones contra Irán. Y en los lugares del mundo donde la gente está forzada y oprimida y están luchando por la libertad, Estados Unidos deben permanecer con ellos. Necesitamos una política exterior clara de que estamos con el pueblo y para la democracia, una que refleje nuestros valores y nuestros intereses. Y es en nuestro mejor interés porque las democracias no se hacen la guerra unas a otras. Ellas pueden resolver sus diferencias pacíficamente.

La lección del año pasado es esta. La política exterior no puede ser manejada a través de la política de la personalidad. Y nuestro presidente haría bien en tomar nota de una observación que John F. Kennedy hizo una vez que estuvo en el cargo, de que todos los problemas del mundo no son culpa de su predecesor.

[APLAUSOS]

Los problemas que afrontamos en el mundo real requieren soluciones reales y es mejor llegar a ellas porque los riesgos que plantean son grandes y graves. Sin embargo, como dijo Barry Goldwater, podemos ser conquistados por las bombas, pero también podemos ser conquistados por la negligencia, haciendo caso omiso de nuestra Constitución y no teniendo en cuenta los principios del gobierno limitado. Y en el último año, sus palabras suenan verdaderas. Washington ha sustituido la irresponsabilidad privada con la irresponsabilidad pública. La lista de empresas e industrias que el gobierno está desplazando y rescatando y asumiendo el control sigue creciendo. En primer lugar, fueron los bancos, compañías hipotecarias, instituciones financieras; a continuación, los fabricantes de automóviles. Pronto, si acabaran lográndolo, la atención de la salud, los préstamos estudiantiles. Hoy en día, en las palabras del Congresista Paul Ryan, los 700.000 millones del rescate bancario se han metamorfoseado en capitalismo de compinches de la peor especie. Se está convirtiendo en un fondo para sobornos para los amigos favoritos del Departamento del Tesoro, tal y como habíamos sido advertidos. Mientras que la gente normal busca puestos de trabajo, la gente de Wall Street está recogiendo miles de millones en bonos de su rescate. Entre las 17 empresas que han recibido su dinero de rescate, el 92% de los ejecutivos superiores y directores todavía tienen sus buenos trabajos. Y los estadounidenses corrientes se están preguntando, ¿dónde están las consecuencias para ellos de haber ayudado a meternos en la peor situación económica desde la Gran Depresión? ¿Dónde están las consecuencias?

[APLAUSOS]

 Cuando Washington aprobó una ley de estímulo de 787.000 millones de dólares estábamos nerviosos, ya que acababan de gastarse 700.000 millones para rescatar a Wall Street. A escala estatal, como gobernadora, sabíamos que mucho de ese dinero llegaba con “regalos” añadidos. El gobierno federal iba a tener más control sobre nuestros estados. Iban a dejar de respetar la Décima Enmienda de nuestra Constitución, esencialmente sobornándonos. Toma este dinero federal y entonces vamos a poder mandar un poco más sobre ti. Me uní a otros gobernadores conservadores de todo el país en el rechazo de algunos de esos dólares. Los legisladores…

[APLAUSOS]

Resultó ser, sin embargo, que no había nada que aplaudir porque los legisladores estaban amenazando con demandas si los gobernadores no tomábamos el dinero. Y veté algunos de los fondos que sabía que no podíamos mantener los programas que íbamos a pagar con esos préstamos, con mero dinero impreso, dólares creados de la nada, pero las demandas eran la amenaza. Incluso en Alaska, en una legislatura controlada por los republicanos, mi veto fue anulado y el dinero invertido en esos estados. Y creo que vamos a ver esa obra en nuestros estados. El gobierno federal tomará más control sobre las personas que viven en nuestros estados.

Ahora entiendo el querer creer que se trata de dinero gratis y para algunos, supongo, es difícil decirle a la gente «no» en tiempos difíciles. Además, recuerdan la promesa de  nuestra administración de que serían buenos administradores del dinero de los contribuyentes. ¿La recuerdans? ¿La recuerda, vicepresidente Biden? Él fue puesto a cargo de un esfuerzo duro, de supervisión sin precedentes. Así es como fue presentado. ¿Saben por qué? Porque nadie se mete con Joe.

[RISAS]

Ahora, todo esto era parte de esa esperanza y cambio y transparencia. Y ahora, un año más tarde, tengo que preguntar a los partidarios de todo eso, ¿cómo les va con todo eso del cambio-esperanza a ustedes?

[RISAS]

Miren, traté de echarr un vistazo a lo de la transparencia, pero las reuniones de Joe con la transparencia y la rendición de cuentas estaban cerradas al público.

[RISAS]

Sí. Celebraron una reunión a puerta cerrada sobre la transparencia.

[RISAS]

Así que no estoy segura de que nadie se meta con Joe. Pero aquí está lo que yo sé. Una gran cantidad del dinero del estímulo ha acabado en algunos lugares bastante extraños, incluyendo los distritos que ni siquiera existían.

[RISAS]

Y los programas que realmente no tienen mucho que ver con estimular la economía. Casi 6 millones de dólares fueron  concedidos a un encuestador demócrata que ya había hecho millones durante las primarias demócratas a la presidencia. Casi 10 millones se gastaron en actualizar el sitio web del estímulo. Y un estado incluso se gastó un millón de pavos para poner carteles que anunciaban que estaban gastando el dinero federal del estímulo o, como alguien dijo, se trata de un esfuerzo de 1 millón para decirle que están gastando su dinero.

[RISAS]

Y no crearon ni un sólo puesto de trabajo.

Esos usos de los fondos de estímulo no suenan exactamente como nos habían prometido. Sólo suenan a despilfarro y, en el caso de los carteles, a una especie de ridículo. Todo ese estímulo. Yo no se ustedes, pero viendo los cheques emitidos para proyectos particulares de los congresistas y los de la Casa Blanca, ¿se sintieron ustedes muy estimulados?

[RISAS]

Y entonces resulta que Washington puso el precio equivocado. Todos estos proyectos y programas, cuestan decenas y decenas de miles de millones más que se nos dijo. Ahora se acerca a los 860.000 millones de dólares. Añadan a eso el hecho de que la Casa Blanca ni siquiera nos puede decir cuántos empleos se crearon realmente. Dependiendo de a quién se pregunte, es cualquier cifra entre miles de personas a los dos millones.

Sin embargo, de un número del que sí estamos seguros es el número de desempleados. Que es del 9,7%, muy por encima de la marca de un 8% que se nos prometió que nuestro paquete de estímulo iba a evitar. Y el desempleo es ahora – ahora el subempleo es del 16,5%. Tenemos a todas estas personas que acaban de darse por vencidas ahora mismo y que ni siquiera se inscriben en algunos de estos programas. Difícil contarlos.

Amigos, no voy a entrar en todo ello esta noche, pero la lista de promesas incumplidas es larga. El candidato Obama prometió poner fin a las puertas cerradas, los “dulces” acuerdos y contratos sin licitación de una vez por todas, pero el mes pasado su gobierno otorgó un contrato sin licitación de 25 millones de dólares a un donante demócrata. ¿Es eso esperanza? Nanay. No es la esperanza.

[RISAS]

Ésa es la misma canción, al misma canción de Washington, DC. Y en vez de cambiar la forma en que Washington hace las cosas, hemos obtenido el soborno Cornhusker y la Louisiana Purchase y millones de beneficios fiscales para los deseos de los jefes sindicales. La prometida prohibición a los cabilderos en esta nueva administración, entregó exenciones a diestro y siniestro, y hay más de 40 ex cabilderos que ahora trabajan en los niveles superiores en esta administración. Y en estos días, la mayoría de los miembros del Congreso no llegan a leer el proyecto de ley antes de tener que votar sobre él, y mucho menos las promesas de que un proyecto de ley no se convirtirá en ley antes de que todos tuvieran cinco días para revisarlo online .

Por lo tanto, ver, es fácil entender por qué los estadounidenses están sacudiendo la cabeza cuando Washington ha roto la confianza con la gente de que esos políticos están allí para servir. Nos estamos ahogando en la deuda nacional y muchos de nosotros hemos tenido suficiente. Ahora, los principios fundamentales en todo esto, es fácil de entender. Es realmente como si yo mismo creyera que a DC le encantaría creer que todo esto está muy por encima de nosotros. Alguien en Tennessee, alguien allá arriba, en Alaska, que nunca entenderá de qué estamos hablando aquí en Washington, DC. No, todo esto es algo bastante simple. Cuando nuestras familias, cuando nuestras pequeñas empresas, empiecen a tener números rojos, ¿qué hacemos? Nos apretarse el cinturón y recortarmos el presupuesto. Eso es lo que enseñamos a nuestros hijos, a vivir dentro de nuestras posibilidades. Eso es lo que Todd y yo hacemos cuando tenemos que pagar la nómina, comprar nuevos equipos para nuestro negocio de pesca. Tenemos que prever para el futuro, cumplir con un presupuesto.

Pero en Washington, ¿por qué es exactamente lo contrario de eso? Esta semana, se presentó algo rompedor, un pasmoso presupuesto federal de 3,8 billones de dólares y continúan pidiendo prestado y continuan imprimiendo dólares y continúan haciéndonos más y más dependientes de países extranjeros y continuan dando pasos hacia la insolvencia. Ahora lo que están haciendo al proponer estos grandes programas nuevos con etiquetas de precio gigantes, que está pegando a nuestros hijos con el proyecto de ley. Y eso es inmoral. Eso es robo generacional. Estamos robando las oportunidades de nuestros hijos.

Y los amantes de la libertad en todo el país deben ser conscientes de eso nos hace más dependientes de otros países, nos hace menos seguros. Eso nos hace menos libres y y eso debería alarmarnos. Así, amigos, con todos estos serios desafíos por delante, tenemos la creación de empleo privado que tiene que tener lugar y los problemas económicos y la atención de la salud, la guerra contra el terror.

Pero como dice el refrán, si no puedes montar dos caballos a la vez, no deberías estar en el circo. Así que he aquí algunos consejos para aquellos que en Washington, DC que quieren brillar en el espectáculo más grande sobre la tierra. Demasiado a menudo, cuando los grandes gobiernos y las grandes empresas se reúnen y se impone el amiguismo, bien, eso beneficia a los participantes pero no a los estadounidenses normales. La administración y el Congreso deberían hacer lo que hicimos allá en Alaska, cuando los “buenos chicos de siempre” comenzaron a cerrar tratos a escondidas que beneficiaban a las grandes petroleras y no los ciudadanos del estado. Y los ciudadanos del estado entonces, los alasqueños, nos reunimos y pusimos de nuevo al gobierno del lado de la gente. Y muchas de las grandes cabezas empezaron a meterse en problemas y algunas de las grandes cabezas terminaron yendo a la cárcel por sus tratos cerrados a escondidas.

Nuestro gobierno debe adoptar una agenda pro-mercado que no elija a los ganadores y a los perdedores sino que invite a la competencia y que iguale el campo de juego para todos. Washington tiene que llegar a todos los niveles, reducir los impuestos a las pequeñas empresas para que nuestras mamás y papás puedan reinvertir y contratar a personas para que nuestras empresas puedan prosperar. Deberían apoyar la competencia, apoyar la innovación, premiar el trabajo duro.

Y debería hacer todo lo posible para asegurarse de que el juego es justo sin la influencia corrupta. Y entonces tienen que sacar al gobierno del camino. Si pudieran hacer esto, si pudieran hacer esto, nuestra economía resucitaría y, por ejemplo, sobre el cuidado de la salud, necesitamos soluciones bipartidistas para ayudar a las familias y no subir los impuestos. ¿Recuerdan aquel botón de reinicio rojo que los Estados Unidos a través de la secretaria Clinton dio a Putin? ¿Lo recuerdan? Creo que deberíamos pedirles que nos lo devolvieran y dárselo al Congreso. Y decirle que no, que empiece desde el principio con esee plan de atención de la salud y aprueben reformas con sentido, orientadas al mercado que incorporen algunos pasos simples que tienen un amplio apoyo. Las mejores ideas, no tratos hechos a oscuras sino compras de seguros a través de líneas estatales y la reforma de los pleitos por negligencia de las que ya hemos hablado.

Esas cosas que son medidas de sentido común hacia la reforma que la Casa Blanca y los líderes en el lado de los demócratas del Congreso, que no quieren tener en cuenta. Por lo que hace pensar, ¿cuál es realmente su motivación? ¿Cuál es su intención si no se consideran siquiera estas medidas de sentido común, con amplio apoyo social que funcionarían? Y para crear puestos de trabajo. Washington debería reactivar los proyectos de energía. Dije durante la campaña y lo voy a decir ahora, necesitamos enfocarnos más en la política energética. Eso significa el desarrollo de recursos convencionales probados y el apoyo a la energía nuclear. Y yo estaba agradecida de que el presidente, al menos, mencionara la energía nuclear en su Estado de la Unión.

Pero, de nuevo, necesitamos más que palabras. Necesitamos un plan para convertir este objetivo en una realidad y de la forma en que puede allanar el camino para proyectos que crearán puestos de trabajo, los que son creadores de empleos reales y suministran energía libre de carbono. Y mientras estamos en ello, vamos a acelerar la reglamentación y la concesión de permisos y legalizar los procesos de perforación mar adentro.

En vez de pagar miles de millones de dólares, cientos de miles de millones de dólares que ahora están siendo enviados a regímenes extranjeros, deberíamos perforar aquí y ahora de perforación en lugar de confiar en ellos para desarrollar sus recursos para nosotros. Entonces, ¿qué tenemos que hacer es acabar con el plan de cap-and-tax, esa política va a matar a puestos de trabajo y va a pasar la carga de pagar por ello a nuestras familias trabajadoras.

Y, por último, si vamos a tomar en serio la austeridad fiscal, entonces tenemos que hacer que Washington sea el primero. Después de ponernos en el camino de cuadruplicar el déficit, la propuesta de congelar el gasto, tal vez es un comienzo, pero ciertamente no es suficiente. Como el senador John Thune dijo, es como poner una tirita en una herida autoinfligida por arma de fuego.

Tenemos que ir más allá. Reducir el gasto. No limitarnos simplemente a frenar una ola de gastos y tenemos que acabar con los planes para un segundo estímulo cuando del primero todavía no se ha medido su éxito siquiera. Mata a los planes para el segundo estímulo y ser conscientes de que ahora que el segundo estímulo se conoce como un proyecto de ley de empleo. Ahora bien, estas no son las únicas vías para frenar el gasto y solas no van a ser suficientes, no van a ser suficientes para hacer frente a la locura de la deuda y el déficit a los que nos enfrentamos. Pero son una buena forma de empezar y para demostrar que somos serios acerca de poner nuestra finanzas en orden.

Ahora, como muchos de ustedes tal vez, he pasado el último año pensando en cómo servir mejor. ¿Cómo puedo ayudar a nuestro país? ¿Cómo puedo asegurarme de que yo, que usted, que estamos en una posición de que nadie sea capaz de tener éxito? Cuando tratan de decirnos que nos sentemos y nos callemos, ¿cómo podemos servir mejor? En 2008, tuve el honor de verdad de toda una vida, el honor de toda una vida, presentándome al lado de John McCain. Lo miro como un héroe estadounidense. Y casi 60 millones de americanos votaron por nosotros. Votaron para las cosas que estamos hablando esta noche. Impuestos más bajos, gobierno más pequeño, transparencia, independencia energética y seguridad nacional fuerte. Y mientras que no, nuestros votos no nos llevaron al triunfo, eran todavía una llamada a servir a nuestro país. Esos votantes querían que siguiéramos luchando y querían soluciones de sentido común conservador y querían que siguiéramos debatiendo. Y cada uno de nosotros que estamos hoy aquí somos la prueba viviente de que no necesitan una oficina o un cargo para cambiar las cosas y no necesita un líder proclamado como si todos fuéramos sólo un montón de ovejas y estuviéramos buscando un líder para el progreso de este movimiento.

Eso es por lo que estamos luchando. Es por lo que estamos peleando. Es lo que creemos y eso es de lo que este movimiento se trata. Cuando la gente está dispuesta a reunirse a mitad de camino y luchar por soluciones de sentido común y de valores, entonces queremos trabajar con ellos. Y con ese espíritu, aplaudo a los independientes y a los demócratas como Bart Stupak que se mantuvo firme frente a duras presiones partidistas y quería proteger la santidad de la vida y los derechos de los pronto a nacer. Le aplaudo por ello.

Cuando podamos trabajar juntos, lo haremos. Pero cuando el trabajo de Washington viole nuestras conciencias y cuando el trabajo y el esfuerzo de Washington, DC, viole nuestra Constitución, entonces nos pondremos en pie y seremos contados. Debido a que somos la oposición leal. Y tenemos una visión para el futuro de nuestro país y es una visión anclada en verdades puestas a prueba por el tiempo.

Que el gobierno que gobierna menos, gobierna mejor. Y que la Constitución prevé la mejor hoja de ruta hacia una unión más perfecta. Y que sólo un gobierno limitado puede expandir la prosperidad y oportunidad para todos y que la libertad es un derecho dado por Dios y por el que merece la pena luchar. Dios les bendiga. Y que los mejores de Estados Unidos, nuestros hombres y mujeres de uniforme, son una fuerza para el bien de todo el mundo y que no tenemos nada de qué disculparnos.

Estas son verdades perdurables y estas verdades perdurables se han transmitido desde Washington a Lincoln a Reagan y ahora a ustedes. Sin embargo, aunque este movimiento, nuestras raíces allí, en nuestro espíritu, también, son históricos. La forma actual de este movimiento es fresca y es joven y es frágil. Somos ahora los guardianes de una tradición honorable de los valores conservadores y las buenas obras. Y no debemos olvidar que es un deber sagrado llevar estas ideas adelante. Exige civismo y requiere un decente debate constructivo orientado a los asuntos.

Los opositores de este mensaje están tratando de marginar a este movimiento. Ellos quieren pintarnos como ideológicamente extremos y el contrapunto a la tolerancia liberal y teóricos de la conspiración escandalosa dirigida contra nuestro propio gobierno y con tácticas poco éticas y descarada como considerar un objetivo los niños de un candidato.

Pero a diferencia de los elitistas que denuncian este movimiento, simplemente no quieren escuchar el mensaje. He viajado por todo este gran país y he hablado con los patriotas hombres y mujeres que componen el movimiento Tea Party y son buenos, amables y desinteresados y están profundamente preocupados por nuestro país. Y hoy les pido sólo esto, vamos a hacer de este movimiento un homenaje a su buen ejemplo y hacerlo digno de su arduo trabajo y su apoyo.

No dejemos que nuestras cabezas se vuelvan de la importante labor que tenemos ante nosotros y no demos a otros una excusa para poder apartar la vista de ello. No nos inmiscuyamos en las disputas pequeñas. Vamos a centrarnos en las grandes ideas. Hacer eso sería un digno homenaje a Ronald Reagan, especialmente esta noche, ya que habría cumplido 99 años. Ya no está con nosotros. Su espíritu vive y su sueño americano permanece. Él sabía que los mejores de nuestro país no están todos reunidos en Washington, DC. Es aquí, en nuestras comunidades, donde viven las familias y los niños aprenden y los niños con necesidades especiales son bienvenidos a este mundo y abrazados. Y gracias por eso.

Los mejores de Estados Unidos se puede encontrar en lugares donde los patriotas son lo suficientemente valientes y lo suficientemente libre como para poder ponerse de pie y hablar y donde las empresas pequeñas ayudan a crecer a nuestra economía con un empleo a la vez y gente como Reagan, sabemos que Estados Unidos sigue siendo la brillante ciudad sobre una colina. Yo creo que Dios derramó su gracia sobre ti. Sabemos que nuestros mejores días aún están por venir. Tea Party Nation, sabemos que no hay nada estropeado en Estados Unidos que, juntos, no podamos arreglar como estadounidenses.

Desde el fondo de mi corazón y en nombre de millones y millones y millones de estadounidenses que quieren fomentar este movimiento, este movimiento es por la gente. ¿Quién puede discutir de un movimiento que es del pueblo y para el pueblo? Recuerden, todo el poder político es inherente al pueblo y el gobierno se supone que debe trabajar para el pueblo. Eso es de lo que se trata este movimiento.

Desde el fondo de mi corazón, les doy las gracias por ser parte de la solución. Dios les bendiga, tea partiers y Dios bendiga a los EE.UU. Gracias. Dios les bendiga.

[FIN DEL DISCURSO]

¡Guau, vaya discurso! Y eso no es todo. En la próxima entrada, les ofreceré la traducción de la parte en la que Sarah Palin responde a las preguntas del público, además de comentarles más cosas sobre todo lo que aconteció en Nashville. Y sí, también les hablaré sobre la famosa entrevista en la Fox en la que Sarah reconoce por primera vez que podría presentarse como candidata a las elecciones presidenciales de 2012. Y resolveremos también la duda más angustiosa de todas las que planteaba esta viaje a Music City: ¿pudo conocer Piper a su admirada Miley Cyrus / Hanna Montana o no?

Por cierto, ha aparecido un artículo de opinión mío en Semanario Atlántico. Se titula: Desmitificando a Sarah Palin… ¡al fin! Confío en que les guste.


SARAH PALIN VUELVE A LA UNIVERSIDAD

13/12/2009

 

En esta entrada les voy a presentar la traducción de un artículo que tenía guardado y que se me había olvidado por completo que lo tenía. Cosas de la edad… El caso es que cuando lo leí, me gustó mucho y pensé que sería interesante compartirlo con todos ustedes. Ya no se trata sólo de lo que fue el discurso de Sarah en la Universidad de las Ozarks, sino del ambiente que se respira en cada una de sus apariciones públicas y la manera como ella, silenciosa pero constantemente, empieza a marcar distancias con respecto a su principal rival, el presidente de Estados Unidos. Leyéndolo, no he podido dejar de imaginarme lo que podría ser un debate televisado entre Sarah y él. A buen seguro que sería un verdadero debate y no un mero “sí, bwana” como acostumbran a ser los debates en los que una de las partes es un político progre. Se hablaría y se hablaría de verdad; fuerte y sin pelos en la lengua y como quiera que los progres a la que los sacas de su tan manido “no a la guerra” y “paz para nuestro tiempo” se quedan en blanco, nos divertiríamos de lo lindo. ¡Ah, qué ganas tengo! ¿Cuánto dicen que falta para 2012?

Me he tomado la libertad de ponerles aquí una foto tomada de la página de Sarah en Facebook. Mírenla bien porque es realmente simbólica, pero es que a pesar de tratarse de una mera foto, la emotividad que se desprende de ella es tanta que es imposible no apreciarla. Se llama “fe” y eso es lo que sentimos millones de personas referido a Sarah Palin. Hombres y mujeres, jóvenes y mayores, estadounidenses y del resto del mundo, todos tenemos nuestras esperanzas puestas en ella. Y sabemos que no nos va a defraudar. Que Dios la bendiga.

La revolución de Palin: No se necesita teleprompter
Por Nicole Coulter, también conocida como “la demócrata rescatada” (¿es pariente de Ann Coulter, tal vez?)

Durante su campaña de 2006 a la gobernación de Alaska, Sarah Palin aprovechó el alboroto público en torno al caro avión de Frank Murkowski comprado por el Estado que se había convertido en el emblema del despilfarro y el abuso de los políticos de los good-old-boys. Ella dijo que el gobernador no lo necesitaba. Y tan pronto como fue elegida, lo vendió.

En el período previo a 2012, Palin tal vez ha encontrado un objeto similar de desprecio público a usar en su beneficio si acaba postulándose a la presidencia: el muy ridiculizado teleprompter.

En lo que tendría que ser un duro golpe para los fabricantes de teleprompters de todas partes, la antigua gobernadora y ahora autora de best-sellers habló a una gran audiencia en Hollister (Missouri) la semana pasada equipada sólo con unas pocas notas y sus convicciones.

Con 5.000 simpatizantes en una cancha de baloncesto pendientes de hasta su más mínimo suspiro, Palin pronunció un conmovedor discurso de una hora de duración acerca del patriotismo y el servicio público que le valió múltiples ovaciones de pie. Hizo una graciosa pausa en cada interrupción, luego continuó su discurso a su manera de fuego graneado sin perder el ritmo. Al expresar su mensaje de sentido común conservador, ella comenzó compartiendo su creencia de que todos hemos sido creados con un propósito y que hay que «mantener los ojos abiertos para las señales» que nos guiarán a la misión de nuestra vida. Citó a Martin Luther King, Jr., diciendo: «Descubre para lo que te hicieron» y luego contó su propia vocación de servicio público con el gobierno local, que ella llama un campo de entrenamiento ideal para los líderes nacionales. Ella alentó a otros a servir a nivel local, incluso si no parece atractivo. Confesó ser una «empollona” en el fondo a la hora de estudiar minuciosamente sobre los presupuestos y tomar decisiones en los mejores intereses del público. «En la política local, sus representados son sus vecinos. Se les ve en la tienda de comestibles. Por ello, el gobierno local es el más sensible».

Sus comentarios fluían naturalmente a partir de un guión asimilado. Pronunció todo el discurso y la su poderosa conclusión con la pasión y el carisma de un líder natural. Fue un discurso muy apropiado para los tiempos que corren y aún así, perfectamente atemporal.

Y no se necesitó teleprompter.

Fue una Sarah literalmente desenchufada.

A Palin, siempre la maestra del simbolismo político, no le cabe duda de que el electorado está deseando un retorno a las virtudes simples y el liderazgo responsable. Están clamando por la autenticidad y la esencia más que el estilo artificial. Su capacidad para estar de pie y pronunciar un inspirador discurso de una hora de largo sin la muleta de un teleprompter no sólo la distingue de su rival natural, el feliz-teleprompter presidente Obama, sino que refuerza su mensaje clave: Podemos prosperar por nuestros propios méritos. Somos personas libres.

«Los pioneros hicieron una nación de un desierto», dijo Palin. «Somos una nación construida por individuos robustos».

Miles de estos «individuos robustos» se volvieron en una gélida noche para ser testigos de una mujer fuerte, luchando por nada menos que por el alma de una nación, una nación que dice está experimentando una crisis de identidad y una «falta de confianza» porque muchos de sus ciudadanos han olvidado de las virtudes que hicieron a su país grande. Es casi como si todos hubiéramos llegado a depender de algún tipo de muleta adictiva, cara, y Sarah Palin nos estuviera diciendo que no la necesitamos.

«Podemos prosperar por nuestros propios méritos y ayudar voluntariamente a nuestros vecinos», dijo. «En la gran historia de nuestro país, nunca hemos creído que el gobierno tuviera que cuidar de nosotros».

En tiempos normales, esta declaración podría haber sido simplemente un hecho. En una era de rescates y planes de estímulo de billones de dólares, las ideas de Palin, como su rechazo del teleprompter, son revolucionarios. Ella cree que el trabajo duro, el ahorro, la responsabilidad personal, la buena vecindad – y el optimismo de los pioneros – nos sacarán de nuestra crisis nacional – no dádivas gubernamentales financiadas por una deuda pública cada vez mayor.

Era oportuno que Palin hablara en el campus de la Universidad de las Ozarks, un lugar donde la enseñanza es gratuita para la mayoría de los estudiantes, pero es necesario que todos trabajen. Los estudiantes de esta universidad cristiana se gradúan sin deudas y con un profundo aprecio por el valor de la equidad del sudor y el honor del servicio público. La misión de la universidad cuadra con la propia experiencia académica de Palin, que recorrió su camino a través de la universidad durante cinco años sin la ayuda de sus padres o de préstamos de la universidad. Ella dice que ni siquiera pensó en pedir a sus padres dinero dado que había cuatro niños Heath yendo a la universidad en rápida sucesión.

«En 22 años desde que me gradué en la Universidad de Idaho, nunca se me ocurrió que mi experiencia en la universidad fuera algo de lo que avergonzarme», dice Palin. «Quería graduarme libre de deudas.» En la campaña a la vicepresidencia, sin embargo, los críticos snobs criticaron a Palin por tardar cinco años en obtener una licenciatura. «Así es cómo la gente solía pasar por la universidad», dijo Palin, expresando su incredulidad por la crítica.

Antes de las declaraciones de Palin el miércoles, la Universidad de las Ozarks había honrado a varios héroes poco probables que se habían distinguido en el servicio en el ejército y la filantropía. Muchos llegaron de la oscuridad, pero se abrieron camino a la fama. Sarah Palin ayudó a entregar los trofeos de un bronce de águila a dos generales retirados y otros miembros de la Generación Más Grande – una generación marcada por su voluntad de sacrificio y trabajo para salir adelante.

Palin es, en efecto, un contraste con la actual administración. Pero no es un contraste forzado, sino más bien algo natural. Alaska es la última frontera, después de todo. Palin señaló en su libro que Wasilla es conocida como la capital de la cinta adhesiva del mundo. La gente es del tipo de las que se lo arreglan todo ellos y tienen que hacerlo porque viven “en circunstancias menos que ideales”. Son ahorrativos.

Sarah Palin encarna esa frugalidad de Alaska. Lo dejó perfectamente claro en su discurso: de todas las cosas que odia, la primera es perder el tiempo o el dinero. «El tiempo es nuestro recurso más precioso», dijo. «Como miembro del concejo municipal y alcalde no me gustaba perder el tiempo en cosas no importantes en las reuniones porque me estaba perdiendo una noche con mis niños pequeños. Trabajé duro para conseguir que las cosas se hicieran y no perder el tiempo». Llamó la cuadruplicación del déficit “robo generacional”. Dijo que la deuda nacional pesada estaba minando la confianza del sector privado y que constituía un «lastre para la economía».

Sobre su Día de la Independencia-dimisión, ella lo proyectó en términos de su frugalidad natural y aversión a la pérdida de tiempo: «Mi equipo se ha convertido en un objetivo simplemente debido a quién era el líder del equipo. Yo tenía una opción. Siendo una persona pragmática, me pregunté hasta qué punto era inteligente seguir adelante”. Como servidor público, dijo, no había más remedio que dimitir después de haber orado mucho y a pesar de amar su trabajo. «Un político se aferra al poder. El servidor público pone a la gente primero. Un servidor público reconoce cuando el público está sufriendo».

Palin expresó su fe en su nueva estrategia fuera de la caja independientemente de las consecuencias políticas: «Demasiados políticos sólo consideran su próximo movimiento en su carrera sin preocuparse por la forma en que esta decisión perjudica al público».

En primer lugar, Palin dijo a su audiencia que su intervención versaría acerca de tomar decisiones en «circunstancias menos que ideales.» En el caso de Palin, las circunstancias-menos-que-ideales podrían haber incluido la pérdida de poder para todo lo que le importa. Ella está desenchufada. En realidad, la vida no es nunca ideal. Y tal vez por eso un teleprompter sólo puede corporeizar la insatisfacción de los estadounidenses con Washington, DC, ahora mismo. Sentimos que en demasiados casos estamos siendo demasiado pulidos, políticos prefabricados sin la profundidad subyacente a una personalidad. Estamos recibiendo las bien leídas líneas sin el deseo o la auténtica convicción. Y nos estamos volviendo líderes adictos al poder, no al servicio público.

Como Sara expuso a la multitud presente la noche del miércoles pasado, y el público aplaudió conforme, no hay paneles de vidrio oscuro entre ella y la gente. No había pantallas o técnicos a sus lados para pasarle las líneas del discurso. Sarah se mantenía real. Y ése parecía ser el mensaje exacto que deseaba transmitir.

Como ya les he dicho, un artículo de lo más interesante. Les dejo con una imagen de la página web de la universidad por si acaso tienen la suerte de poder enviar a sus hijos a estudiar a Estados Unidos. Por favor, nada de una universidad la Ivy League a menos que quieran que regresen completamente idiotas a casa. Mándenlos a la Hard Work U (haga clic aquí para consultar su página web). Nunca se arrepentirán y ellos se lo agradecerán toda la vida.

¡Maldita sea! Como un día tenga un hijo y me diga que quiere estudiar en Harvard, lo deslomo. Palabra de honor. Sólo me faltaría tener un hijo progre. A la vejez, viruelas.


SARAH PALIN EN WISCONSIN: UNA CRÓNICA

12/11/2009

 

Confieso mi fracaso. A pesar de mis esfuerzos no he conseguido hallar una transcripción del discurso de Sarah ante los amigos del Wisconsin Right to Life de este viernes pasado. Es una lástima. Contaba con que Sarah lo publicara en su página de Facebook, toda vez que los organizadores del acto prohibieron la presencia de la prensa (lo cual es muy lógico y hasta saludable dado el talante de que hacen gala los antes “señores de la prensa”), así como la introducción en la sala de conferencias de cualquier tipo de aparato de grabación particular, ya fueran cámaras de fotos, de vídeo o hasta un teléfono móvil. En consecuencia, no tenemos ninguna imagen del acto y ni siquiera una transcripción de sus palabras, pero lo que sí que tenemos es la crónica de una de las asistentes, K. Carpenter, una de las bloguistas de ese sensacional blog colectivo que es Conservatives4Palin. Ella sí que asistió y tomó buena nota de cuanto se dijo en él con la intención de hacernos un resumen después. Y aquí lo tenemos. Amparándome en su benevolencia, me he tomado la libertad de traducirlo para que todos mis lectores tengan un idea siquiera sucinta de cómo transcurrió el acto.

Palin Wisconsin

Una foto de Sarah durante la anterior campaña electoral, merendando durante una visita a un centro escolar. Rodeada de críos, como se ha pasado la mayor parte de su vida adulta (porque tener cinco hijos es realmente vivir rodeada de críos). No se pierdan las inenarrables corbata y camisa del niño del fondo. ¡Ay, estas madres estadounidenses que cuando quieren poner guapos a sus hijos los visten que parecen un cromo!

La gobernadora Palin en Wisconsin: “¡No dejen que nadie les diga que se sienten y se callen!”. Por K. Carpenter (ver el artículo original aquí)

En primer lugar, permítanme que empiece con el aspecto que tenía la gobernadora Palin esa noche. Todos nosotros sabemos que es una mujer hermosa, pero eso no permite hacerse una idea cabal de cuál era su aspecto. Estaba increíblemente hermosa esa noche. Tal vez más que cualquier otro día que la haya podido ver en persona.

Llevaba puesto un traje de dos piezas de color rosa. En realidad, no era rosa sino fucsia, casi rojo. Muy bronceada y lejos de estar tan delgada como lo estaba inmediatamente después de su dimisión. Para mí, aquello era un poco demasiado delgada.

La gobernadora llevaba el pelo suelto con los lados hacia atrás. Su pelo ha crecido bastante durante el último año. Se le veía fantástico.

En lo que respecta al número de seguidores, había probablemente alrededor de 5.000 personas allí. El discurso duró entre 35 ó 40 minutos.

Más importante aún, su sonrisa había vuelto a ella y era más grande y más brillante que cualquier otra que le haya visto en mucho tiempo. Para mí, la parte más llamativa de su aspecto eran sus ojos. Brillan de nuevo y su mirada revoloteaba alrededor de la sala. Se le veía saludable, feliz y llena de vida.

A medida que se acercaba al micrófono cuando los gritos de júbilo comenzaron a menguar, el primer pensamiento de la gobernadora fue para las Fuerzas Armadas de Estados Unidos. Después de pedir a todos nuestros militares activos y veteranos que se levantaran, pidió un minuto de silencio. Nos dijo que durante el minuto de silencio rezaría una oración y nos invitó a todos a hacer lo mismo. Después del minuto de silencio por los soldados que actualmente prestan servicio en Fort Hood, inmediatamente dio las gracias a nuestros militares por su servicio y estalló una tanda de fuertes aplausos y gritos de júbilo para nuestros militares.

La gobernadora habló luego brevemente sobre su apego al estado de Wisconsin. Creo que dijo que uno de sus abuelos nació en Chippewa Falls y que su padre fue a la escuela con Jerry Kramer (una estrella del fútbol del equipo de los Packer durante los primeros años 60).

La gobernadora Palin comenzó entonces a contar la historia de una conversación que ella y una de sus amistades de Alaska tuvieron hace un par de semanas. Esa amistad había adquirido un par de esas relativamente nuevas monedas de oro de 1 dólar. Hablaron acerca de lo que faltaba en la cara de las monedas. Esas cuatro pequeñas palabras que han empujado a Estados Unidos durante sus momentos más angustiosos: “In God We Trust» [“En Dios confiamos»]. Como pudo ver, esas cuatro pequeñas palabras habían sido relegadas al borde de la moneda. Ya no estaban expuestas preeminentemente en la cara de la moneda, sino que habían sido ocultadas en el borde exterior de la moneda. Como observó, eso es una cosa como que nosotros, como nación, hemos relegado a Dios de nuestras propias vidas. Incluso reconoció que ella había hecho algo de eso con su propia postura a favor del movimiento pro-vida. Sí, ella siempre fue pro-vida pero no fue realmente algo que ella exhibiera de manera bien visible hasta que quedó embarazada de Trig.

¡Oh, chicos! Cuando habla de Trig, toda su persona se ilumina. Ustedes pueden decir que esa mujer está completamente enamorada de ese pequeño niño. La gobernadora Palin admitió que tenía miedo antes de que Trig naciera acerca de cómo se las iba a poder arreglar con un niño con necesidades especiales. También mencionó que ella y Todd decidieron hacer frente juntos a todos los problemas.

La gobernadora también habló brevemente acerca de Bristol y las opciones que tenía y el amor y la alegría que Tripp ha traído a sus vidas. Claramente, la gobernadora Palin está muy orgullosa de su hija y su nieto, que ya tiene casi un año de edad. La gobernadora Palin declaró que la gente comete errores, pero un hermoso niño vino al mundo como resultado de ese error. Un error no es razón para quitar una vida.

Hubo montones de referencias religiosas que hubieran causado graves espasmos nerviosos a los progres. Fue más bien refrescante ver a alguien hablar de sus creencias religiosas en un acto político. Incluso leyó Juan 16:13 a la multitud: «Cuando venga él, el Espíritu de la verdad, os guiará hasta la verdad completa; pues no hablará por su cuenta…»

A mis compañeros pro-vida, este pasaje tiene sentido para todos nosotros. El discurso de la gobernadora fue tan apasionado y tan lleno de amor por todos los hijos de Dios. Tal y como declaró a muchos les gusta llamarnos «anti-libertad” o “anti-aborto», pero la verdad es que estamos «a favor de los niños».

Algo más para hacer torcer el gesto a los jefes liberales, ella pasó entonces al proyecto de reforma del cuidado de la salud. Se preguntó por qué los legisladores no se toman el tiempo necesario para leer el proyecto de ley. La gobernadora Palin también habló de la necesidad de que la speaker Pelosi permitiera una enmienda que vedara el que los contribuyentes estadounidenses tuvieran que sufragar los abortos.

Esta línea de razonamiento nos condujo a mi frase favorita de entre todas las que la gobernadora dijo esa noche: el aborto no es cuidado de la salud.

Personalmente, esa es mi frase favorita. Esas palabras son tan verdaderas. Un bebé no es algo sencillo como una verruga que uno puede simplemente eliminar; es una vida y la vida no debería ser tratada como cualquier otro tema de salud. (La analogía con la verruga es completamente mía, no de la gobernadora. Aunque bien podría haberlo sido).

La gobernadora Palin habló largo y tendido sobre el Papa Juan Pablo II. El Papa Juan Pablo II tenía una verdadera pasión por la vida. Wisconsin es pero que muy católica y la multitud enloquecía cada vez que ella citaba alguna de las apasionadas palabras pronunciadas por el Papa sobre la cuestión de la vida.

La gobernadora incluso habló de los «paneles» de burócratas tomando decisiones sobre el cuidado de la salud de los ancianos. La gobernadora también prometió que el racionamiento del cuidado de la salud se aproxima si ese proyecto de ley es aprobado en su forma actual. Se podía ver como brillaban sus ojos mientras hablaba de los «paneles de burócratas.» Fue divertido de ver.

La gobernadora también habló sobre el verdadero “cambio en el que podemos creer» cuando se refirió a los avances hechos por el movimiento pro-vida de Wisconsin. A principios de la noche habíamos visto algunos gráficos que mostraban que las tasas de aborto en Wisconsin habían descendido en más del 50% durante los últimos quince años.

El discurso fue simplemente fantástico y adecuado para el movimiento pro-vida. El discurso estaba bien estructurado y fue fácil de seguir. Se recorrió todo el lapso de vida, comenzando en la matriz de la madre y llegando hasta el momento de luchar por la vida de nuestros ancianos y de aquellos que no pueden cuidar de sí mismos.

Éste fue probablemente el más apasionado y sincero discurso que he visto pronunciar a la gobernadora. Hizo hincapié en que debemos seguir luchando por la vida. Vale la pena luchar por todas las vidas; desde antes de nacer y siguiendo todo el camino hasta llegar a nuestros ancianos.

La gobernadora Palin nos dejó con estas palabras: «¡No dejen que nadie les diga que se sienten y se callen!».

No se preocupe, gobernadora, yo no soy del tipo de las que se sientan y se callan.

Buenas noticias para todos los fans de Sarah Palin… La gobernadora está descansada, tiene muy buen aspecto, está llena de energía y con ganas de gastarla. Su gira va a ser muy divertida. Estoy ansiosa por verla de nuevo en una firma de libros.

PS: Decidí respetar las reglas y dejar mi teléfono celular en el coche antes de que comenzara el acto. Wisconsin Right to Life nos había pedido que no lo lleváramos encima así como tampoco ningún aparato fotográfico o de video. Sentí que sería una falta de respeto a estos chicos el llevar mi teléfono celular para poder escribir en Twitter y bloguear durante el acto. Lo siento.

Una muy buena crónica de una afortunada asistente al acto. No es lo mismo que leer la transcripción de su discurso, pero al menos a mí me deja satisfecho. Y sus comentarios acerca del aspecto de Sarah son muy de agradecer. Todos estamos muy interesados por saber qué tal se encuentra después de estos últimos meses en que su actividad pública va incrementándose a marchas forzadas. Y parece que está mejor que nunca. Eso nos tranquiliza porque en verdad que va a necesitar hacer acopio de fuerzas si quiere lograr soldar la brecha abierta entre un Partido Republicano desquiciado y un movimiento conservador que cada vez más se está volviendo un movimiento anti-establishment (y eso incluye a los dos grandes partidos, cuyas diferencias entre ellos cada vez son más tenues). Y ahora viene su gira por todo Estados Unidos. Pero eso no nos preocupa porque todos sabemos que a ella lo que la vigoriza es el contacto directo con la gente corriente. ¿Hacemos una apuesta? ¿En qué punto de su gira tendrá Sarah una recepción más multitudinaria? Apuesto por Fort Bragg. Les toca a ustedes. ¿El premio para el ganador? ¿Sirve una foto mía dedicada?

Y mañana otra nota, si es que esta mujer no para.


EL MOVIMIENTO TEA PARTY: MAIN STREET SE ECHA A LA CALLE EN BUSCA DE… ¿SARAH PALIN? (y III)

22/10/2009

 

¿Y Sarah Palin qué?

La relación de Sarah Palin con el movimiento Tea Party no es una relación oficialmente establecida por más que Sarah haya expresado en diversas ocasiones su simpatía y su comprensión de los motivos que lo animan. Pero es que el movimiento Tea Party es un movimiento muy peculiar; tanto que los propios participantes en las protestas no sienten que formen parte de uno (de hecho, estoy seguro de que, junto a una mayoría de conservadores, hay muchos votantes demócratas e independientes entre ellos). Y el propio movimiento es algo que escapa a las etiquetas porque no son una opción política, sino la expresión de un malestar por el rumbo que desde hace algunos años está tomando el gobierno federal hacia un mayor intervencionismo en todos los aspectos de la vida de sus ciudadanos y que no les complace en absoluto. Así que, de imaginarse que son un mustang en busca de un vaquero que lo dome y le ponga su hierro, nada de nada.

Tea Party protest 3

Una participante en una Tea Party protest en Nashville (Tennessee) exhibe una pancarta diciendo: “Recuerda: discrepar es patriótico”. Un lema muy adecuado para lo que es el espíritu del movimiento. Las ovejas, al corral; ellos son estadounidenses, es decir, los ciudadanos más libres del mundo.

Ya hemos visto antes que algunos de los coordinadores del movimiento Tea Party  (y seguro que muchos de sus partidarios) tienen reproches que hacer tanto a los demócratas ahora en el poder como a los republicanos que lo ocuparon durante los últimos ocho años. También hemos visto lo poco simpático que les cae un personaje como Michael Steele, el chairman del GOP, que prácticamente fue declarado persona non grata cuando se ofreció a echar una parrafada durante la “Marcha sobre Washington”. Sin embargo, todos tienen claro que no es simplemente a base de protestas y marchas como van a conseguir cambiar las cosas, sino que su actuación en la calle tiene que tener una vertiente política para llegar a fructificar. Pero cuando uno ya no se fía de ningún político porque todos parecen (y lo peor es que lo son) iguales, ¿en quién se fija? Pues en aquellos políticos que siempre han sido vistos con recelo por parte del establishment y hasta repudiados por él porque no han logrado dominarlos nunca. ¿Y quién es el político más odiado (y con razón, añadiría yo) por el establishment de ambos partidos en Estados Unidos? No hay ninguna duda: Sarah Palin.

Durante la reciente gira del Tea Party Express (recordemos, el convoy de autocares que recorrió parte de Estados Unidos haciendo un llamamiento a todos para que se unieran a la “Marcha sobre Washington” del 12 de septiembre), los organizadores hicieron un esfuerzo para que Sarah Palin se uniera a la gira o al menos estuviera presente durante su última parada en Washington, DC. No pudo ser, sin embargo. Como dijo Joe Wierzbicki, uno de los responsables del Tea Party Express:

We’ve been in touch with her people, letting her know the response that we’ve gotten. She’s very suportive of the movement.

Nos hemos puesto en contacto con su gente, haciéndole saber todo el apoyo que hemos recogido. Ella apoya sinceramente el movimiento.

Es cierto que algunos políticos conservadores, tales como Newt Gingrich, se han mostrado firmes partidarios del movimiento Tea Party, pero hasta ahora nadie ha logrado hacerse todavía con la cabecera. Sin embargo, puestos a escoger alguno, no hay duda de que Sarah Palin es la gran favorita aunque la mayoría está de acuerdo en que “todavía tiene que ganarse el puesto”.  El mismo Wierzbicki continúa diciendo:

Right now there’s a handful of people who strike a chord with the tea party base, and she is certainly one of those people. Whether or not she emerges as one of those leaders, that’s between her and the American people.

Ahora mismo hay un puñado de personas que pueden tocar la fibra sensible de la base del movimiento Tea Party y ella es ciertamente una de esas personas. Si finalmente emerge o no como una de esos líderes, eso es algo entre ella y los estadounidenses.

De hecho, en las Tea Party protests no es nada extraño el oír a la multitud corear: “¡Sa-rah, Sa-rah, Sa-rah!” o llevar puestas camisetas en las que se lee: “Draft Sarah Palin 2012” (Nomina a Sarah Palin en 2012). Es un estado de ánimo, pero en absoluto una opinión mayoritaria todavía. Así, Sal Russo, otro organizador del Tea Party Express, señala:

She could be the kind of person that becomes the leader of the Tea Party movement, but she hasn’t done anything yet to assume that role.

Ella podría ser la clase de persona que acabe convirtiéndose en la líder del movimiento Tea Party, pero todavía no ha hecho nada para asumir ese rol.

No es que sea algo urgente que el movimiento nombre de forma más o menos oficial a un dirigente, pero sí que es una cosa que muchos de sus participantes empiezan a pensar que es necesario si no quieren acabar viendo frustradas sus expectativas. Así, Tom y Susan Mendez, dos activos participantes del movimiento, opinan que corren el riesgo de que su mensaje no llegue nunca a los políticos de Washington:

This movement needs direction. They’re not getting the message from us, so they need to get the message from someone. Maybe Sarah Palin.

Este movimiento necesita un dirigente. Ellos [los políticos] no están captando el mensaje de nosotros, así que necesitarán captarlo de otra persona. Tal vez de Sarah Palin.

¿Está dispuesta Sarah Palin a ayudar a todas esas personas a llevar su mensaje a Washington? Tal vez Sarah les haya respondido ya a través de lo que fue la última parte del discurso pronunciado en Hong Kong el pasado 23 de septiembre, apenas 11 días después de la “Marcha sobre Washington”. Entonces fue esto lo que dijo sobre ellos:

When members of America’s greatest generation – the World War II generation – lose their homes and their life savings because their retirement funds were wiped after the financial collapse, people feel a great anger. There is suddenly a growing sentiment to just «throw the bums out» of Washington, D.C. – and by bums they mean the Republicans and the Democrats. Americans are suffering from pay cuts and job losses, and they want to know why their elected leaders are not tightening their belts. It’s not lost on people that Congress voted to exempt themselves from the health care plan they are thrusting on the rest of the nation. There is a growing sense of frustration on Main Street. But even in the midst of crisis and despair, we see signs of hope.

In fact, it’s a sea change in America, I believe. Recently, there have been protests by ordinary Americans who marched on Washington to demand their government stop spending away their future. Large numbers of ordinary, middle-class Democrats, Republicans, and Independents from all over the country marching on Washington?! You know something’s up!

These are the same people who flocked to the town halls this summer to face their elected officials who were home on hiatus from that distant capital and were now confronted with the people they represent. Big town hall meetings – video clips circulating coverage – people watching, feeling not so alone anymore.

The town halls and the Tea Party movement are both part of a growing grassroots consciousness among ordinary Americans who’ve decided that if they want real change, they must take the lead and not wait to be led. Real change – and, you know, you don’t need a title to do it.

The Tea Party Movement is aptly named to remind people of the American Revolution – of colonial patriots who shook off the yoke of a distant government and declared their freedom from indifferent – elitist – rulers who limited their progress and showed them no respect. Today, Main Street Americans see Washington in similar terms.

When my country again achieves financial stability and economic growth – when we roar back to life as we shall do – it will be thanks in large part to the hard work and common sense of these ordinary Americans who are demanding that government spend less and tax less and allow the private sector to grow and prosper.

We’re not interested in government fixes; we’re interested in freedom! Freedom! Our vision is forward looking. People may be frustrated now, but we’re very hopeful too.

And, after all, why shouldn’t we be? We’re Americans. We’re always hopeful.

Thank you for letting me share some of that hope, and a view from Main Street with you. God Bless You.

(Cuando los miembros de la generación más grande de Estados Unidos – la generación de la Segunda Guerra Mundial – pierden sus casas y los ahorros de toda su vida debido a que sus fondos de jubilación fueron eliminados tras el colapso financiero, la gente siente una gran ira. Hay un sentimiento creciente de repente de «echar a los vagos a patadas» de Washington, DC – y por vagos quieren decir republicanos y demócratas. Los estadounidenses sufren recortes salariales y pérdidas de empleos, y quieren saber por qué sus líderes electos no están apretando el cinturón. No ha pasado desapercibido a la gente que el Congreso votó a favor de eximirse del plan de salud que están forzando al  resto de la nación. Hay un sentimiento creciente de frustración en el ciudadano corriente. Pero incluso en medio de la crisis y la desesperación, vemos signos de esperanza.

De hecho, es un cambio radical en Estados Unidos, creo. Recientemente, ha habido protestas por parte de los estadounidenses comunes y corrientes que marcharon en Washington para exigir a su gobierno que deje de hipotecar su futuro. ¿Un gran número de personas corrientes, de clase media, demócratas, republicanos e independientes de todo el país marchando sobre Washington!  ¡Uno entonces sabe que está pasando algo!

Estas son las mismas personas que acudieron a los ayuntamientos este verano para hacer frente a sus funcionarios elegidos que estaban en sus casas descansando lejos de la capital y tuvieron que enfrentarse a la gente que representan. Reuniones en la sala del ayuntamiento – clips de video que circularon cubriéndolo todo – con gente vigilantes, sintiéndose que ya no volverían a estar solos nunca más.

Los ayuntamientos y el movimiento Tea Party son parte de una creciente toma de conciencia entre los estadounidenses comunes y corrientes que ha decidido que si quieren un verdadero cambio, deben tomar la iniciativa y no esperar a ser conducidos a él. El cambio real – y, ustedes lo saben, uno no necesita de un título para hacerlo.

El movimiento Tea Party se bautizo muy apropiadamente para recordar a la gente de la revolución norteamericana – de los patriotas coloniales que se sacudieron el yugo de un gobierno lejano y declaró su libertad de la indiferente – elitista – clase gobernante que limitaba su progreso y no les mostró ningún respeto. Hoy en día, los estadounidenses corrientes ven Washington en términos similares.

Cuando mi país alcance de nuevo  la estabilidad financiera y el crecimiento económico – cuando volvamos a la vida como vamos a hacer – será en gran parte gracias a la ardua labor y el sentido común de los estadounidenses comunes y corrientes que exigen que el gobierno gaste menos y recaude menos impuestos y permita al sector privado crecer y prosperar.

No estamos interesados en los apaños del gobierno, ¡estamos interesados en la libertad! ¡Libertad! Nuestra visión es hacia el futuro. Las personas pueden sentirse frustradas ahora, pero también muy esperanzadas.

Y, después de todo, ¿por qué no deberíamos? Somos americanos. Siempre tenemos esperanza.

Gracias por dejarme compartir parte de esa esperanza y la visión de una estadounidense corriente con ustedes. Que Dios les bendiga.)

Que cada uno saque sus propias conclusiones, pero yo, por mi parte, si fuera un teapartier (si es que se puede decir así) sentiría que puedo confiar en Sarah Palin para que mi voz no quede ahogada por las habituales toses y carrasperas que afectan de repente a los politicastros (de ambos partidos, ¿eh?) de Washington cada vez que alguien les obliga a oír algo que no les gusta lo más mínimo.


EL PARTIDO REPUBLICANO EN LA ENCRUCIJADA (I)

13/10/2009

 

Después de un par de semanas marcadas por la resaca del discurso de Sarah Palin en Hong Kong y el anuncio de la próxima aparición en las librerías de su autobiografía, además de la publicación de un nuevo par de notas suyas en Facebook, una sobre la guerra en Afganistán y la errónea manera en que el gobierno de Estados Unidos la está enfocando (ver aquí) y otra sobre el tema de la independencia energética y un posible descarte del dólar por parte de los países productores de petróleo como moneda común para fijar su precio (ver aquí), no tengo la menor duda de que la situación para ella ha dado un giro a su favor. Hong Kong ha supuesto un punto de inflexión y a partir de ahora resulta muy difícil ya para cualquiera pretender sostener con un mínimo de seriedad la opinión de que es tonta.

 

La reacción de Sarah Palin al enterarse de que al presidente de Estados Unidos acababan de concederle el Premio Nobel de la Paz. Imposible contenerse. Si resulta tan increíble que hasta el propio galardonado ha reconocido que no se lo merece. Ante semejante arranque de sinceridad, esperamos ansiosos leer la noticia de que reconoce también que no se merece el puesto que ocupa y dimite ipso facto, pero no creemos que llegue a tanto. Un poco de falsa modestia, bueno… pero un rasgo tal de honradez, ¡jamás! Como ya dije en mi otro blog en Semanario Atlántico (ver aquí), a ese tipo lo harán santo antes que a Juan Pablo II.

Y mientras el presidente de Estados Unidos  se prepara para recoger su inmerecido premio y así de paso tener la excusa para emprender una nueva gira por esa Europa ahíta y decadente que tanto ama como buen snob que es, Sarah Palin sigue haciendo de hormiga hacendosa, al revés que la cigarra laureada del presidente, y construyendo paso a paso lo que serán los cimientos que algún día, confiemos que del año 2012, soportarán el edificio de su candidatura presidencial.

Fue en mi penúltima entrada, la última que dediqué al tema del discurso de Sarah en Hong Kong, donde expliqué lo que en mi opinión suponía el susodicho discurso: la “muerte” por estrangulamiento de la falsa Sarah Palin, ésa que tan bien caricaturizó Tina Fey y que fue publicitada a bombo y platillos por casi todos los medios de comunicación durante la pasada campaña electoral. Después de su discurso, nadie con dos dedos de frente puede seguir sosteniendo que Sarah Palin no está capacitada intelectualmente para ocupar el puesto de presidente de Estados Unidos; otra cosa es que le falte alcanzar aún el necesario dominio de los detalles de algunos temas en concreto, pero eso, una vez demostrada su capacidad, no es más que cuestión de tiempo. No es que yo albergara la más mínima duda al respecto, pero siempre había quien pretendía que si bien tal vez no fuera todo lo tonta que dicen los medios de comunicación, tampoco existía ninguna prueba fehaciente de lo contrario. Pues bien, a estas alturas, poco más de dos meses después de su dimisión como gobernadora de Alaska, ya tenemos esas pruebas. Y superan sobradamente todas las expectativas. No es sólo que con su seguimiento de la actualidad política de su país plasmado en sus notas de Facebook haya suficiente evidencia de que se trata de una mujer inteligente y perspicaz, sino que el discurso de Hong Kong, por la amplitud de temas tratados en él y la audiencia a la que se dirigía, un millar de los hombres de negocios mejor informados sobre economía y política del mundo, bien puede ser considerado como un examen final de curso aprobado con una A alta. Y la lectura de su autobiografía dentro de poco más de un mes nos revelará muchas más cosas sobre ella. Especialmente, confío en que nos aclare muchas de las cosas extrañas que sucedieron durante la pasada campaña electoral y sirva también para poner a más de un antiguo asesor de campaña de McCain en su sitio (que no puede ser otro que en el cubo de la basura con los desperdicios más apestosos como pueden ser, por ejemplo, los periódicos tradicionales y la guía de televisión).

De entre todos los temas que trató en su discurso, me gustaría llamar la atención sobre tres párrafos en concreto en los que Sarah se refería a su postura política general, a su modo de ver la política, definiéndose a sí misma como una “common-sense conservative”, una definición tan plena de referencias chestertonianas que no pudo dejar de producirme un enorme placer cuando la leí. En concreto, los tres párrafos a los que me refiero son los siguientes:

You can call me a common-sense conservative. My approach to the issues facing my country and the world, issues that we’ll discuss today, are rooted in this common-sense conservatism… Common sense conservatism deals with the reality of the world as it is. Complicated and beautiful, tragic and hopeful, we believe in the rights and the responsibilities and the inherent dignity of the individual.

We don’t believe that human nature is perfectible; we’re suspicious of government efforts to fix problems because often what it’s trying to fix is human nature, and that is impossible. It is what it is. But that doesn’t mean that we’re resigned to, well, any negative destiny. Not at all. I believe in striving for the ideal, but in realistic confines of human nature…

The opposite of a common-sense conservative is a liberalism that holds that there is no human problem that government can’t fix if only the right people are put in charge. Unfortunately, history and common sense are not on its side. We don’t trust utopian promises; we deal with human nature as it is.

(Ustedes pueden llamarme una conservadora con sentido común. Mi aproximación a los problemas a que se enfrentan mi país y el mundo, temas que vamos a discutir hoy, tienen sus raíces en este conservadurismo con sentido común (…) El conservadurismo con sentido común brega con la realidad del mundo tal y como es. Complicado y hermoso, trágico y lleno de esperanza, creemos en los derechos y las responsabilidades y la dignidad inherente de la persona.

No creemos que la naturaleza humana sea perfectible; sospechamos de los esfuerzos del gobierno para arreglar los problemas porque a menudo lo que está tratando de arreglar es la naturaleza humana y eso es imposible. Es lo que hay. Pero eso no quiere decir que estamos resignados a, bueno, un destino negativo. En absoluto. Creo en la lucha por los ideales, pero dentro de los límites reales de la naturaleza humana…

Lo contrario de un conservador con sentido común es un liberalismo que sostiene que no hay ningún problema humano que el gobierno no puede arreglar sólo con poner a las personas adecuadas a cargo de él. Lamentablemente, la historia y el sentido común no están de su lado. No confiamos en las promesas utópicas; nosotros bregamos con la naturaleza humana tal y como es.)

Un conservadora con sentido común… Parece una buena definición. Entre otras cosas porque ni siquiera parece una definición; al menos, no al estilo de “neocons” (a los que nunca he llegado a apreciar mucho porque me parecían tipos imbuidos del típico fanatismo de los conversos y que podían hacer más mal que bien, aparte de que exhibían una fuerte tendencia al intervencionismo estatal en todos los aspectos de la vida que me repelía) o de “compassionate conservatives” (que siempre he detestado porque parece implicar que, hasta entonces, los conservadores eran unos crueles desalmados sin el más mínimo rastro de compasión), por citar las dos definiciones más populares (o impopulares, mejor dicho) últimamente.

Para mí, un conservador es un conservador y no hay más que decir porque tampoco es necesario. Desde que Abraham Lincoln fundara el Partido Republicano en 1854 y lo dotará de un ideario basado en el respeto por la libertad individual, la responsabilidad personal y la economía de libre mercado, además de su rechazo frontal del esclavismo (que el Partido Demócrata defendía a uñas y dientes, recordemos), todo el mundo ha tenido claro en Estados Unidos qué implicaba ser conservador durante los últimos ciento cincuenta años. Y de hecho, el sentido común se le daba por supuesto. Sólo la deriva ideológica de estos dos últimos decenios en que la izquierda ha ido ganando posiciones a base de demagogia a granel, ha podido resquebrajar la hasta entonces sólida alianza forjada por Ronald Reagan y que dominó de tal modo el panorama político de Estados Unidos que aún hoy en día la mayoría de los estadounidenses se definen a sí mismos como conservadores. Y ello a pesar de toda la parafernalia mediática del actual presidente de Estados Unidos que pretende que Estados Unidos abomina del conservadurismo cuando de lo único que abomina es del charlatanerismo como empieza a demostrarse poco a poco, ahora que la actual administración tiene que demostrar con hechos concretos lo que hasta entonces no eran más que bonitas palabras. De momento, el plan de reforma de la Sanidad ya no es más que un montón de palabras que no es que se las ha llevado el viento precisamente, sino que ha sido Sarah Palin a golpes de Facebook.

El sentido común es un excelente sentido que  debería ser reconocido como el sexto y desarrollado en todas las personas a través de la buena educación de los jóvenes y el mejor ejemplo dado por sus mayores, y aplicado a la política con preferencia a cualquier ideología. Porque las ideologías, cualquier ideología, no deja de ser un vano intento de adaptar el mundo a una idea y no las ideas al mundo. Por eso, Sarah reconoce que el mundo es como es y no como quisiéramos que fuera y que la gente también es como es y pretender que sea de otra manera es algo cuya imposibilidad ya se demostró con la caída de los regímenes comunistas de casi todo el mundo (faltan China, Corea del Norte y Cuba, que todavía tiran para desgracia de sus ciudadanos). Y es que, tal y como reconoció en su momento un dirigente de la fenecida URSS, el comunismo fracasó sencillamente porque no se avenía con la naturaleza humana. Y es que ésa y no otra es la clave de cualquier actuación política exitosa: no pretender lo que no puede ser. O como decía aquél: “Lo que no puede ser no puede ser y además es imposible”. Si Sarah Palin tiene asumida esta gran verdad, sólo con ello ya tiene muchas posibilidades de que un futuro gobierno suyo sea fructífero porque sabrá dar respuesta a las necesidades de sus compatriotas sin perder de vista la realidad y no se embarcará en actuaciones imposibles de justificar más que en la mente desquiciada de tantas sabihondos ansiosos de modelar un mundo a su imagen y semejanza, es decir, perfectamente deforme.

Al fin y al cabo, ¿qué otra cosa pedimos a nuestros dirigentes sino que gobiernen la nave del Estado con sensatez? Nadie quiere otra cosa. Y si alguien la quiere, tal vez sea uno de esos que deben ser mantenidos a toda costa lejos del timón para evitar que se regodeen en el naufragio del barco, aun si eso implica su propio ahogamiento.

Así pues, creo que la definición lanzada por Sarah al ruedo político, “un conservadurismo con sentido común”, está llamada a tener éxito. Y lo más curioso de ella es que no sólo le sirve para despegarse de aquellos izquierdistas que la han tildado repetidamente de extremista de derechas sino también de su propio partido, el Republicano, tan confuso y desorientado aún a día de hoy y con el que cada vez parece tener menos relación. Algo que no deja de ser sorprendente si tenemos en cuenta que actualmente Sarah es su mejor activo. Ya sabemos que Sarah no es plato del gusto de la actual dirección del GOP, algo que viene de los tiempos de Sarah en Alaska cuando se enfrentó al GOP de su estado y lo venció. Sarah es una pesadilla para el establishment, cualquier establishment. Y como que ya sabe de qué va la historia porque ya la ha vivido una vez, parece que ha optado por ser una republicana de a pie en lo que se refiere a la organización del partido, limitándose a tener el carnet y estar al corriente de pago de las cuotas, pero manteniéndose aparte de la dirección del partido y casi creando el suyo propio. Entonces, ¿está Sarah pensando en lanzar una candidatura independiente en 2012? ¿O al menos está esperando a que las elecciones de noviembre del año que viene pongan a una mayoría de “palinistas” en el poder para lanzar su ofensiva sobre el partido y lograr su control para que la respalde sinceramente y sin temor a una traición? ¿O más sencillamente, acaso Sarah se ha desentendido por completo del partido y actúa por su cuenta sin importarle lo que puedan pensar los capitostes del mismo? En mi opinión, esta última respuesta es la que tiene más visos de ser real. ¿Los motivos? Se los contaré en mi próxima entrada.