Ya casi estamos en noviembre, ¿eh? (revisado)

30/09/2010

 

Por motivos laborales, trato habitualmente con extranjeros y como quiera que yo soy así, me divierto mucho sorprendiendo a los pocos estadounidenses que me vienen con mi razonable conocimiento sobre su país. Como a una joven neoyorquina nacida en Minnesota que ha venido recientemente a trabajar a España como programadora informática y de la cual, tras averiguar que sus padres todavía viven en Minnesota, en la bonita población de Saint Cloud, le pregunté si iban a votar por Michele Bachmann, puesto que ésa era la candidata republicana al Congreso que les correspondía por circunscripción electoral. La pobre casi se desmaya. Y luego no hubo manera de convencerla de que no soy un estadounidense expatriado, ni siquiera alegando mi mal inglés que ella pensaba que era fingido.

¡Sí, vamos a ganar! Y 2010 es sólo el principio. ¡Ya veréis en 2012! Palabra de Palin.

Reconozco que la historia anterior no deja de ser una de esas casualidades que te da la vida y que sólo suceden una vez porque resulta que Michele Bachman es una de mis políticas estadounidenses favoritas y he leído bastante sobre ella. Así pues, estoy familiarizado con los datos correspondientes, por ejemplo, a su circunscripción electoral y me suenan la mayoría de localidades que engloba. Si la joven ésa llega a haber nacido en Oklahoma, no hubiera podido quedar ni la mitad de bien, por supuesto. Y mi gozo en un pozo entonces.

El caso es que ha concluido por fin la larga temporada de primarias en los Estados Unidos y, aunque con un poco de retraso, me gustaría repasar lo que ha dado ésta de sí. Por supuesto, declarar que sólo ha habido una vencedora por parte republicana; una vencedora que, para más inri, no se presentaba a ninguna de ellas: Sarah Palin. Su influencia a la hora de respaldar a los candidatos que ha estimado más oportunos ha sido esencial para el triunfo final de muchos de estos. Nombres como los de Carly Fiorina (California), Nikki Haley (South Carolina), Joe Miller (Alaska) y Christine O’Donnell (Delaware) son los de las sorpresas más morrocotudas producidas durante estos largos nueve meses de campaña electoral y ninguno de estos cuatro que aquí he destacado ha dejado de reconocer que sin su apoyo explícito, ellos no serían nada.

Y por lo que se refiere precisamente a ese apoyo, lo más curioso es que aquí ha habido tortas para ambos lados de lo que ahora es el Partido Republicano, un partido con el alma dividida realmente. Por una parte, algunos candidatos han vencido gracias al respaldo de Sarah Palin… ¡y en contra de la opinión del movimiento Tea Party que patrocinaba a otro candidato! (el caso más evidente: Carly Fiorina contra Chuck DeVore en California) mientras que, por la otra, algunos candidatos han vencido gracias al respaldo de Sarah Palin… ¡y en contra del establishment republicano que patrocinaba a uno de los suyos! (el caso más evidente –y divertido–: Joe Miller contra Lisa Murkowski en Alaska). ¡Toma castaña! Si a alguien le quedaba alguna duda acerca de que Sarah Palin es Sarah Palin y sólo se pertenece a sí misma y nadie, absolutamente nadie, puede pretender apropiarse de ella, aquí tiene dos ejemplos que bien podrían ser varios más.

Todos apreciamos mucho al movimiento Tea Party y yo, en especial, he aprovechado mi escasa capacidad de hacer llegar mi opinión a los demás para respaldar a sus integrantes con todo mi corazón, pero eso no quiere decir que sean infalibles, que su palabra sea irrefutable y que sus candidatos sean los más altos, los más listos y los más guapos (o los más conservadores). En el caso concreto de California, una vez que me puse a ello me di cuenta de que los motivos esgrimidos por Sarah Palin para apoyar a Fiorina en lugar de a DeVore eran sólidos y convincentes. Además, ciertamente no creo que fuera DeVore el candidato más idóneo en mi modesta opinión para desbancar a una avezada senadora demócrata como lo es Barbara Boxer. Ya será bastante difícil para Fiorina, pero es que DeVore estoy seguro de que no lo hubiera logrado de ninguna manera (y hasta puede que hubiera perdido las primarias frente a Tom Campbell). A DeVore me gustaría apoyarle en 2012 contra Dianne Feinstein, pero ahora mismo no sé si lo haré puesto que me ha quedado un cierto regusto amargo durante estas primarias. Y es que no basta con ser el más conservador de entre los conservadores; también conviene ser el más listo y DeVore ha demostrado que no lo es.

En fin, que no es éste el momento de entrar a discutir lo que puede pasar en 2012. Sí que lo es en cambio para repasar la lista de candidatos apoyados a lo largo de todo este tiempo por Sarah Palin y comprobar qué ha sido de ellos. Dicho y hecho, la lista es ésta:

En total, se trata de 43 candidatos apoyados expresamente por Sarah Palin, la mayoría de ellos a través de su página en Facebook (aunque también se ha dado el caso de Rand Paul, que anunció él mismo el haber recibido el apoyo de Palin). De estos 43 candidatos, 23 son mujeres y 20 hombres (lo que no tiene la más mínima importancia digo yo) y de ellos, 33 han logrado alzarse con el triunfo y ser los nominados del Partido Republicano (muchos de ellos a regañadientes porque los del establishment no los querían ver ni en pintura… ¡Que se chinchen pues!) para las elecciones de este próximo noviembre mientras que 10 han sido derrotados. Sí, sólo 10; de 43, sólo 10. Si esto no hace de Sarah Palin el mejor respaldo con el que puede contar un candidato que venga Dios y lo vea. Para que luego salga el chulo de Mitt Romney a decir que los respaldos de Palin son bonitos («nice» dijo)pero no tienen ninguna influencia… ¡Será idiota el tipo ese!

Sin embargo, no son estos 43 los únicos apoyos que ha concedido Sarah Palin porque hay otros 20 más por ahí. Sí, sí, ¡20 más! Y ahora mismo les diré de dónde han salido estos. ¿Recuerdan ustedes cuando hace unos meses, seis concretamente, se aprobó finalmente la malhadada reforma de la sanidad en los Estados Unidos? ¿Sí? Seguro que sí. Pues fue entonces cuando Sarah Palin hizo pública una nota en Facebook (¡viva Facebook!) detallando el nombre y la circunscripción electoral de veinte congresistas demócratas que habían votado a favor de la reforma cuando en su circunscripción la mayoría de sus votantes estaban claramente en contra de ella. Eran circunscripciones donde McCain y ella habían ganado durante las pasadas elecciones presidenciales y que estaba claro que no se sentían nada inclinadas hacia el hope, el change y el Yes, we can (conseguir que nos crezca el pelo de nuevo) de Obama y su troupe de charlatanes.

En concreto, Sarah Palin publicó entonces el siguiente mapa:

Por cierto, que su publicación supuso que los demócratas pusieran el grito en el cielo alegando que Sarah Palin había puesto dianas para representar a sus adversarios políticos y que con ello estaba haciendo apología de la violencia y que si patatín, que si patatán y que tal y que cual y que tratándose de alguien que tiene armas en casa y que sabe cómo utilizarlas… En fin, recuerdo que por aquel entonces hasta yo me ocupé del tema y aclaré que el símbolo utilizado por Sarah Palin en su mapa no es una diana sino un símbolo internacionalmente reconocido dentro del ámbito de la topografía para señalar un emplazamiento con toda precisión. Y ya está. Además, puestos a recordar dianas y personajes públicos amenazados con ella, ¿quieren estos demócratas que les saque mi particular galería de los horrores y empecemos a contar fotos de Sarah Palin enmarcada por una diana de verdad? No, verdad. Ya me lo imaginaba.

Como pueden ver en el mapa de arriba, tres de esos tipejos ya se han retirado de la carrera electoral por el motivo que sea: Vic Snyder (Arkansas), Brad Ellsworth (Indiana) y Bart Gordon (Tennessee). Sin embargo, sus sucesores siguen arrastrando el pecado original de sus antecesores: esas circunscripciones tienen que ser republicanas de nuevo. Además, quedan otros diecisiete a los que dar más palos que a una estera para que aprendan así a no jugar con la salud de los demás (y nunca mejor dicho).

¿Y quiénes son los candidatos republicanos que les van a dar esa somanta que tanto se merecen? Pues son los siguientes que les voy a relacionar. Sarah Palin ha publicado recientemente una página web dedicada en exclusiva a este tema y es de ella de donde he sacado cada uno de los perfiles biográficos que les ofrezco. La dirección es http://www.takebackthe20.com/. Lógicamente no podía ser otra y éste es su mensaje de bienvenida:

20 representantes demócratas de circunscripciones en las que ganamos en 2008 votaron a favor del proyecto de ley de reforma de la sanidad

Han pasado seis meses desde que el presidente Obama firmó el proyecto de ley de reforma de la Sanidad y lo convirtió en ley. A pesar del abrumador disgusto público hacia Obamacare, nos dijeron que Washington sabe lo que es mejor y que no había nada por lo que preocuparse. Nancy Pelosi dijo que el Congreso tenía que aprobar el proyecto para que los estadounidenses pudieran “descubrir lo que contiene”. Lo descubrimos y es aún peor de lo que nos temíamos.

Únanse a mí en parar los pies a aquellos que estuvieron con Obama y Pelosi y votaron a favor de este desastroso proyecto. Los demócratas de 20 distritos en los que ganamos en 2008 votaron a favor de Obamacare. Ahora podemos votar en contra de ellos.

Vamos a reemplazarlos con buenos conservadores que votarán por rechazar y reemplazar Obamacare por una reforma centrada en el paciente, orientada hacia los resultados y de libre mercado que proporcione soluciones a gente de todos los niveles de ingresos sin arruinar a nuestro país.

Reclamemos el poder del pueblo de aquellos que desdeñan la voluntad del pueblo.

No os desmoralicéis, organizaros. Es el momento de tomar partido.

Éste es el mensaje de presentación de Sarah Palin. Corto, claro y contundente, como debe ser. Y estos son los veinte candidatos que van a batir (Dios lo quiera) a esos felones relacionados más arriba. ¡Ah, qué coraje me da el no poder votar siquiera a uno de ellos!

 Tim Griffin es un reservista del Ejército de los Estados Unidos con 14 años de servicio, incluyendo una campaña en Irak. Tim sabe acerca del sacrificio y del honor. ¡Vamos a enviar a este candidato con sentido común al Congreso!

Paul comparte nuestra creencia en que el despreocupado gasto del gobierno federal nos está poniendo en una senda peligroso hacia la insolvencia – y está decidido a hacer algo sobre eso. Además de ser un orgulloso padre de familia, Paul es dentista y como propietario de un pequeño negocio como lo es su consulta, Paul comprende los desafíos a los que se enfrentan los creadores de puestos detrabajo cuando D.C. los machaca con órdenes sin fin, sobrerregulación, planes para imponer nuevos impuestos sobre la energía y simplemente (e innecesariamente) se entromete en el sector privado. El buen doctor sabe que la verdadera creación de puestos de trabajo viene del sector privado, no del gobierno y trabajará para contener el largo brazo del gobierno y poner nuestra economía en marcha otra vez  manteniendo al gobierno fuera del camino.

Cuando lo eligieron tesorero del condado de Maricopa, los votantes confiaron su dinero a David Schweikert, que invirtió y supervisó sin perder ni un centavo. David mejoró el servicio al público y trabajó para asegurarse de que los «arizonianos» sabían a dónde iban a parar los dólares de sus impuestos. Éste es el tipo de liderazgo que necesitamos en D.C. Enviemos a David al Congreso.

Jesse Kelly es un condecorado veterano de la Guerra de Irak que volvió a casa y decidió continuar con su servicio a nuestro país presentándose para un cargo público. Jesse se mostrará firme contra la transformación fundamental de los Estados Unidos que estamos viendo en las políticas que vienen de Washington. Luchará por sus votantes tan honorablemente como luchó por todos nosotros vistiendo el uniforme.

Como líder de un pequeño negocio, Scott Tipton sabe cómo las garras del gobierno estrangulan  a los pequeños negocios. Vamos a enviar a este líder con sentido común a Washington para cortarle las garras y dejar a los pequeños negocios progresar y crecer en libertad.

Cory Gardner ha sido un líder con sentido común en la legislatura de Colorado luchando por un gobierno más pequeño y menos regulaciones. Es la quinta generación de “coloradenses” y no le asusta el ensuciarse las manos todavía en la granja familiar. Cory ha estado luchado por sus votantes en Colorado; ayudémosle a llevar su lucha a Washington.

La página web de Steve lo dice mejor: “Con Steve Southerland, lo que ve es lo que obtiene. Él no es alguno de esos políticos fugaces intentando ocupar un cargo público montado en una ola de inteligentes frases y cuidadosamente medidas intervenciones públicas. Él es simplemente un duro trabajador de Panama City que cree que el vecindario del norte y del noroeste de Florida merece más por parte de nuestros líderes en Washington. Ése es el motivo por el cual se presenta al Congreso de los Estados Unidos. Ayudémosle a llegar a Washington.

Como veterana de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos y diecisiete años de experiencia en la oficina del Sheriff del condado de Orange, Sandy Adams tiene el arrojo y la experiencia para tomar las decisiones duras en Washington. Ha servido a sus votantes bien y luchado por ellos en la legislatura de Florida. Enviémosla a Washington para que continúe su lucha.

El doctor Larry Bucshon creció como el hijo de un minero del carbón, se alistó en la reserva de la Armada y se presenta por la 8ª circunscripción electoral de Indiana. ¿Quién mejor que un doctor hecho a sí mismo y con éxito del corazón de los Estados Unidos para diagnosticar los problemas de Obamacare y trabajar para la verdadera reforma sanitaria? Enviemos a este doctor con sentido común al Congreso.

Todd Young es la quinta generación hoosier con un historial de servicio a nuestro país. Todd es un graduado de la Academia Naval de los Estados Unidos y un veterano de los Marines. El servicio de Todd continúa como fiscal local. Enviémosle a Washington.

Como veterano de la legislatura de North Dakota, Rick Berg ha ido ascendiendo a través de las filas hasta llegar a ser el speaker. Ahora está llevando su experiencia a Washington. Como esposo de una doctora, la familia de Rick conoce de primera mano los peligros de Obamacare. Enviemos a Rick al Congreso.

Bill creció en una granja familiar donde aprendió “los valores del trabajo duro, la honradez y el sacrificio” – valores que necesitamos en nuestros líderes. Bill se retiró de las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos como teniente coronel después de una distinguida carrera de 26 años. Pero no estaba listo para la jubilación todavía – continuó su liderazgo iniciando dos exitosos pequeños negocios que crearon puestos de empleo. Enviemos a Bill a Washington a luchar por nosotros.

Como antiguo profesional de la industria sanitaria, Jim Renacci conoce de primera mano los peligros de Obamacare. Jim tiene un largo historial de servicio en su ciudad de Wadsworth (Ohio), desde voluntario en el cuerpo de bomberos hasta las salas del concejo municipal e incluso en el despacho del alcalde. ¡Necesitamos más líderes locales de sentido común y probados para mostrar a Washington cómo se hacen las cosas! Enviemos a Jim al Congreso.

En el campo de juego y fuera de él, esta antigua estrella del fútbol sabe lo que cuesta ganar la lucha. Mike Kelly lleva muchos sombreros: atleta, entrenador, padre, abuelo, líder de un pequeño negocio y activista comunitario. Ayudemos a elegir a este irlandés luchador para rechazar y reemplazar Obamacare en el Congreso.

Tom Marino no se asusta del trabajo duro. Este hijo de un bombero y una portera trabajó en una fábrica durante gran parte de su juventud. A los 30, hizo el cambio – fue a la Universidad, se licenció en leyes y ascendió a través de las filas hasta llegar a ser Fiscal de los Estados Unidos. La educación en sentido común de Tom y su estricta ética del trabajo le harán una voz necesaria en el Congreso. Ayudémosle a llegar allí.

La página web de Mick Mulvaney lo resume mejor: “Mi oponente es muy rápido en señalar que el gobierno ya controla el 45% de la sanidad. Ahora tal vez veamos cuál es la fuente del problema”. Mick es un padre de trillizos e hijo de profesores que ha servido a South Carolina en el senado estatal. Enviémosle al Congreso a continuar su lucha.

Pocos entienden el problema de Obamacare mejor que los profesionales de la Sanidad. Como enfermera, Diane Black comprende por qué necesitamos una verdadera reforma de la sanidad y por qué Obamacare no lo es. Ha servido a Tennessee con distinción como senadora estatal y representante. Diana tiene la experiencia y las creencias que necesitamos en el Congreso. Enviémosla a Washington.

Robert Hurt tiene un historial de sentido común probado de mantenerse firme. Como miembro de la legislatura estatal de Virginia, ha votado contra los incrementos de impuestos más de dos docenas de veces. Los residentes en la 5ª circunscripción de Virginia conocen bien al senador Hurt y han votado a este líder de sentido común en el pasado. Vamos a mantener la tendencia y enviarle al Congreso.

Los votantes de la 1ª circunscripción de West Virginia ya están a medio camino de allí. Ellos han tenido el buen sentido de echar a su liberal del cargo. Ahora vamos a recorrer el resto de la distancia con David McKinley, un padre de cinco, abuelo de cuatro, y un hombre hecho a sí mismo. David inició una empresa, creó puestos de trabajo y sabe cómo dirigir. West Virginians for Life ha dado a David su sello de aprobación. Enviémosle al Congreso.

Después de que Spike Maynard se retirara del servicio de las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos, fue elegido por sus convecinos  “virginianos del oeste” como fiscal, juez y ahora como miembro de la más alta corte del estado. Los habitantes de West Virginia conocen a Spike y han confiado en él en el pasado para asegurarse de que la justicia es servida. Ahora vamos a enviarlo al Congreso a que continúe su servicio.

Pues estos son todos los «hombres y mujeres de Palin», si es que se puede decir así. Tomen buena nota de ellos y en noviembre, tras las elecciones, veremos cuántos de ellos se convierten finalmente en cargos electos. Ojalá que todos ellos, pero ya me conformaría yo con la mitad siquiera. Ojalá aquí en España pudiéramos contar con unos pocos así para votarles, pero eso por estos lares ya no abunda. De hecho, es una especie extinguida completamente: el político honrado.

Hasta la próxima entrada que será interesante: les hablaré sobre A pledge to America. Es una cosa del GOP. A ver qué les parece. Y sí, también tengo que hablarles de cómo va mi libro: ya tengo un 60% creo, pero aún queda mucho que hacer. Y aunque lo termine, habrá que pulirlo. Ahora mismo es una cosa muy basta. ¡Ah, por cierto! Creo que voy a dejarme de tonterías y voy a regalarlo. Así llegará a mucha más gente.


La estrella ascendente de Paul Ryan (y III)

23/09/2010

 

Hoy es posible que tengamos una nueva lectora en “Conservador en Alaska”. Se llama Marta y es amiga mía. Es una chica estupenda, pero la pobre es progre perdida, así que le he aconsejado que lea mi blog durante una temporada para empezar a sanar. A ver si hay suerte. Si antes de tres días recibo un mensaje de correo electrónico poniéndome de vuelta y media por haberla citado aquí y diciéndome de todo menos bonito es que me ha hecho caso. Lo de cambiar de opinión y dejar de considerar a Sarah Palin “una facha” y verla como en realidad es, la mejor defensora de la libertad individual que todavía nos queda a aquellos que pensamos que el ser humano ha nacido para ser libre y tomar sus propias decisiones y no para ser un mero número en el ordenador de cualquier burócrata del gobierno y hacer lo que se le dice cuando se le dice, tardará un poco más, pero cuento con que le ponga interés y acceda a tomarse la medicina cada día (que tampoco es tan amarga digo yo porque siempre procuro que mis entradas sean fáciles de leer y a veces hasta consigo hacer algún chiste bueno que otro). De cualquier forma, saluden a mi buena amiga y denle la bienvenida a nuestra pequeña gran familia: ¡Bienvenida, Marta!

Paul Ryan, el guapo y listo de Wisconsin. Se lo he recomendado especialmente a mi amiga. Sobre todo le he alabado su buen gusto a la hora de escoger sus corbatas aunque igual es su esposa quien se las escoge… Yo porque no estoy casado, pero me han dicho que es lo que suelen hacer, ¿no? ¿Y han visto qué bien hecho lleva el nudo?

Fue en enero de este año, dos días después del discurso sobre el “Estado de la Unión”, cuando el presidente Obama se “coló” en una reunión de congresistas republicanos celebrada en Baltimore (Maryland) y abrió el debate con ellos. Durante noventa minutos, Obama replicó a sus argumentos de una manera que, como no, impresionó muy favorablemente a la prensa estadounidense, tan poco dada a la objetividad como todos bien sabemos.

Sin embargo, ni siquiera los panegiristas esos de los medios de comunicación pudieron ocultar lo que sucedió cuando el representante por Wisconsin Paul Ryan se levantó e hizo su propia pregunta al presidente:

Sirvo como ranking member en el Comité del Presupuesto, así que voy a hablar un poco de presupuestos si no le importa. En los proyectos de ley que usted acaba de firmar y con ello convertir en leyes, el gasto discrecional se ha incrementado en un 84%. Ahora quiere usted congelar ese gasto a este elevado nivel empezando desde el próximo año. Esto significa que el gasto total en su presupuesto crecerá tres centésimas partes de un uno por ciento menos que si no lo congelara. Simplemente me gustaría subrayar que podríamos hacer algo más y comenzar a hacerlo ahora.

Para entender bien esta intervención debemos aclarar que en su discurso del “Estado de la Unión”, Obama se comprometió a congelar el gasto discrecional no relacionado con la seguridad como parte de su campaña para hacer creer a todos los estadounidenses que está haciendo algo para luchar contra el creciente déficit presupuestario, causado en gran parte por él y su administración. ¿Un pirómano reconvertido en bombero? ¿La zorra colocándose como guardiana de las gallinas? ¿El derrochador Obama prometiendo ahorrar? ¡Ja, a otro perro con ese hueso!

En su respuesta, Obama, además de dedicarle a Ryan una mirada de “espera a que te pille en un pasillo donde no haya nadie y verás”, replicó diciendo:

“(…) me gustaría ir un poco más lejos en la subyacente premisa acerca de que nosotros incrementamos el gasto en un 84%. La cuestión de hecho es que la mayoría de los incrementos del gasto en el presupuesto de este año, en el presupuesto del año pasado, no han sido causados por políticas que hayamos iniciado nosotros sino que se produjeron como consecuencia de los “estabilizadores automáticos” que saltaron como consecuencia de esta enorme recesión.

El término “estabilizadores automáticos” se refiere a los pagos que el gobierno federal debe asumir quiera o no, por ejemplo, el aumento de los subsidios por desempleo, que tienden a incrementarse necesariamente en tiempos de crisis. Por otra parte, en cuestiones de gasto, en Estados Unidos existe el gasto imperativo, como el de la Seguridad Social, que crece cuanto haga falta sin necesidad de ser aprobado por el Congreso, y el gasto discrecional, que debe ser aprobado por el Congreso y firmado por el presidente para convertirse en ley.

Obama se imaginaba sin duda, viendo babear a sus bufones favoritos de los medios de comunicación, que le había cerrado la boca a Ryan y, de paso, atizado a Bush 43, que es lo que más le gusta, pero lejos de recular, Ryan simplemente carraspeó para llamar la atención del auditorio y recalcó:

Simplemente quiero decir que los “estabilizadores automáticos” son un gasto imperativo. El gasto discrecional, los proyectos de ley aprobados por el Congreso y que usted firma y convierte en ley, ése es el que se ha incrementado en un 84%.

Obama se calló, miró a Ryan aún más torcido que antes y reconoció tácitamente su derrota diciendo:

Tendremos un debate más largo sobre los números del Presupuesto, ¿de acuerdo? Siguiente pregunta.

Pues sí, ése es Paul Ryan, nuestro congresista por Wisconsin y la mejor cabeza pensante del Partido Republicano en cuestión de números. Alguien que como bien decía una de nuestras amigas, le quita todo el ornamento y el perifollo a la cuestión de que se trate y presenta los hechos desnudos, algo que muchas veces lleva a la gente a darse cuenta de que es el propio emperador el que va desnudo. ¡Que sí, Obama, que estás gastando más que un marinero borracho el primer día de tocar puerto tras una travesía de seis meses! ¡Y no van a ser nuestros hijos los que paguen tu factura del bar!

En esa misma reunión en Baltimore, Obama ya se había referido a Ryan otra vez, al comienzo de su intervención, antes de que el “desagradecido” ése le fastidiara el día, señalando que era él quien había “hecho una seria propuesta” para controlar el déficit y hasta le alabó por haber hecho el esfuerzo. Sin embargo, cuando tu enemigo te alaba, ya puedes echarte a temblar y así fue porque ésa fue la señal para que los demócratas se lanzaran sobre Ryan y su plan durante los tres siguientes días. Los arietes fueron entonces Paul Orszag, el antiguo director presupuestario de Obama; Chris Van Hollen, dirigente del Partido Demócrata; y la speaker de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. Los tres, como buenos izquierdistas que son, se limitaron a acusar a Ryan de pretender dejar a los pobres sin cobertura social (ni subsidios de desempleo ni seguridad social) y de reducir los impuestos a los ricos. Pura demagógica, pero ¿qué otra cosa se puede esperar de unos bichos mentirosos semejantes? Lo importante de toda esta historia es que Ryan asusta a los demócratas y ya sabemos que cuando un republicano se gana las iras de los demócratas es porque ese republicano vale… y mucho (y si no, que se lo pregunten a Sarah Palin).

El principal motivo para que los demócratas teman a Ryan estriba en su Roadmap for America’s Future, del cual ya he hablado algo en entradas anteriores de esta serie. Hoy toca entrar en profundidad en él. ¿Qué es el Roadmap al fin y al cabo?

Con unos Estados Unidos habitados por una cantidad cada vez mayor de personas mayores, la amenaza de que el sistema de asistencia social se colapse y se convierta en ineficaz es algo que debería tomarse en serio, tal y como hace Ryan quien en su Roadmap se plantea como objetivos principales los de devolver la vitalidad a la economía estadounidense, disminuir la deuda pública y asegurar la asistencia sanitaria y las pensiones a los jubilados.

Para ello, Ryan haría lo siguiente:

  • Reformar el sistema impositivo, de tal forma que se permitiría seguir pagando impuestos bajo el sistema actual para quien así lo quisiera (locos de atar, por ejemplo), pero los demás podrían optar por un nuevo sistema consistente en un impreso de declaración de renta del tamaño de una postal corriente en la que sólo existirían dos tipos impositivos: uno del 10% para aquellos que ganasen hasta 100.000$ en el caso de una declaración conjunta o hasta 50.000$ en el caso de declaraciones individuales; y otra de un 25% para todos aquellos que ganasen más de 100.000$. No habría deducciones ni nada por el estilo salvo las correspondientes al seguro de enfermedad (que lo veremos más abajo).
  • Eliminar los impuestos sobre los intereses, sobre las plusvalías, sobre los dividendos y el de sucesiones. El impuesto de sociedades, que en los Estados Unidos es el segundo más alto del mundo, se reemplazaría por un impuesto del 8,5%, lo que haría a las empresas estadounidenses mucho más competitivas en el mercado mundial, además de permitirles crear más puestos de trabajo (¡son las empresas las que crean puestos de trabajo y no el gobierno o los sindicatos!).
  • Los programas de Medicare (para las personas mayores) se conservarían en su forma actual para sus beneficiarios y para todos aquellos por encima de los 55 años ahora mismo.
  • El acceso universal a la asistencia médica se garantizaría mediante un reembolso de sus impuestos por valor de 2.300$ por persona o 5.700$ por familia con el que los interesados comprarían su propio seguro médico en cualquier estado de los Estados Unidos (algo que actualmente no pueden hacer).
  • A medida que las personas menores de 55 años fueran llegando a esa edad (en la que entrarían dentro del programa Medicare), recibirían pagos por un valor medio de 11.000$ anuales, indexados a la inflación y vinculados a los ingresos, recibiendo más quienes tuvieran menores ingresos anuales.
  • Todos los estadounidenses, independientemente de sus ingresos, podrían abrir cuentas de ahorro “médicas” con las que financiar sus gastos médicos. En ellas, todos aquellos trabajadores menores de 55 años podrían ingresar más de un tercio de sus impuestos destinados a la Seguridad Social de una forma como si se tratara de un plan de pensiones. Estas cuentas serían patrimonio personal de su titular con lo que se garantiza a sus poseedores que siempre podrán disponer de todo el dinero que inviertan en ellas.
  • Se incrementaría la edad de jubilación, vinculándola con la expectativa de vida del momento (actualmente estaría alrededor de los 75 años), evitando así convertir la sociedad en una tal que entre una tercera parte y la mitad de todos los adultos están jubilados.

El Roadmap incluye más cosas, muchas más, pero éstas son las esenciales. En febrero pasado, la Congressional Budget Office (CBO) analizó el Roadmap y lo declaró solvente, reconociendo que proporciona reformas que harían posible el crecimiento y la prosperidad de la economía estadounidense; aseguraría que el programa Medicare no fuera a la quiebra y haría que la Seguridad Social fuera permanentemente solvente y haría eso sin recortar los beneficios para todos aquellos con 55 o más años actualmente. Equilibraría el presupuesto y recortaría el déficit público también. En definitiva, que pondría la economía estadounidense en el camino correcto en comparación con las políticas que se están siguiendo actualmente y que acabaran llevando a la ruina a los Estados Unidos.

Un gráfico elaborado por el propio CBO: el crecimiento económico en Estados Unidos mostrando tres tendencias (la histórica –en azul–, la actual obamita –en rojo–, y la del Roadmap –en verde–). ¿Cuál prefiere para sus hijos?

Otro gráfico elaborado por el propio CBO: la deuda pública mostrando de nuevo tres tendencias (la histórica –en azul–, la actual obamita –en rojo–, y la del Roadmap –en verde–). Otra vez, ¿cuál prefiere para sus hijos?

Les dejo con esto. Piensen y recapaciten, algo que no es precisamente el deporte favorito de los izquierdistas, que se limitan a leer El País para saber qué tienen que pensar. En estas tres últimas entradas hemos visto lo que muy posiblemente se convierta algún día en la política económica a seguir por la próxima administración republicana, muy posiblemente con Palin de presidente y Ryan de secretario del Tesoro. Yo, la verdad, creo que Ryan de vicepresidente sería echarlo a perder; es demasiado joven para ello y demasiado brillante. ¿Recuerdan aquel dicho de principios del siglo XIX sobre los vicepresidentes? Un padre tenía dos hijos. Uno se hizo marinero y se embarcó y el otro llegó a vicepresidente y de ninguno de los dos volvió a saberse nunca más. Pues eso. Yo simplemente les digo que estaría completamente de acuerdo con que se me aplicara el Roadmap a mi bolsillo; yo lo que quiero es que el dinero (poco dinero) que me gano con mi esfuerzo quiero que vaya a mi bolsillo y no al del Estado a pagar a una caterva de vagos sinvergüenzas que encima tienen la desfachatez de pretender que el dinero público “no es de nadie”. ¡Pues sí que es de alguien! En parte, mío. Y no estoy dispuesto a regalarlo y encima que me desprecien. ¡Faltaría más!

Y en la próxima entrada, vamos a hablar de Sarah que ya toca, ¿no?

P.D. Pues ha salido publicado un nuevo artículo mío en The Americano. Va sobre las primarias y su título es el siguiente: “La vida te da sorpresas y las primarias más”. Léalo aquí.

P.P.D. Sí, ya sé que mi artículo anterior sigue estando cortado. Me prometieron que ya estaría arreglado, pero veo que no es así. Les incluyo aquí mismo el fragmento que falta. Y no, no es censura sino mera pifia. ¿Qué le vamos a hacer?

(…) Otros podrán hacer análisis más sesudos sobre lo que sucedió allí. Incluso podrán pretender que Beck sólo buscaba más audiencia para sus programas, Palin más votos para una futura candidatura a la presidencia y los conservadores, así en general, imponer de nuevo las leyes Jim Crow, quemar algunas cruces y, de paso, derogar Roe vs. Wade. La imaginación es libre y un don demasiado valioso como para despreciarlo salvo cuando, como en el caso de la prensa europea, que sólo vio allí un acto de la “ultraderecha” y sintió escalofríos por ello, se usa solamente para decir majaderías.

La verdad, en cambio, es mucho más prosaica y la resumió perfectamente Sarah Palin al comienzo de su intervención, cuando saludó y dijo: “¿Acaso no estáis orgullosos de ser estadounidenses?”.

Sí que lo estaban. Y lo siguen estando. Y es por eso que quieren recuperar todo lo que implica ser estadounidense antes de que esos que pretender “transformar sustancialmente” su país y convertirlo en una ruina como ya lo es Europa logren su objetivo. Para empezar, quieren recuperar su libertad de tomar sus propias decisiones. Por ejemplo, la de a quién votar el próximo mes de noviembre. Y cuando voten y lo hagan en consecuencia, algunos en Europa volveremos a reírnos de nuevo leyendo en nuestros periódicos habituales: “El Congreso controlado por la ultraderecha. Estados Unidos se vuelve fascista”.

No, Europa no entiende nada. Y lo peor es que ya es demasiado tarde para pretender enseñarle. Su destino está sellado: convertirse en Eurabia. ¡Pobre vieja Europa!

P.P.P.D. Que sí, que ya sé que igual se presenta Hillary Clinton a las elecciones en 2012. ¿Que qué me parece? En principio, me parece que no va a conseguir la nominación y que Obama, aún hecho un Titanic como está hecho (sobre todo ahora que se sabe que fue un error de su timonel el causante del hundimiento), no va a dejarse vencer tan fácilmente. No, no creo que la Clinton se presente finalmente. Pero igual sí porque yo como profeta doy pena.

P.P.P.P.D. ¿Te ha gustado, Marta? A que has aprendido un montón, ¿eh?


La estrella ascendente de Paul Ryan (II)

19/09/2010

 

En la anterior entrada conocimos a Paul Ryan, el representante republicano por Wisconsin, y además de ver que es guapo (una amiga mía progre está harta de que saque “pedazos de tíos” en mi blog y que todos sean de derechas, pero así es la vida), vimos que tiene una buena cabeza. Ciertamente no se ha destacado nunca por su toma de postura en cuestiones sociales, pero teniendo en cuenta su admiración por Ayn Rand, de quien confiesa que si está metido en política es por ella, mucho me temo que si lo hiciera, sería para adoptar opiniones más bien libertarias que conservadoras, tal y como él mismo ha reconocido alguna vez.

Pues si ayer les dije que me recordaba a Reagan cuando era joven, en esta foto le veo un aire a lo Nicolás Sarkozy. En fin, que uno es dado a sacar parecidos a la gente y por lo general no acierto. Ustedes mismos.

De cualquier manera, lo que más nos interesa de él hoy es conocer sus opiniones en materia económica. Y para ello, tenemos que empezar a hablar de ese plan, el “Roadmap for America’s Future” del cual es autor.

Exactamente, el Roadmap (como lo vamos a conocer a partir de ahora para no hacernos pesados) es una propuesta legislativa que Ryan y la minoría republicana en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos presentaron en pasado 21 de mayo de 2008 para su tramitación (entonces se etiquetó como HR 6110 y se denominó oficialmente “Roadmap for America’s Future Act of 2008”) y que pretendía aportar una solución a los principales problemas económicos de la nación:

  • ­ Asegurar el acceso universal a la cobertura sanitaria.
  • Reforzar los programas Medicare (para las personas mayores), Medicaid (para las personas sin recursos económicos suficientes) y el resto de la Seguridad Social.
  • Reducir el peso de la deuda nacional.
  • Promover el crecimiento económico y la creación de empleo.

 Casi nada, ¿verdad? Pues no llegó al pleno de la cámara; los demócratas se la cargaron directamente en el comité. Pero eso no desanimó a Ryan quien, a finales de enero de 2010, presentó una nueva versión de su Roadmap, ya no como proyecto de ley, que recogía todas las variaciones que se habían producido hasta entonces en el panorama económico estadounidense.

¡Grrr, demócratas, esperad a que sea Secretario del Tesoro y veréis!, parece decir Ryan en esta foto. Por cierto, me gusta la corbata. Al fin alguien que se sale de la típica corbata lisa roja o azul. Tengo que ver si encuentro una igual.

En esencia, el Roadmap propone cambiar por completo el sistema impositivo estadounidense, corregir de una vez por todas las deficiencias del sistema sanitario y reformar todos los programas de gasto social. Y lo mejor de todo es que dichas propuestas no son meros cantos de sirena sino que han sido avaladas por un organismo tan capacitado e independiente como es la Congressional Budget Office (CBO) del Congreso de los Estados Unidos (un organismo del que Rillot nos ha hablado muchas veces pero que es la primera vez que aparece aquí), que dictaminó en su momento que la propuesta de Ryan era factible, que produciría un verdadero estímulo que redundaría en un alto índice de crecimiento económico de la nación y que provocaría que la Seguridad Social estadounidense fuera solvente por primera vez en muchas décadas, evitando su más que seguro colapso de seguir al paso que lleva. ¡Y todo ello sin necesidad de subir los impuestos o reducir los beneficios de los que disfrutan actualmente las personas acogidas a sus diferentes programas, fundamentalmente los jubilados! Y eso no lo digo yo, sino el organismo del Congreso de los Estados Unidos dedicado al análisis detallado de cualquier propuesta legislativa que se le plantee… ¿Y los demócratas no lo han querido discutir siquiera? No. Pero, ¿están locos esos demócratas? No, simplemente es que son así.

Tal y como dice el propio Ryan:

A lo largo de toda mi carrera en el Congreso he estado viendo como se deterioraba progresivamente nuestra situación económica y he notado que nadie estaba proponiendo soluciones por miedo a caer en la demagogia política. Si eso continua, tengo muy claro que caminamos como sonámbulos hacia una crisis fiscal en la que las alternativas serían peores y que podrían llevarnos más allá en el camino de convertirnos en un “estado del bienestar”.

Gracias en parte al desastre electoral de 2006, en el que los republicanos perdieron el control de ambas cámaras del Congreso, Ryan vio su papel dentro del partido potenciado hasta el punto de convertirse en el ranking member del comité de Presupuestos, lo que le permitió contar con la posibilidad de trasladar sus propuestas a la CBO para que las evaluasen. Así pues, decidió presentar una alternativa claramente conservadora a lo que estaba haciendo la actual administración con el fin de evitar la catástrofe a la que los Estados Unidos están abocados si continúan las cosas como hasta ahora:

En 2008, cuando presenté esto [el Roadmap], creía que teníamos diez años por delante antes de que fuera demasiado tarde para retroceder y poder mantener así lo que yo llamo la idea de gobierno limitado americano basado en la libertad, la libre empresa y una sociedad de emprendedores. Ahora, creo que tenemos la mitad de ese plazo a causa de la crisis económica en la que nos encontramos y a causa también de la agenda que Washington está desarrollando ahora mismo.

El Roadmap, pues, es más que una mera propuesta económica, ya que incluye en su texto una amplia muestra de sabiduría política que nos remite hasta Thomas Jefferson, John Locke o Émile Durkheim. Su idea central consiste en la asunción de que la expansión del estado del bienestar al estilo europeo en los Estados Unidos sería algo tan perjudicial que provocaría el desarraigamiento de lo que el Roadmap denomina orgullosamente “el carácter americano”, basado en la libertad y la responsabilidad personal.

Así pues, Ryan establece como primer punto que todos los problemas a los que se enfrentan los Estados Unidos hoy en día están interrelacionados y no se puede pretender abordarlos por separado: si alguien quiere acabar con la creciente deuda nacional, tendrá que hacerlo poniendo orden en Medicare; a la vez, si alguien quiere poner orden en Medicare, no lo podrá hacer si no reforma de una vez por todas y bien el sistema sanitario; y para reformar el sistema sanitario, hay que reformar también el sistema fiscal; y si se reforma el sistema fiscal, tendremos las bases puestas para espolear el crecimiento económico, lo cual nos permitirá contar con los ingresos suficientes como para pagar la creciente deuda nacional y conseguir que deje de ser eso: creciente.

Para cualquiera sin la cabeza de Ryan, la mera idea de tocar una sola de todas estas piezas del rompecabezas  que es la economía estadounidense sin causar un desastre mayor, produce vértigo. Sin embargo, Ryan logra que parezca hasta fácil. Y lo que es mejor, que lo entienda hasta un inepto en cuestiones económicas como yo. Pero aún así, su objetivo es muy ambicioso, tal y como reconoció Ramesh Ponnuru en National Review Online:

El representante Ryan es la imagen especular de la agenda de Obama. Intenta mover a los Estados Unidos dentro del libre mercado antes que en una dirección socialdemócrata y yo apoyo este objetivo; pero es tan transformativo, tan ambicioso, tan inmodesto. No creo que el público, o el sistema político, puedan soportar este tipo de cambio tan profundo.

Por supuesto, Ryan es optimista (a la fuerza ahorcan, digo yo) y cree que el Congreso tiene la capacidad de aprobar una propuesta de reforma tan audaz como lo es el Rodmap:

Yo creo que la respuesta es sí, si ganas el debate. Pero tienes que entrar en el debate para poder ganarlo.

Incluso ha previsto que su plan sea ejecutado en partes, lo que no supondría que fuera impracticable, sino meramente un poco más de tiempo y, eso sí, la necesidad de tomar prestado más dinero a corto plazo, que es lo que está incrementando la deuda nacional. El plan está diseñado para ser flexible  e incluso para aceptar alternativas válidas a sus propuestas.

No es un plan de tómalo o déjalo. No es ésa su intención. Es una visión, lo que en mi opinión necesitan los Estados Unidos al tiempo que mantienen sus promesas a las generaciones actuales que han construido sus vidas alrededor de estos programas.

La principal intención de la revisión del Roadmap que ha llevado a cabo este año, en realidad, es la de provocar un debate público entre los votantes acerca de la crisis nacional. El principal problema para llevar a cabo una reforma de este tipo es que a quien más asusta es a los mayores que, en general, son todos ellos votantes activos, mientras que los jóvenes, que tendrían que estar aún más interesados en ese debate porque afecta a su futuro, sencillamente no piensan en el momento de su jubilación y suelen votar mucho menos. Ryan es consciente de ello y por eso intenta que dicho debate llegue sobre todo a los más jóvenes, los que más tienen que perder, usando para ello herramientas como Facebook o Twitter, que más de uno ya nos ha demostrado la potencia que pueden tener.

Para Ryan, si los Estados Unidos siguen sin abordar los cambios necesarios, los jóvenes estadounidenses se encontraran con un país en el que “su mejor siglo habrá sido el anterior y no el presente. Ése es el camino que llevamos ahora mismo. Cuanto antes podamos ayudar a los estadounidenses a ver eso, antes podremos abordar el tipo de cambios que necesitamos para prevenirlo”.

Lo malo es que no es sólo contra los demócratas con quienes tiene que luchar, sino también contra sus propios compañeros de partido, asustados por la oposición encontrada en el bando demócrata (lógica por otra parte) y tan demagógica como siempre, pretendiendo que Ryan sencillamente quiere dejar a todos los jubilados sin seguro médico. Falso, pero efectivo porque en un año como éste, electoral y con buenas perspectivas para los republicanos, ¿quién va a querer meterse en un fregado como el de explicar a los votantes que ellos no van a suprimir en absoluto Medicare, pero sí que van a reformarlo para que sus nietos puedan disfrutar de él cuando les llegue el turno cuando los demócratas en el rally de enfrente están asegurando a voz en cuello que sí que lo van a suprimir y que sólo ellos les pueden garantizar esos beneficios por los que han estado trabajando durante toda su vida?

Una difícil elección porque si los republicanos quieren merecer alguna confianza como el partido que va a poner en práctica lo del gobierno limitado esta vez sí y no va a ser de nuevo el partido de más gobierno todavía, ésa es una propuesta que tienen que poner encima de la mesa y pelear por ella a cara de perro si hace falta antes de que esa catastrófica crisis final a la que Ryan le ha dado un plazo de cinco años se les eche encima y entonces ya no haya nada que reformar.

Y no son meras pesadillas después de haber cenado fuerte. El caso de Grecia ha hecho saltar todas las alarmas y España, que a punto estuvo en mayo pasado de seguir el mismo camino, las volvió  a hacer sonar. Grecia cayó con una deuda nacional del 113,4% del Producto Interior Bruto (PIB), un porcentaje que le impidió obtener dinero en los mercados internacionales ante la imposibilidad de que los inversores se creyeran que lo iba a devolver (cuando uno gana 20.000 € al año y debe 22.500 €, a ver quién es el guapo que le presta mil euros más). Según datos de la CBO, Estados Unidos superará ese porcentaje en 2026, llegando al 223% en 2040, 433% en 2060 y 716% en 2080, en que sencillamente el país estará en ruinas (cuando uno gana 40.000$ al año y debe 300.000$ lo suyo ya es de juzgado de guardia, ¿no?).

John Cochrane, catedrático de Finanzas en la Universidad de Chicago, declaró al respecto de la creciente deuda nacional estadounidense:

Uno no llega a ese punto. Mucho antes de alcanzar un porcentaje de varios cientos del PIB, los mercados internacionales dicen: “No, no lo vamos a hacer, no te vamos a prestar más” y entonces uno tiene una enorme crisis entre manos. Testigo: Grecia.

Para Cochrane, los inversores internacionales suelen fijarse un plazo de treinta años cuando compran bonos del Tesoro de los Estados Unidos. Actualmente, estos inversores todavía confían en la capacidad de los Estados Unidos para hacer frente a sus obligaciones y creen también que el país encontrará la manera de superar sus dificultades, pero existe el riesgo de que la crisis estalle abruptamente si, por cualquier motivo, por ejemplo, China, una de sus mayores acreedores, pierde esa confianza en la capacidad de los Estados Unidos para salir de la crisis. No existe un límite concreto, un porcentaje que esos mismos inversores se marquen como el máximo asumible, sino que depende de muchas cosas. Por ejemplo, en 1945, ese porcentaje era del 121,7% y no pasó nada porque todos sabían que estaba causado por la guerra y que la guerra era algo temporal que terminaría pronto y los Estados Unidos volverían a la senda correcta y pagarían sus deudas.

Es cierto que los Estados Unidos aún pueden recurrir a la máquina de imprimir billetes, a diferencia de Grecia, pero aunque eso aliviaría el problema del pago de la deuda, provocaría a su vez una inflación tan descomunal que sería peor el remedio que la enfermedad. Y a efectos prácticos, el resultado sería el mismo: la bancarrota.

En su opinión, sólo existe una manera de evitar ese problema y es “convencer a los mercados de que tienes un plan y vas a corregir el problema tarde o temprano”. Ahora mismo, el único plan sensato (los de Obama no cuentan; no lo son) que hay sobre la mesa es el de Ryan. Tal vez el año que viene, con un Congreso republicano, sea el momento de que lo vuelvan a tomar en consideración. Ojalá.

 Por mi parte, en la próxima entrada les detallaré de una vez por todas en qué consiste el dichoso Roadmap. Tendremos gráficos y números, muchos números. Parecerá una mala copia de una entrada de Rillot, ya lo verán. Y a lo mejor hasta logramos entender algo. Dios lo quiera.

P.D. Ésta es mi entrada número 200. ¡Qué ilusión! A trancas y barrancas, pero sigo aquí. Y con más ánimos que nunca. Tengo que hablarles un día sobre el libro, que va avanzando, pero antes tengo que explicarles lo que opino sobre lo que han supuesto las primarias estadounidenses y terminar con el Roadmap. ¡Uf, esta semana va a ser muy intensa!

P.P.D. Es cierto que hubo un error a la hora de publicar mi colaboración en The Americano. Al artículo le faltan las últimas diez líneas. Cosas de los duendes de imprenta (o de algún demócrata infiltrado). Ya he avisado y se está en trance de corregirlo. Gracias por el aviso, amigos.


La estrella ascendente de Paul Ryan (I)

18/09/2010

 

¿Quién es Paul Ryan? ¿No lo conocen? Seguramente no y no se preocupen porque es normal. De hecho, yo mismo, y a pesar de disfrutar de una cierta buena información sobre lo que se cuece en los mentideros políticos estadounidenses, tuvo que ser a raíz de una conversación mantenida esta semana pasada con Alberto Acereda, el comentarista político a quien todos conocemos, quien llamó mi atención sobre él (¡gracias, Alberto!), que caí en la cuenta de él. Es cierto que ya sabía de quién se trataba y hasta tenía alguna referencia sobre su persona, sobre todo un comentario elogioso realizado hace tiempo por Sarah Palin, pero ha sido ahora que me he documentado sobre él que he apreciado lo muy conveniente que será para todos nosotros, buenos conservadores, que sigamos con atención su carrera. Ryan, como otros jóvenes valores del GOP, tales como Marco Rubio en Florida, Sean Duffy en Wisconsin o Joe Miller en Alaska, tiene un brillante futuro ante él y en cuanto les ponga en antecedentes, verán cómo están de acuerdo conmigo.

¡Señoras y señores, les presento a Paul Ryan, de Wisconsin! ¿A que se parece algo a Reagan en sus años mozos?

Paul Ryan se llama en realidad Paul Davis Ryan, Jr. y nació el 29 de enero de 1970 en Janesville (Wisconsin) que es donde ha vivido siempre y donde sigue haciéndolo ahora. Tiene por tanto 40 años, casi 41, y desde hace doce es el representante republicano por la primera circunscripción electoral de Wisconsin en la Cámara de Representantes del Congreso de los Estados Unidos. Su primer mandato en ese cargo fue en 1998, cuando ganó las elecciones a su rival demócrata, una tal Lydia Spottswood, por una diferencia porcentual de 14 puntos (57%-43%). Luego, ha ido encadenando victoria tras victoria desde esa fecha (les recuerdo que en el caso de la Cámara de Representantes, las elecciones se celebran cada dos años), siempre con porcentajes de voto superiores al 60%, habiendo acabado por aburrir a su eterno rival demócrata, un tal Jeffrey Thomas, quien tras perder por cuarta vez consecutiva, desistió y decidió que eso de la política no es lo suyo, cediendo el testigo a otra audaz demócrata, una tal Marge Krupp, quien perdió igualmente en 2008 y sin mejorar nada los resultados de su antecesor: 35%-64%. Para las próximas elecciones de noviembre, los demócratas han cambiado de candidato y ahora es un tal John Heckenlively, de quien se sospechan tendencias autodestructivas (je, je, je), quien se arriesga a ser una nueva muesca en la culata del revólver de Ryan.

Entre los paisanos de Ryan que más nos pueden sonar destaca Sean Duffy, uno de los candidatos respaldados expresamente por Sarah Palin durante estas pasadas primarias, quien se presenta también como candidato a la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, aunque él lo hace por la séptima circunscripción electoral, que está en la otra punta del estado. También, pero ya como mera anécdota, tiene como paisano a Sunny Munroe, que es una a quien todos aquellos de mis lectores que tengan hijos o nietos en edad de ver a todas horas el canal Disney sabrán de sobras quién es. Más seriamente, les puedo decir también que Ryan estudió en la Miami University en Oxford (Ohio), donde se licenció en Económicas y Ciencias Políticas en 1992. Está casado con Janna Ryan y tiene tres hijos: Liza de 8 años, Charlie de 6 y Sam de 5. ¡Ah, y le gusta la caza! En concreto, la del ciervo (se llevará estupendamente con Sarah, ¿a que sí?).

Otra nueva foto de Paul Ryan. Por cierto, es católico. Sí, ya sé que eso no tiene importancia, pero a mí me hace ilusión. Un día les redactaré una lista de políticos estadounidenses católicos y verán qué cosas… Para empezar, Joe Biden lo es también. A su manera, me imagino porque si no, no se entiende.

La carrera política de Ryan comenzó pronto, nada más terminar sus estudios. En 1992, entró a trabajar como ayudante del senador por Wisconsin Bob Kasten, pasando en 1995 a hacerlo para el senador por Kansas Sam Brownback. También ha trabajado como redactor de discursos para William Bennett mientras éste era el responsable máximo de la lucha contra las drogas (“drug czar” que lo llaman allí) y para Jack Kemp, cuando éste se presentó como candidato a la vicepresidencia junto a Bob Dole en 1996. En 1998, Ryan decidió que ya sabía lo suficiente como para volar solo y se presentó a sus primeras elecciones, ganándolas fácilmente y renovando su escaño una y otra vez hasta ahora en que se ha convertido en una de las voces más influyentes del movimiento conservador dentro del GOP.

Tengo opiniones firmes, ideas firmes. Pero no estoy buscando el convertirme en algún famoso líder del movimiento conservador. Simplemente no contemplo eso como mi rol. No es lo mío. Yo quiero ser un líder a la hora de definir políticas.

El nombre de Ryan empezó a sonar seriamente el año pasado, en 2009, cuando hasta el The Wall Street Journal y el The New York Times se tomaron la molestia de dedicarle sus editoriales hasta por tres veces, además de contar con más de veinte citas en las cadenas de noticias por cable y, maravilla de las maravillas, que el propio Dick Cheney le mencionara (y no una sino dos veces) como uno de los líderes emergentes del partido. Con esos antecedentes, no es de extrañar que fuera el orador principal en la Conservative Political Action Conference (CPAC) de este año, 2010, en Washington, D.C.

¿Y cuál es el motivo de esa popularidad? ¿Qué ha hecho? ¿Lo han pillado saliendo con Angelina Jolie, tal vez? No, por supuesto que no. Ryan es serio. El principal motivo por el que su nombre ha saltado de esa manera a los medios de comunicación tiene que ver con haber sido el autor de la respuesta republicana al presupuesto de los Estados Unidos presentado por la administración Obama, dando a su partido, el Republicano, la posibilidad de presentar una alternativa creíble que redujera los impuestos a los ciudadanos y el gasto desmesurado del gobierno federal en contraposición al pozo sin fondo que era la propuesta demócrata finalmente aprobada y, con ello, cerrando la boca a todos esos que no hacen más que repetir que los republicanos no tienen ideas. Además, Ryan es el autor también del llamado Roadmap for America’s Future (Hoja de ruta para el futuro de Estados Unidos), un plan económico del que les hablaré con detalle en mi siguiente entrada, pero del que les avanzo que contempla cómo hacer frente a los desafíos que supone para Estados Unidos el creciente déficit presupuestario y la reducción del crecimiento económico y de la creación de empleo.

Ryan tiene muchas virtudes, pero sobre todo destaca por una: tiene una buena cabeza para los números. Lo que le ha convertido en el principal ariete de su partido en cuestiones económicas, un aspecto en el que el Partido Republicano nunca ha demostrado demasiada suficiencia que digamos. Conservador fiscal sin complejos, Ryan reconoce como sus fuentes de inspiración a autores tales como Friedrich Hayek, Milton Friedman y Ayn Rand.

Si tiene mérito eso que conviene recordar que Wisconsin no es precisamente tierra de republicanos y su circunscripción electoral, la primera, la más pequeña del estado, es una que tiene tendencia a votar republicano, pero no mucho y que si bien votó por George W. Bush en los años 2000 y 2004, lo hizo por Barack H. Obama en 2008. Una situación que implica que deba convencer una y otra vez a sus paisanos sobre la bondad de sus propuestas, lo que ya le hizo declarar una vez:

Un montón de tipos [se refiere a sus colegas congresistas] votan como quieren y luego vuelven a casa y se van a pescar (…) Yo tengo que votar y luego volver a casa y explicar lo que he hecho y por qué lo he hecho.

Ryan confesó una vez que si está metido en política se debe a Ayn Rand, pero a la hora de definir su manera de hacer política, su guía es Jack Kemp:

Jack [Kemp] tuvo una enorme influencia sobre mí, su estilo de conservadurismo integrador, sus opiniones a favor del crecimiento económico, su estilo de alegre guerrero. Todo eso fue contagioso para mí.

Su trabajo en el Congreso está tan centrado en cuestiones económicas que eso le ha hecho evitar las sociales, las más divisivas actualmente para los votantes, lo cual es una ventaja para él. Sin embargo, eso no quiere decir que no tenga sus propias opiniones al respecto. Así, por ejemplo, votó en su momento a favor de cierta ley federal que prohibía la discriminación basada en la orientación sexual a la hora de conseguir un empleo, lo que le supuso algunas tiranteces con sus colegas republicanos:

Tuve algunas críticas por esa votación. El modo como veo yo eso… Tal vez informado por amistades que he tenido, gente con la que he crecido en Janesville que no escogieron el ser gays. No era una orientación que decidieron experimentar o eligieron. Es simplemente que son así. Fueron creados de esa manera.

Pero ya hemos dicho que lo suyo son los números y ahí sí que se moja. Y lo dice bien claro, pero sin la menor acritud hacia el presidente Obama:

Mira, Barack Obama está haciendo lo que él piensa que está bien. Yo simplemente estoy en desacuerdo con él. No creo que el hombre sea malvado o siniestro. Simplemente creo que es un liberal.

Y lo mismo cuando se refiere al partido rival:

[Los demócratas] no son nuestros enemigos, son nuestros rivales. Se presentaron [a las elecciones] con ese programa y lo están cumpliendo. ¡Ellos ganaron!

La base de su pensamiento económico se centra en la bondad del gobierno limitado y de los mercados libres como base del crecimiento económico y de la prosperidad así como de la libertad del individuo y de su plena realización, algo radicalmente opuesto a la política económica propuesta por la actual administración, de la que opina que está llevando a Estados Unidos al borde del precipicio y puede acabar convirtiéndolo en un país europeo (¡horror!) donde “los amigos de la libertad quedarán reducidos al silencio prácticamente. Sea como sea que uno llame a ese tipo de gobierno, no será una democracia”.

Con estas prendas, no es extraño que haya quien pronostique para él una futura candidatura vicepresidencial, aunque otros lo ven más como el speaker de una Cámara de Representantes con mayoría republicana. Entre los que así opinan, está su antiguo patrón, Bill Bennett:

Es justamente lo que el GOP necesita. Si tuviéramos que diseñar a un candidato republicano, esto es lo que buscaríamos precisamente: la juventud, el optimismo, la claridad de ideas. No es del Sur. Dios bendiga al Sur, pero ya hemos tenido una y otra vez.

Actualmente, Ryan es el ranking member del comité del Presupuesto de la Cámara de Representantes (les recuerdo que cada comité, compuesto por un número proporcional de demócratas y de republicanos, está dirigido por un demócrata, el chair, mientras que su contraparte republicana es conocida como el ranking member), algo inusual tratándose de un congresista tan joven, pero que demuestra su valía que nadie pone en duda. También es miembro del comité de Medios y Arbitrios, que se ocupa de todo lo referido a los impuestos.

En cuanto a su propia opinión sobre qué camino seguirá su carrera, sabemos que durante el segundo mandato de George W. Bush, Ryan rechazó una oferta de ser su Budget Director (director presupuestario). Él mismo ha negado interés en ser gobernador o senador, en este último caso al menos mientras su rival demócrata sea uno que se presenta para la reelección; otra cosa sería si se tratara de un escaño abierto, pero ahora mismo no tiene planes a este respecto. Tampoco la propuesta de presentarse a la presidencia parece atraerle.

No sé qué voy a hacer. ¡Para empezar, yo no planeé todo esto! Todo el mundo [me dice]: “Oh, ¿qué vas a hacer ahora?” No voy a hacer esto siempre. Quiero hacer lo me haga más efectivo en el tiempo que me queda en el servicio público.

Y si él mismo no lo sabe, no vamos a ser nosotros quiénes se lo digamos. Dios dirá. De momento nos quedamos con esto sobre Paul Ryan, el hombre. En la próxima entrada, les hablaré sobre Paul Ryan, el político, y veremos con detenimiento sus propuestas económicas. (¡Ay, ay, ay! ¿Yo, hablando de economía? ¡Pero si eso es cosa de Rillot! Lo que se va a reír cuando se dé cuenta de que no distingo la “inflación” de la “estanflación” y que “deuda soberana” me suena a las deudas del rey… ¿Quién me mandaría meterme en estos fregados?).

Hasta la próxima pues. ¡Ah, y que no se me olvide que tenemos que pasar cuentas de lo que han sido estos nueve meses de primarias!

P.D. ¿Recuerdan que solía escribir en una estupenda publicación llamada Semanario Atlántico? Bueno, pues Semanario Atlántico cerró por diversos motivos y su editor, Alberto Acereda, pasó a otra publicación llamada The Americano. El caso es que Alberto sigue pensando que mis escritos tienen su interés, lo cual ya es el colmo de la bondad para conmigo, y me ha ofrecido seguir colaborando con él en su nueva andadura. ¿Cómo iba yo a decirle que no? La semana pasada publicó mi primera colaboración titulada “Restoring Honor: Más revolucionario que una revolución y Europa sin enterarse”.  Pueden leerla aquí, si lo desean. Es una buena publicación, se lo aseguro, y ésta vez disponemos de más medios para llegar a más gente. Poco a poco, igual conseguimos que nos lean en la Casa Blanca y todo (aunque sea para ponernos en la lista negra).


¡Por favor, que alguien cierre las facultades de periodismo de una vez por todas! Total, para lo que sirven…

15/09/2010

 

Recuerdo cuando empecé a escribir sobre Sarah Palin. Mis primeras entradas versaban sobre su biografía y cada día dedicaba una parte de mi tiempo libre a buscar información en Internet sobre cualquier aspecto de su vida:” Palin childhood”, “Palin high school”, ”Palin college”, “Palin Wasilla mayor”,” Palin family”, “Sarah&Piper” (sí, ya entonces adoraba a Piper ), “Todd Palin”, “Palin family”, etc. La verdad es que siempre encontraba mucha, lo malo es que pronto me di cuenta de que una gran parte de esa información era sencillamente falsa. En su mayor parte se trataba de meras calumnias, rumores sin fundamento, parrafadas soltadas por bocazas ansiosos de notoriedad que fingían conocerla y nunca habían hablado con ella siquiera, etc. Basura en definitiva. Y había tanta que acabé hartándome de tener que perder la mitad de mi tiempo leyéndola solo para poder descartarla (fue entonces cuando inventé el neologismo basuriblog para referirme a esa vergüenza de sitios web que la albergan y hasta la fomentan). Afortunadamente, no tardé en descubrir también algunos buenos blogs llenos de sensatez y sentido común como Conservatives4Palin, por ejemplo, donde bucear en pos de información seria y así seguir con mi tarea.

Entre los mayores majaderos que han arrojado basura sobre Sarah está el miserable ése que, para desgracia del pequeño, es el padre de su nieto (me niego a decir siquiera su nombre). Sí, ése que pretendió en una entrevista que Sarah no sabe siquiera por qué lado de la escopeta sale la bala… Bien, pues si no sabe, ya me dirán ustedes qué hace ella en esta foto, practicando junto a Dick Cheney. He intentado conseguir otra más grande en la que saliera también la diana, pero no la he conseguido. Si de mí se tratara, habría puesto una foto del miserable ese en ella. Palabra de Palin.

¿Conocen una revistucha llamada Vanity Fair (con perdón de de William Thackeray, que no sabía lo que iba a pasar luego con el título de su novela)? ¿Sí? ¿No? Tampoco es demasiado importante. El caso es que la revistucha de marras es una de esas que se pretenden modernas y rompedoras y, como suele pasar, está más arruinada que El País. Mucha chica y poca limoná, que diría un castizo. Vamos, que de tan modenna (sic) como es ha logrado que nadie la lea porque todos se consideran demasiado paletos para ella. En consecuencia, sus editores han decidido que todo sea por la pasta (lo que suele suceder) y que si hay que publicar basura con tal de atraer a algún despistado que pase por el quiosco en busca de una chocolatina, se publica.

Ahora bien, los hay que lo hacen todo a lo grande y los editores de Vanity Fair son unos de ellos indudablemente. Decidieron publicar basura y la han publicado, pero la mayor basura que alguien se pueda imaginar. No se han andado con chiquitas, no. Fíjense si será de apestosa la basura que han publicado que hasta los más radicales izquierdistas entre los radicales izquierdistas han abjurado de ella… ¡y la han criticado! Y acerbamente además. ¿No es increíble acaso? ¿Qué? ¿Que no lo saben? ¡Ah, es cierto! Es que se me ha olvidado un detalle: la basura que han publicado es un ataque a Sarah Palin. “¡Qué! ¡Cómo! ¡Un ataque a Sarah Palin!”, dirán ustedes. “¿Y la izquierda feroz no está de acuerdo con que la ataquen?”, preguntarán ustedes. No, no lo está. “¿Y la izquierda feroz lo ha criticado?”, volverán a preguntarse ustedes. Sí, lo ha hecho. “¡Sí, ya! Y yo ayer vi un cerdo volando”, se reirán ustedes. Pero es cierto. Y si no, véanlo ustedes mismos.

La basura a la que me refiero es un artículo firmado por un tal Michael Joseph Gross en uno de los últimos números de la revistucha esa del que no voy a dar siquiera su título ni poner un enlace;  primero por no hacerle publicidad (el que lo quiera leer, que teclee en Google: “Sarah Palin Vanity Fair” y allá él con su conciencia) y segundo porque sencillamente me repugna la idea siquiera de teclearlo, así de claro. Y si pongo el nombre del autorzuelo infame ese es más que nada para que todos podamos memorizarlo y tenerlo en cuenta si alguna vez el tipejo ese se acerca a menos de quinientos metros de nuestras casas o si pretende algún día que le demos trabajo, que todo puede pasar en esta vida.

En esencia, el artículo ese pretende que Sarah Palin es más mala que la peste y que nos tiene a todos engañados con su falsa bondad cuando en realidad está más cerca de ser la bruja de Blancanieves que la Sarah que todos apreciamos. Así, durante su mandato como gobernadora de Alaska, Sarah se reveló como una persona cruel y vengativa, una fanática religiosa, una madre nada amante y una esposa horrible que aterrorizó a medio estado. Y para documentar todo eso, que ya es, el autorzuelo infame ese se basa en los testimonios de, tal y como lo expresó magistralmente Rich Crowther en una entrada publicada en Conservatives4Palin:

“(…) gente anónima que admira a la gobernadora Palin; líderes republicanos anónimos que en privado la desprecian; un botones anónimo; criadas anónimas; un anónimo colaborador por una sola vez de la gobernadora Palin; varios colaboradores/estrechos colaboradores/ayudantes de campaña anónimos; un íntimo amigo anónimo de la gobernadora Palin; una persona anónima con un conocimiento directo de la situación; otras personas anónimas que han trabajado con Palin; un dirigente anónimo de una de las iglesias de Wasilla; bloguistas independientes demócratas que han producido algunos de los más concienzudos reportajes sobre la gobernadora Palin (como las historias que pergeñaron sobre una investigación federal en marcha y su inminente divorcio, conspiraciones relacionadas con la paternidad de dos de los hijos de los Palin y sus investigaciones sobre el tamaño de las orejas de Trig Palin); fervientes partidarios anónimos; gente anónima directamente involucrada en los hechos; sembradores anónimos de rumores por toda la ciudad; una persona anónima que ha sido frecuentemente una invitada en casa de los Palin; algunas personas anónimas que dicen que Todd Palin es un calzonazos; la opinión general anónima en la ciudad; cotillas anónimos; una anónima compañera de clase en el instituto; una fuente anónima; y una mujer anónima de Wasilla”.

Como ejemplo de lo que debe ser un artículo bien documentado y con unas fuentes sólidas y fiables no está mal, ¿eh? El caso es que con semejantes respaldos, uno tiene la sensación de que cualquier juntaletras (como yo, por ejemplo) sería capaz de escribir lo que quisiera ya que es bastante probable que no se encuentre nunca con un mentís por parte de uno de esas anónimas fuentes de información. Y así ha sido. El tal Gross ha publicado no una sino ocho páginas de basura de primera, de la más apestosa. Tan infecta que en España dudo que ni siquiera El País o Público se atrevieran a publicarla (El Mundo tal vez; a la marcha que llevan en todo lo que se refiere a Palin, no me extrañaría verlo en su suplemento dominical cualquier día; ya les he dicho alguna vez que a mí Pedro J. no me gusta nada, pero nada nada).

Pues bien, Gross perpetró la infamia y los editores de Vanity Fair la publicaron. Seguramente pretendían ganarse el aplauso de la peña izquierdista radical, de la más vociferante contra Palin, pero se han encontrado con un buen chasco porque no ha sido así. ¡Los primeros que se han desmarcado de semejante engendro han sido precisamente ellos! Y es que para todo hay un límite; incluso para mentir. Así, pocos días después de su publicación, reconocidos periodistas progres como Ben Smith, Dave Weigel y Kirsten Powers salieron en defensa de Sarah en sus respectivos medios de comunicación y revelaron la falsedad de algunas de las afirmaciones contenidas en el artículo. En concreto, Ben Smith se refería a la afirmación del autor sobre que:

“Poco después de su nominación, ella [Sarah Palin] sacó el tema del embarazo de Bristol fuera del matrimonio por Levi Johnston estando con los asesores de McCain: “¿Sería bueno para la campaña si se casaran antes de las elecciones?, preguntó y siguió preguntándose si una semana en concreto u otra sería la más adecuada para que los medios cubrieran la noticia”.

Ben Smith revela que se trata de un rumor bastante poco creíble que ya apareció en su momento en un periódico londinense, el Sunday Times, que deja mucho que desear por lo que se refiere a la fiabilidad de sus fuentes y que ni siquiera él se lo cree. Más adelante, Scott Conroy, coautor de un libro sobre Sarah Palin, reconoció que él y su compañera recogieron el rumor mientras preparaban el libro, pero que se negaron a darle veracidad porque quien se lo contó era un antiguo asesor de campaña de McCain que le guardaba demasiado rencor a Sarah como para resultar creíble y porque insistía en su anonimato, aparte de que otros asesores de campaña (y no uno sino varios) presentes en la sala en el momento en que Sarah hizo la pregunta niegan haber oído nunca semejante ofrecimiento por parte de ella.

Por su parte, Dave Weigel apoya a Ben Smith y tampoco se la cree, recordando además que dicha calumnia ya la había oído él también hace tiempo, cuando el deporte del día en la profesión periodística era que un supuesto “asesor de campaña” de McCain largara todo lo que pudiera contra Sarah, acusándole de ser la culpable de su derrota electoral. En cuanto a Kirsten Powers, ésta se queja de que el autorzuelo infame ese utiliza contra Sarah las mismas calumnias que ya se utilizaron en su momento contra Hillary Clinton: que es una jefa horrible y que tiene mal genio. También la acusa de tirar cosas cuando le da un ataque de rabia y de ser una diva por pedir volar en primera clase y tener habitaciones de hotel bonitas, lo que a Powers, que es demócrata perdida, le parece de un machismo insufrible porque bien sabe ella que eso es más habitual de lo que uno se imagina (¡ojo, que no está diciendo que sea verdad en el caso de Sarah, sino que es habitual en muchos políticos!). Así, en su cuenta de Twitter escribió:

VF: Palin es supuestamente vengativa con la gente que habla mal de ella, tiene genio y es controladora. En otras palabras: un político varón.

Pero no fueron ellos los únicos indignados. Dentro del mundo palinista, los colaboradores de Conservatives4Palin descubrieron que una de las pocas fuentes no anónimas contenidas en el artículo, una tal Sandra, es ni más ni menos que una vieja conocida suya. Una chiflada al estilo de Andree McLeod conocida por todos por su obsesión en colarse en todos los blogs palinistas y verter allí sus denuestos contra ella. También descubrieron que entre esas fuentes, esta vez anónima, había un miembro del Partido Republicano de Alaska que fue entrevistado durante 90 minutos y que sólo pudo que alabar a su antigua gobernadora. Pues bien, de esa entrevista no hay ni una sola cita en todo el artículo. ¿Casualidad? Ja, ja, ja. Aún habrá quien se lo crea.

El siguiente periodista progre en romper una lanza a favor de Sarah fue Peter Hamby, de la CNN, que negó que Sarah fuera una persona que supuestamente perdiera los nervios a la mínima provocación, ofreciendo como prueba su propia experiencia de ella.

La siguiente pedrada lanzada a la cabeza del autorzuelo infame ese la lanzó Adrienne Ross, de Conservatives4Palin, quien habló con una de las supuestas víctimas de la vengativa Sarah, Ivy Frye, una antigua colaboradora suya con la que supuestamente estaba a matar y ésta le dijo:

No me fui “de mala manera”. Conozco a los Palin desde hace muchos años y los respeto personal y profesionalmente. Nuestra relación no se ha deteriorado. De hecho, acabo de agitar letreros electorales con Todd y Sarah la semana pasada y fuimos en 4×4 con Willow y Piper. Las ocho páginas del artículo de Gross son una completa obra de ficción desde el principio al fin. Y los de la prensa se preguntan por qué les llamamos “cojos medios de comunicación”.

Una nueva patraña del autorzuelo infame ese está nada más comenzar el artículo cuando presenta a Piper cuidando de su hermanito Trig en las bambalinas de un acto en el que apareció Sarah en Kansas City y el bicharraco ése pretende que Sarah se lo pasó “a su niñera” rápidamente cuando tenía que salir a escena.

De nuevo, Ben Smith es quien pone los puntos sobre las íes: Trig no estaba allí, la “supuesta niñera” no era tal, sino la madre del verdadero niño que sí que estaba, Gina Loudon, una locutora de radio de Saint Louis. O tal y como dijo la propia Loudon poco después:

Mientras estaba tras las bambalinas con los Palin, recuerdo a un periodista preguntándome si yo era “la niñera de Trig” con un destello de algo que no me ofreció ninguna confianza en sus ojos. Fríamente le corregí: “No, soy la madre de Samuel”. Pareció confuso pero tenía más preguntas que hacer. En su historia de Vanity Fair, dice que nadie está dispuesto a hablar sobre Sarah “on the record” a menos que ella les pague o estén asustados. Yo era una de las personas a las que usted entrevistó, Sr. Gross. No estoy pagada ni asustada. Pero ya que usted optó por no escribir lo que le dije, aquí está el resto de la historia: desde la primera vez que la gobernadora vio a mi hijo Samuel (que tiene también síndrome de Down),  ella corre a saludarle cada vez que lo ve. Le hace carantoña como una madre que ama a los niños con síndrome de Down sabe hacer. Recuerdo haber comentado con mi marido que ella “siempre huele a mamá” con Samuel, eso que sólo las mamás entendemos.

Por fin, después de haber recibido tortas por todos los lados, el autorzuelo infame ese reconoció que se había equivocado (¿en serio?) en lo que se refiere a su pretensión de que el niño en el acto de Kansas City era Trig. Bueno, por algo se empieza, ¿no? ¿Qué quieren? ¿Cuándo han visto ustedes a un periodista progre disculpándose?

De todas formas, la profesión seguía atizándole y en un programa de Fox News en el que una serie de periodistas, algunos demócratas, discutían sobre la cuestión, se oyeron perlas como las siguientes:

Jim Pinkerton: “La organización de Palin no ofreció la más mínima colaboración en este historia y aún así el tipo encontró milagrosamente a toda esa gente, ansiosa de colaborar, que conocían suficientes cosas sobre lo que sucede en el interior de la casa de Palin. Dado lo que sabemos ahora sobre el periodismo no estaría sorprendido si el tipo nunca hubiera dejado New York y simplemente se lo hubiera inventado todo.

Kirsten Powers: “La idea, el argumento de que ya sabes, ella no nos deja hablar con suficiente gente así que simplemente nos lo inventamos (…) Es básicamente lo que estamos diciendo: tiene que haber algún tipo de estándares periodísticos.

Aún así, seguían habiendo algunos dementes que pretendían que el artículo de marras sólo contenía algunos “errores”, pero de nuevo eran los propios miembros de la peña periodística progre los que reprochaban al autorzuelo de semejante engendro, tal y como lo hacía Shushanna  Walshe, del Daily Beast, en su cuenta de Twitter:

Hay muchos más errores que esos dos: gritar, la boda, tirar latas, el equipo en la cocina, etc. Sé que una fuente mintió. Hay un montón de gente en Alaska con las hachas listas. No soy la única periodista criticándolo.

Y ciertamente hay más que dos errores: se pretende también que Sarah mantiene malas relaciones con Kirstan Cole y Meghan Stapleton, dos de sus más estrechas colaboradoras en el pasado. Fue la National Review Online la que llamó la atención sobre ello al entrevistar a ambas quienes dijeron que de eso nada de nada y que era de lo más fácil comprobarlo si alguien se tomaba la molestia de hacerlo, je, je, je. A eso se le llama tirar con bala, ¿verdad?

Por fin, Colleen Cottle es una de las personas mencionadas con su nombre y apellido en el artículo. Una antigua concejal de Wasilla que supuestamente declaró que Palin como alcaldesa era un desastre, que no prestaba atención a nada, que no entendía nada de un presupuesto y que tal y que cual. Fue Newsweek quien la entrevistó y ésta desmintió al autorzuelo infame que le endilgaba esas declaraciones diciendo:

Incluso Colleen Cottle, que votó constantemente en contra de la alcaldesa Palin como miembro del concejo municipal, dice que fue una alcaldesa eficaz. “Conseguía que se hicieran las cosas”, dice Cottle.

Después del enésimo desmentido, me gustaría creer que el autorzuelo infame ese se comió su carnet de prensa con grapa y todo, abandonó la profesión, habló con su párroco, se confesó y se dispuso a trabajar como estibador en el puerto con la intención de purgar sus culpas mediante el trabajo físico y la oración, pero mucho me temo que el tipo, por el contrario, estará tan orgulloso y que si acaso lo que le preocupará es por qué han sido precisamente “los suyos” los que le han atizado más y mejor. Tal vez sea porque después de dos años de tener a Sarah expuesta a la vista de todos, bodrios como el suyo sencillamente ya no cuelan y hasta son contraproducentes porque revelan bien a las claras que la persecución a la que se ha visto sometida Sarah desde aquel día de agosto de 2008 en que McCain nos la presentó a todos no tiene más motivo que el puro odio y eso ya es demasiado. Hay un límite para todo y hasta para los progres llega un momento en que uno se pasa de la raya. Es cierto que me cuesta creerlo, pero ha pasado y quizás sea una buena señal. Una señal de que Sarah se ha convertido en alguien tan fuerte a estas alturas que ya no es con memeces como la de Gross con las que se le puede atacar, sin con artículos serios y bien fundamentados. Tal vez sea eso; tal vez no. Ya veremos.

¡Señor, perdónalos porque no saben lo que hacen! (o tal vez sí).


Hoy, de nuevo, es un día triste

11/09/2010

 

Hoy es 11 de septiembre. Un día de dolor. Incluso de ira. Hoy no es día para la elocuencia y sí para la reflexión. Y para ayudar a esa reflexión, nada mejor que recordar, al igual que ya hicimos el año pasado, a aquellos de nuestros mayores que tuvieron la desgracia de vivir días tristes también, pero supieron afrontarlos, resistir la tentación y seguir luchando hasta lograr finalmente la victoria por muy costosa que ésta fuera. Aquellos que pueden darnos ejemplo y servirnos de guía para el presente. Como Charles De Gaulle (1890-1970) aquel 18 de junio de 1940, cuando la ola nazi acababa de arrasar Francia y amenazaba con detenerse nunca. Sin embargo, y a diferencia de muchos de sus compatriotas que dieron la bienvenida alborozados a sus nuevos amos, De Gaulle se negó a hacer lo mismo y quiso que todos lo supieran para que no perdieran la esperanza. Podían haberles derrotado, pero vencido nunca. Ellos eran los buenos.

Charles de Gaulle en el momento de leer su inmortal mensaje a todos los franceses. Un ejemplo de valor ante la adversidad y de confianza en el esfuerzo, el tesón y el sacrificio. Junto a sir Winston Churchill, un gigante en tiempos de gigantes y un ejemplo que mucho me temo que sería irrepetible en estos tiempos de enanos complacidos en su propia pequeñez.

Mensaje del general Charles de Gaulle en la BBC el 18 de junio de 1940

El gobierno francés, después de haber pedido un armisticio, ahora sabe las condiciones dictadas por el enemigo.

El resultado de estas condiciones sería la desmovilización total de las fuerzas de tierra, mar y aire francesas, la entrega de nuestras armas y la ocupación total del territorio francés. El gobierno francés quedaría bajo la tutela del alemán e italiano.

Por lo tanto, puede decirse que este armisticio no sólo sería una capitulación, sino que también reduciría el país a la esclavitud. Ahora, un gran número de franceses se niegan a aceptar la capitulación o la esclavitud por razones que se llaman: honor, sentido común y los intereses superiores del país.

Digo el honor porque Francia se ha comprometido a no deponer las armas salvo de acuerdo con sus aliados. Mientras los aliados continúen la guerra, su gobierno no tiene derecho a rendirse al enemigo. Los gobiernos polaco, noruego, belga, holandés, luxemburgués, aunque expulsados de sus territorios, han interpretado así su deber.

Digo el sentido común porque es absurdo considerar la lucha como perdida. Es cierto que hemos sufrido una gran derrota. Perdimos la batalla de Francia por culpa de un sistema militar defectuoso, errores en la conducción de las operaciones y el espíritu derrotista mostrado por el gobierno durante los últimos combates.

Pero todavía nos queda un vasto imperio, nuestra flota está intacta y contamos con grandes sumas de dinero en oro. Todavía tenemos aliados, que poseen inmensos recursos y que dominan los mares. Todavía tenemos las posibilidades gigantescas de la industria americana. Las mismas condiciones de la guerra que nos hicieron ser golpeados por 5.000 aviones y 6.000 tanques mañana pueden darnos la victoria por medio de 20.000 tanques y 20.000 aviones.

Digo los intereses superiores del país porque ésta no es una guerra franco-alemana a decidirse en una sola batalla. Ésta es una guerra mundial. Nadie puede prever si los países neutrales de hoy no estarán en guerra mañana o si los aliados de Alemania seguirán siendo siempre sus aliados. Si los poderes de la libertad triunfan finalmente sobre los de la servidumbre, ¿cuál será el destino de una Francia que se ha sometido al enemigo?

El honor, el sentido común y los intereses del país exigen que todos los franceses libres, dondequiera que estén, continúen la lucha de la mejor que puedan.

Por tanto, es necesario agrupar la mayor fuerza francesa posible donde esto se puede hacer. Todos los elementos militares franceses que se puedan recoger y las potencialidades para la producción de armamentos debe ser organizado donde quiera que existan dichos elementos.

Yo, el general De Gaulle, emprendo esta tarea nacional aquí en Inglaterra.

Hago un llamamiento a todos los militares franceses de las fuerzas de tierra, mar y aire, hago un llamamiento a los ingenieros franceses y a los trabajadores cualificados de la industria armamentística que estén en suelo británico o tengan los medios para llegar hasta aquí para que vengan y se reúnan conmigo.

Hago un llamamiento a los líderes, junto con todos los soldados, marinos y aviadores de los ejércitos de tierra, mar y aire, donde quiera que ahora estén, a ponerse en contacto conmigo.

Hago un llamamiento a todos los franceses que quieren seguir siendo libres para que escuchen mi voz y me sigan.

¡Viva Francia libre con honor e independiente!

Hace un año les recordé las palabras de otro gigante, sir Winston Churchill, que, al igual que De Gaulle, veía llegar para su país y para toda la Humanidad una larga etapa de penalidades. Sin embargo, ninguno de los dos contemplaba pronunciar la palabra “rendición” y eso a pesar de los cantos de sirena de muchos de los que les rodeaban, tan ansiosos por vender su libertad y la de todos los demás por un plato de lentejas. Ellos no lo entendieron así y pensaron que la libertad es algo que no sólo no es que tenga precio, sino que si lo tuviera, éste sería tan caro como el de la propia vida. Y precisamente por eso merece la pena empeñar esa vida en defensa de esa libertad. Algo que no entendían muchos en aquel tiempo y que ahora entienden muchos menos lamentablemente.

Les dejo pues con un video que recoge la emisión de ese discurso por la BBC ese mismo día 18 de junio de 1940, el día en que el Mal se creyó que había vencido, pero el Bien pensaba: ¡Espera y verás!

http://www.bbc.co.uk/news/10339678

Por mi parte, no hay nada más que decir hoy. Que Dios les bendiga a todos.


Restoring Honor: Sarah Palin en Washington, D.C.

08/09/2010

 

Les pido perdón a todos. Me he retrasado. La verdad es que tenía la intención de publicar una buena reseña del acto celebrado el pasado 28 de agosto en Washington, D.C., pero entre mi jefe que se ha vuelto loco (o un poco más si cabe porque nunca ha estado muy cuerdo, no) y se piensa que las horas tienen setenta minutos y sus empleados ni comen ni duermen y mi compromiso de poner un libro sobre Sarah Palin en la calle antes de finales de año, mi actividad clandestina como bloguista palinista feroz se ha visto algo postergada. ¡Ah, qué suerte tienen aquellos que pueden dedicarse en exclusiva a la noble tarea de juntar letras! En fin, que dejando aparte lo de mi trabajo, que no es un placer, el resto de mis actividades sí que lo son y por más que me cuesten, lo hago muy a gusto, ya lo saben. Sin embargo, esta semana está siendo bastante difícil y lamento no poder ofrecerles el pedazo de entrada que tenía pensada. A cambio les ofrezco estas humildes reflexiones escritas a vuelapluma, confiando en que no se sientan demasiado decepcionados. Y es que no sería mala idea en absoluto que las horas tuvieran setenta minutos. Ya lo creo.

Sarah Palin en Washington, DC. Sarah Palin en el acto “Restoring Honor”. Sarah Palin hablando desde la tribuna de oradores y diciendo con voz clara y firme: “Es tan honroso encontrarse hoy aquí con todos vosotros, patriotas”.

Fue el pasado 28 de agosto. Fue en Washington, D.C. Fue a los pies del Lincoln Memorial, el mismo sitio donde exactamente 47 años antes, en 1963, el reverendo Martin Luther King pronunció su tal vez más famoso discurso, I Have a Dream (Tengo un sueño), ante una multitud de 200.000 personas ansiosas por escuchar la palabra “libertad” y saber que esta vez se les aplicaba a ellas. Una fecha que no fue escogida a propósito por el organizador del acto, el locutor de radio y presentador de televisión, Glenn Beck, pero que una vez que se dio cuenta de la coincidencia, la consideró como una señal de que su intención era acertada, al unir de alguna manera aquel día en que King trató de devolver su honor a los negros estadounidenses con este nuevo día en que él intentaba devolver a todos los estadounidenses, blancos o negros, su honor de nuevo perdido.

El acto reunió a varios cientos de miles de estadounidenses, muchos más que en 1963, tal y como reconocen personas que estuvieron allí en aquella ocasión y que no tienen ninguna duda al respecto. Y, sin embargo, no se trataba de un acto político. No se trataba de un acto de partido, fuera cual fuera este partido. Ningún candidato a un cargo público iba a pronunciar un discurso o presentar un programa electoral o criticar siquiera al gobierno. El acto de ese día era  una reunión de estadounidenses orgullosos de ser eso, estadounidenses, y que sentían vivamente que sus dirigentes actuales no están ni mucho menos tan orgullosos de serlo también como lo están ellos.

Una imagen aérea del Lincoln Memorial (al fondo de todo). Como se puede ver, estaba abarrotado. Pero es que la imagen no deja ver que aquellos que estaban justo enfrente del monumento estaban mucho más apretados de lo que lo estaban los demás. ¿Trescientas o cuatrocientas mil personas? Sé de un asistente al acto de 1963 que asegura que había más de medio millón.

Se trataba de una mera llamada a “restaurar el honor” de los Estados Unidos, un honor que muchos se temen que se haya perdido durante estos últimos años entre tanta vergonzosa petición de perdón al mundo, tanta humillante reverencia ante dirigentes extranjeros y tanta traidora voluntad de salir huyendo de cualquier conflicto antes que pelear. Pero claro, cuando uno no tiene claro que su postura sea la justa y no se tiene el valor de defenderla por la fuerza si es necesario, ¿qué otra cosa se puede esperar que una retirada precipitada, un mensaje televisivo celebrando el fin de las hostilidades pero sin reclamar la victoria y a otra cosa mariposa?

Es por ello que la llamada de Glenn Beck a restaurar el honor perdido de los Estados Unidos era más que oportuna y la prueba de ello la tenemos precisamente en la masiva afluencia de gente al acto, que se alargó por más de tres horas y media en la mañana de un caluroso día de agosto. Nadie pierde el tiempo asistiendo a un acto así si no está plenamente convencido de la justicia de la causa que los reúne a todos y de la oportunidad de hacerlo precisamente ese día, tal y como señaló Sarah Palin, la oradora invitada más esperada y que cosechó unas ovaciones aún mayores que las del propio Beck, en su discurso:

Y sobre estos terrenos donde tenemos el honor de estar hoy, sentimos el espíritu del Dr. Martin Luther King, Jr., que en este mismo día, cuarenta y siete años antes, dio voz a un sueño que nos retaría a hacer honor a las sagradas cartas de nuestra libertad – que todos los hombres son creados iguales.

Hubo muchos más oradores, muchos más discursos y mucho tiempo y muchos motivos para sentirse orgullosos de ser estadounidenses. Un sentimiento este, el del patriotismo, que siempre ha incomodado mucho a los liberales (en el sentido americano del término, por supuesto). También hubo mucho tiempo para referirse a Dios y a su infinita bondad con ese país. Otro sentimiento, el de la fe, que incomoda aún más si cabe a esos mismos liberales para quienes todos los dioses menos el propio son dignos de respeto y todo país menos el propio es digno de encomio con la única excepción del pequeño, esforzado y valiente Israel.

Incluso la sobrina de King, Alveda, ocupó su puesto en el escenario, sirviendo de eslabón entre ambas fechas, la de 47 años antes y la de 2010, por más que algunos pusieran el grito en el cielo sin recordar que Martin Luther King era republicano y fue republicano hasta el día de su asesinato, un partido al que un negro podía enorgullecerse de pertenecer, tal y como dijo otro negro estadounidense, Frederick Douglass (1818-1895):

Soy republicano, un negro puro republicano, y nunca he tenido la intención de pertenecer a otro partido que el partido de la libertad y el progreso.

Y es que el partido de la libertad para un negro siempre ha sido el republicano. Por supuesto, no lo era el Partido Demócrata, el partido de la esclavitud y de la secesión por más que ahora pretendan escribir la historia de otra manera. Afortunadamente, el acto del sábado estaba por encima de opiniones partidistas y ninguno de los oradores hizo mención expresa de ello. Ni siquiera los que podrían tener más interés en ello como Sarah Palin, quien se presentó durante su discurso completamente ajena a cualquier postura partidista:

Ahora, se me ha pedido que hable hoy no como política. No, como algo más – mucho más. Se me ha pedio que hable como la madre de un soldado y me siento orgullosa de esa distinción.

Y así lo hizo. Beck habló de Dios, de tener fe en Él y de sus esperanzas de que ese día fuera precisamente el día en que los Estados Unidos “comienzan a volver a Dios”. Palin habló de los Estados Unidos, del valor y sacrificio de sus militares y de lo mucho que debemos a esos hombres y mujeres “que prestan juramento y que pagan el precio por nuestra libertad”. Cada uno habló del tema que más le identifica, ciertamente, pero ambos juntos, unidos, conjuraron los demonios para todos los liberales de Estados Unidos al invocar un país orgulloso, valiente y confiado en la voluntad divina, precisamente el tipo de país que ha sido siempre Estados Unidos y que tanto detestan y confían en destruir ahora que en la Casa Blanca tienen a la persona adecuada para ello, alguien que se ha pasado media vida (sólo media porque la otra media aún la tiene que vivir) odiando a su país que tanto le ha dado, tal y como reconoció públicamente su propia esposa refiriéndose a sí misma.

¿No es fascinante la manera de ser de esta mujer? No busca nunca ser el foco de atención, pero lo es. No busca nunca ser la estrella, pero lo logra. Y si tiene que ocupar un puesto secundario, como el pasado 28 de agosto, lo acepta tranquilamente. A veces pienso que es capaz de no presentarse a las elecciones presidenciales de 2012 y  en cambio decirnos que va a apoyar a otro candidato. Quiera Dios que no lo haga, pero de verdad que si lo hiciera no podría decir que me ha sorprendido.

Y ésa fue precisamente la tercera pata sobre la que se asentó todo el acto: tras Dios y la patria, la voluntad de la gran mayoría de los estadounidenses de no ser otra cosa diferente a lo que son. O sea, que nada de aceptar una “transformación” como pretenden sus actuales dirigentes, un nuevo intento de ingeniería social a los que tan afectos se han mostrado siempre todos los regímenes totalitarios. ¡Nada de revolución, nada de transformación, nada de ser otra cosa que lo que somos! Sarah Palin lo dijo más claro que el agua al afirmar:

Asumo que todos vosotros sabéis también que no debemos transformar los fundamentos de Estados Unidos tal y como desearían algunos. ¡Debemos restaurar los Estados Unidos y debemos restaurar su honor!

O es que, tal y como les preguntó a todos nada más iniciar su discurso: “¿Acaso no estáis tan orgullosos de ser estadounidenses?”
 
Ya hemos dicho que no era una reunión partidista. De hecho, estaban prohibidas las pancartas para evitar que las habituales muestras de ingenio político deslucieran el acto. Ahora bien, ¿qué culpa tiene uno si cuando habla de Dios, de la patria y de el orgullo de ser quien es y no quien desearía otro que fuéramos se identifica a esa persona con un conservador? Ciertamente, los liberales no suelen hablar de Dios ni de la patria y están siempre más que dispuestos a demostrar su desprecio por su prójimo al negarse en redondo a aceptarle tal y como es y pretender dictarle cómo tiene que hablar, comportarse y hasta pensar. No son los conservadores los que suelen hablar de revolución, sino los liberales. Y no son tampoco los conservadores los que tienen millones de muertes a sus espaldas en horrorosos programas de ingeniería social que pretendían crear al “hombre nuevo” o traer el paraíso en esta vida y no en la siguiente. Pero es que pensándolo bien, ¿por qué un liberal no puede creer en Dios o amar a su país?

Nada ni nadie impedía que un liberal acudiera al acto del sábado. Y seguro que había más de uno entre los cientos de miles de personas que allí se dieron cita. Estoy convencido de que no todos los liberales estadounidenses han sido absorbidos por completo por esa extrema facción que representa el actual presidente de los Estados Unidos. Ojalá haya sido así porque ésa y no otra era la verdadera intención de Restoring Honor: unir a los estadounidenses, blancos o negros, rojos o azules, ricos o pobres, en lo que es o debería ser su más íntima convicción: que Estados Unidos es una fuerza del Bien en este mundo y que así deberá seguir siéndolo siempre. Y sólo de ellos depende que lo consigan.

God bless America.


Sarah Palin le pone las cosas claras a Obama (una vez más)

03/09/2010

 

Mientras algunos hacíamos vacaciones (laboriosas en mi caso), Sarah ha seguido en la brecha, negándose a perder comba. No sólo no ha cejado ni un momento en su esfuerzo por apoyar a sus candidatos favoritos en las distintas primarias republicanas que se han ido sucediendo a lo largo de todo el mes, sino que también ha estado al quite de la actualidad política estadounidense. El caso más evidente de ello ha sido la reciente polémica sobre la oportunidad o no de la construcción de una mezquita en los aledaños del lugar del atentado del 11-S, algo a todas luces tan inadecuado como el abrir una tienda de Chanel con muchos escaparates justo tocando la Kaaba en La Meca. Y es que amor con amor se paga, ¿eh?

Sarah Palin en el acto convocado por Glenn Beck en el National Mall de Washington, D.C. este 28 de agosto pasado: Restoring Honor. Pronto les hablaré sobre ello.

Pues al igual que sucedió en su momento con la polémica por los death panels o por la ley de Inmigración de Arizona, Sarah no se ha escondido y, antes al contrario, ha dado su opinión y lo ha hecho alto y claro, algo que en estos tiempos que corren es toda una rareza con tantos y tantos políticos “blanditos” como tenemos la desgracia de sufrir actualmente.

La entrevista  que les ofrezco hoy (al menos una parte de ella puesto que en realidad es más larga y se emitió a lo largo de tres días) la realizó una de las periodistas más “palinistas” que existen actualmente en el panorama de los medios de comunicación estadounidenses: Greta van Susteren. Sí, sí, precisamente aquella que tiempo ha se decía burlonamente que recibía su correo en casa de los Palin de tanto tiempo que pasaba junto a ellos, ja, ja, ja. En esta ocasión, la entrevista tiene lugar también en Alaska, pero comienza en un sitio muy diferente a la casa de los Palin en Wasilla: el ANWR (Arctic National Wildlife Refugee, refugio nacional de la vida salvaje en el Ártico) donde hablaron sobre energía y la perforación de nuevos pozos de petróleo precisamente allí, algo sobre lo que se está haciendo un montón de demagogia así que es una buena idea la de que veamos realmente cómo es ese sitio. Luego, tras haber pasado frióa a más y mejor, volvieron a Wasilla, pusieron leña en la chimenea, se hicieron un chocolate caliente y le tocó el turno de recibir al presidente Obama a cuenta de la dichosa mezquita.

Esta porción de la entrevista fue emitida el pasado 17 de agosto y, en mi opinión, es estupenda y merece verdaderamente la pena verla. Disfrútenla pues. Aquí les dejo el enlace con el video y un poco más abajo la traducción de la entrevista.

GRETA VAN SUSTEREN: «On the Record» está en directo en Wasilla, Alaska. Y durante los próximos tres días, ustedes van a viajar lo más lejos posible de sus casas. La antigua gobernadora de Alaska, Sarah Palin, y su esposo, Todd, nos llevan al corazón de Alaska con nuestro reportaje sobre la perforación petrolífera en los Estados Unidos. Ahora, desde el desastre de BP, se presta más atención que nunca en materia de energía y perforación petrolífera. Pero durante las próximas tres noches, ustedes tendrán la verdadera historia sobre la zona 1002 del ANWR, una franja de terreno que se ha convertido en el centro del debate sobre la perforación y que podría almacenar una cantidad enorme de petróleo.

(COMIENZA EL VIDEO CLIP)

VAN SUSTEREN: Así que volamos sobre el ANWR. ¿A qué distancia estamos del ANWR ahora?

TODD PALIN, ESPOSO DE SARAH PALIN: Estamos a tan sólo unos 16 kilómetros al oeste del ANWR. Está al otro lado del cañón del río allí.

VAN SUSTEREN: ¿Sabes, Todd? Me sorprendió que sea todo tan plano y que no haya mucha… No vi mucha vida animal u otra cosa. ¿Hasta qué distancia yendo hacia el sur es eso así? ¿Cómo es el terreno?

TODD PALIN: (INAUDIBLE) muchas millas al sur antes de entrar en la cordillera, como se puede ver, así que cuando ves fotos del ANWR con montañas y alces, yo no veo nada de eso aquí o en cualquier lugar al norte de nosotros.

SARAH PALIN, ANTIGUA GOBERNADORA DE ALASKA, COLABORADORA DE FOX: Puedes mirar hasta unas 60 millas más al sur y todavía ver lo que estamos viendo ahora. Así que sí, como Todd sugiere, las fotos para la recaudación de fondos y los sitios web que muestran cascadas y alces y cordilleras y ovejas de la raza Dahl triscando por las crestas… ése no es el ANWR real.

VAN SUSTEREN: ¿Hay algo que tenga el ANWR además de esta llanura que hemos visto? Quiero decir, ¿hemos visto más o menos una representación de todo el ANWR?

TODD PALIN: Bastante, en nuestro vuelo hasta aquí desde Prudhoe, hasta (INAUDIBLE) el campamento de caza, sí.

VAN SUSTEREN: Entonces, ¿qué pasa con la vida animal? ¿Hemos visto animales desde que estamos aquí?

TODD PALIN: Vimos como cinco caribúes cuando íbamos a aterrizar. Hay un caribú al otro lado de la pista aquí. Pero hay un montón de caribúes por aquí normalmente.

(FINALIZA EL VIDEO CLIP)

VAN SUSTEREN: La antigua gobernadora de Alaska, Sarah Palin, se une a nosotros en directo. Y debo decir, qué vista más espectacular esta noche.

PALIN: Es hermoso. Todos los días esperamos llegar a ver esto.

VAN SUSTEREN: Este es un gran estado. Pero tuvimos un comienzo muy brusco esta mañana.

PALIN: El tiempo lo cambia todo y el tiempo dicta tus actividades y en lo que vas a poder participar. El tiempo entró y tuvimos que retrasar algunos despegues.

VAN SUSTEREN: El tiempo entró. Tuvimos una… Tuvimos una… Volábamos de vuelta a Wasilla, tuvimos que abortar el aterrizaje. Entonces volamos a Palmer, tuvimos que abortar ese aterrizaje. Luego tuvimos que volar de vuelta a Anchorage.

PALIN: Sí. Tienes que recordar que la Madre Naturaleza gana siempre aquí y no hay nada que hacer. Cuando ella dice que no vas a volar porque el tiempo es malo, la tienes que creer y tomarte tu tiempo, hacerlo bien tal vez la próxima vez.

VAN SUSTEREN: En fin, que finalmente lo logramos. Volamos todo el camino hasta la bahía de Prudhoe, al ANWR. ¿A qué distancia está eso de Anchorage?

PALIN: Oh, hoy volamos cerca de 1.300 kilómetros, por encima del Círculo Polar Ártico, desembarcamos en la bahía de Prudhoe y luego tomamos otro vuelo derecho al ANWR y aterrizamos en la frontera, allí.

VAN SUSTEREN: ¿Sabes? Es interesante. Yo esperaba que fuera distinto. Quiero decir, que era… era tan plana que no podía serlo más y no había nada allí.

PALIN: Sí, todo el mundo espera que sea distinto porque se creen los exagerados posters de los actos de recaudación de fondos ecologistas y los sitios web que quieren que tú creas que es prístina, montañosa, fluyendo ríos y cascadas y mucha vida silvestre allí. Cuando estamos hablando de la zona 1002 que se necesita para el desarrollo del petróleo, es una pequeña huella diminuta en un lugar muy remoto que está casi deshabitada, que es plana. Y algunas personas se refieren a ella como, básicamente, un terreno baldío.

VAN SUSTEREN: Bueno, déjame… Vamos… Permíteme comparar por un segundo, sin embargo. Si en este mismo momento hay perforación en la bahía de Prudhoe…

PALIN: Sí.

VAN SUSTEREN: En esa  zona. Eso… Eso está positivamente en marcha. Eso está en marcha. En el continente.

PALIN: Correcto

VAN SUSTEREN: Y luego hay algo mar adentro.

PALIN: Correcto.

VAN SUSTEREN: Pero diferente del Golfo de México en el sentido de que no es muy profundo.

PALIN: Oh, diferente… Una forma diferente a la del Golfo de México, donde son zonas vírgenes las que están perforando, a kilómetros y kilómetros bajo el agua, lejos de la costa. No, Alaska está comprometido con agresividad y con mucha responsabilidad en el continente y en aguas poco profundas.

VAN SUSTEREN: ¿Estás totalmente a favor de la perforación mar adentro?

PALIN: Estoy a favor de la perforación mar adentro, pero el golfo sin duda nos ha enseñado algunas lecciones. Tiene que haber más previsiones de contingencias en los planes. Tiene que haber una mayor supervisión de los avances que se hacen ahí fuera. Sabemos eso aquí en Alaska, especialmente en tierra, sin embargo, podemos hacerlo bien. Y hemos demostrado que durante décadas que podemos hacerlo bien. No tiene sentido que el Congreso, que el gobierno federal no nos deje perforar más en tierra cuando vemos lo que puede suceder en esas zonas profundas en alta mar, vírgenes.

VAN SUSTEREN: Muy bien. Ahora, de hecho… Confieso que me sorprendió. Yo esperaba ver algo muy diferente a lo que vi. Pero siento curiosidad… ¿Hay alguien en la delegación del Congreso, senadores o miembros del Congreso de Alaska en los últimos 5, 10, 15, 20 años de Alaska, demócrata, republicano, que se opusiera a la perforación en ANWR?

PALIN: No. Nuestros delegados del Congreso han estado muy a favor de ella. Sin embargo, los que han representado al Partido Demócrata – y uno de nuestros senadores representa al Partido Demócrata – pero él no está yendo a ninguna parte porque sus colegas demócratas no tienen nada que ver con la perforación segura, perforación responsable que puede tener lugar en Alaska.

VAN SUSTEREN: Pero si está a favor de ella.

PALIN: Está a favor de ella.

VAN SUSTEREN: Muy bien. Ahora, en términos de los que se oponen a ella en el Congreso… Déjeme recuperar (INAUDIBLE) ¿Has visto a algún otro, gente de otros estados que hayan subido hasta aquí y echado un vistazo?

PALIN: Sí. El speaker de la Cámara, Boehner, ha estado aquí, Michele Bachmann. Bastantes de los republicanos han llegado hasta aquí con ganas de ver por sí mismos para que puedan tomar decisiones que no se basen en la política, pero se basen en la ciencia involucrada en la perforación. Ellos han estado aquí.

VAN SUSTEREN: Muy bien. Porque, usted sabe, ha supuesto una diferencia para mí el verlo y creo que será igual para cualquiera tanto si está a favor o en contra que tenga que tomar una decisión en el Congreso. Sin duda ayudaría el que alguien viniera y simplemente echara un vistazo.

PALIN: Por supuesto. Quiero decir, tú tomas tus decisiones informadas cuando estás allí. Estás en el terreno. Ves cómo es realmente eso que te han hecho creer.

VAN SUSTEREN: Y es interesante. Ahora somos las víctimas de la lluvia en… en el sur de Alaska ahora mismo. ¡Está lloviendo sobre nosotros!

PALIN: Sí. Sí. ¡No está nevando todavía!

(INTERFERENCIAS)

VAN SUSTEREN: … de hecho es muy hermosa en el ANWR. Hubo sol. Estaba caliente. Nos quitamos las chaquetas. El tiempo era tan diferente allí hoy.

PALIN: Ha sido relativamente cálido hoy. Recuerda que durante nueve meses al año aquello está permanentemente congelado. Es de noche 24 horas al día durante tres de esos meses. Está… está envuelto en nieve blanca y pura y hielo durante nueve meses al año.

VAN SUSTEREN: ¿Cuánto petróleo se encuentra en el ANWR? ¿Lo sabemos?

PALIN: Hay miles de millones de barriles en el ANWR. Las reservas han demostrado ser muy ricas. Sin embargo, todos los detalles sobre las cantidades allí están encerrados en un par de agencias federales y agencias estatales donde las compañías petroleras tienen esos pedazos de información confidencial. El público no está al tanto de todo eso.

VAN SUSTEREN: Bueno, me parece que al tomar una decisión sobre si se debe perforar en el ANWR, tenemos que tomar una decisión acerca de si necesitamos el petróleo, cuánto hay, en qué medida es importante para la seguridad nacional, si es seguro – un riesgo controlado, ya sabes, si (INAUDIBLE) derrame y cómo afectará a los animales, ¿no? ¿Hay algo más a considerar?

PALIN: No hay duda en absoluto de que nos hace falta el petróleo. Podemos responder a cada una de esas preguntas. En lugar de depender de fuentes extranjeras de energía. Alaska solía contribuir – aproximadamente con uno de cada cuatro barriles de petróleo que se proporcionaba a los Estados Unidos, Alaska solía producirlo. Ahora estamos bajando a aproximadamente uno de cada seis barriles y Estados Unidos se está volviendo más y más dependiente de fuentes extranjeras. Y, sin embargo, en el almacén (INAUDIBLE) Ladera Norte y en el ANWR y el NPRA están esos ricos recursos de hidrocarburos.

VAN SUSTEREN: ¿Tenemos una idea de cuánto petróleo queda en el área de la bahía de Prudhoe que ahora está siendo perforado?

PALIN: Todavía hay miles de millones de barriles en Prudhoe y la nueva tecnología está permitiendo más seguridad, la extracción de más… más de lo que se esperaba hace 30 años, cuando Prudhoe se desarrolló por primera vez. Así que hay mucho más petróleo allí todavía. Sin embargo, nuestro oleoducto está disminuyendo en cantidad ese flujo que va al resto de los Estados Unidos. Necesitamos meter más petróleo allí. La única manera de hacerlo es que los federales permitan desbloquear las tierras que han optado por bloquear.

VAN SUSTEREN: A menos que las compañías petroleras no estén perforando y de alguna manera retengan la cantidad de petróleo que está pasando lo que, por supuesto, afecta a la oferta, influye en el precio, afecta al margen de beneficios de las corporaciones.

PALIN: Y ése es siempre el gran debate político: Si las compañías petroleras… las grandes compañías petroleras están almacenando los recursos o no. Lo que hemos hecho aquí en Alaska es tratar de hacerles rendir cuentas, diciendo: si usted mantiene contratos de arrendamiento aquí, debe desarrollar esos contratos de arrendamiento. Y si no puede, si no quiere, entonces vamos a buscar una nueva licitación. Es por eso por lo que llevamos a Exxon ante los tribunales y es por eso que mi gobierno… jugamos duro realmente con las grandes petroleras para hacerles producir.

VAN SUSTEREN: Muy bien, así que ¿por qué deberíamos confiar en las compañías petroleras? Quiero decir, porque – no es que quiera decir que son malas, gente horrible, pero su – su interés está en hacer dinero…

PALIN: Por supuesto.

VAN SUSTEREN: …la obtención de beneficios, corporación. Y usted tiene el MMS, que es la división del departamento de Interior que se supone que los vigila, que ahora ha sido rediseñado y renombrado. Pero, ¿cuáles deberían…? ¿Por qué deberíamos siquiera sentir…? ¿Por qué deberíamos sentirnos bien en relación con las corporaciones y confiar en lo que tienen que decir cuando se trata de extracción de petróleo?

PALIN: Bueno, cuando se trata de extracción de petróleo, estas empresas están vigilando sus márgenes de beneficios. Sus directores generales están haciendo lo que un director general se encarga de hacer. Eso es, cuidar de los intereses de sus accionistas. Bueno, una agencia del gobierno, un gobierno estatal que supervisa una parte de ese desarrollo, como aquí en Alaska, el trabajo del director general está ahí, al igual que nuestro presidente como director general, su trabajo es vigilar los intereses de sus accionistas, siendo estos la gente a la que está sirviendo.

Así que tienes un conflicto saludable. Tienes algún buen debate que puede ir y venir entre la apropiada regulación gubernamental que se necesita y las empresas petroleras y su búsqueda de un buen margen de beneficios, manteniendo a raya el uno al otro. Hay un papel apropiado que un gobierno tiene que desempeñar en la supervisión.

VAN SUSTEREN: Muy bien, yo no estoy sugiriendo una maniobra política ni nada, pero a mi entender si el presidente Obama viniera aquí y echara solamente un vistazo por sí mismo (INAUDIBLE). Tú estarías encantada de acompañarlo a todas partes, echar un vistazo a parte del ANWR y a esa zona.

PALIN: Por supuesto. Y si el Presidente Obama elige no venir a Alaska antes de continuar tomando esas decisiones sobre el bloqueo de más tierra en Estados Unidos, ya no sólo de Alaska, me decepcionará aún más él y su administración, junto con un montón de otros estadounidenses que expresamos nuestra decepción por el hecho de que no haga al menos el esfuerzo de venir hasta aquí. Así que sí, queremos que venga aquí y lo vea.

VAN SUSTEREN: Muy bien. Y vamos a… Vamos a hacer… Vamos a mostrar a los espectadores una gran parte del video de nuestro viaje. Vamos a bajar a Valdez, también. Es el lugar donde la tubería descarga su contenido. Vamos a hacer eso mañana. Pero vamos a hablar… Van a oír hablar de cosas acerca de si la tubería es… si se corroe y toda una serie de otros aspectos interesantes sobre ello, ya que sin duda tiene mucho que ver con la seguridad nacional.

PALIN: Tiene que ver enormemente con la seguridad nacional, el empleo y la estabilidad económica de nuestra nación.

VAN SUSTEREN: Muy bien. Si quieren esperar sólo un momento. Tenemos mucho más con la gobernadora Palin. Estamos en directo en Wasilla, Alaska, y pronto vamos a volver.

A continuación, la gobernadora Palin hablará en «On the Record» sobre la controversia que ha estallado con la polémica mezquita de la Zona Cero. ¿Dividió el presidente Obama al país o está mostrando un fuerte liderazgo? La gobernadora Palin a continuación.

(PAUSA COMERCIAL)

VAN SUSTEREN: Estamos de vuelta en directo en Wasilla, Alaska, con la antigua gobernadora Sarah Palin. Y una vez más, el presidente Obama se ha puesto en medio de una polémica, esta vez sobre la mezquita prevista cerca de la Zona Cero en Nueva York. Ahora, el viernes, el presidente Obama salió con una fuerte defensa de los musulmanes que construyen esa mezquita. Luego, el sábado, cuando las cosas parecían estar un poco calientes, el presidente aclaró su declaración, diciendo que no haría comentarios sobre la sabiduría de la decisión de construir una mezquita allí. ¿Gobernadora Palin?

PALIN: Bueno, ya sabes, suena como un cliché decir que el presidente está desconectado de los estadounidenses sobre este tema, pero ¿de qué otra manera describirlo? Simplemente no lo entiende, es una postura carente de sensibilidad la de aquellos musulmanes que quieren construir la mezquita en esa ubicación. Se siente como una puñalada en el corazón para, colectivamente, los estadounidenses que aún sienten el dolor persistente del 11-S.

VAN SUSTEREN: Entonces, ¿dónde trazas la línea? Porque tienes la Primera  – ya sabes, tienen una… hay una  Primera Enmienda para la práctica de su religión. Pero el pueblo estadounidense dice abrumadoramente, bueno, ya sabes, si bien reconocen ese derecho, simplemente no quieren que ese derecho sea ejercido allí.

PALIN: Bueno, exactamente. Y nadie discute esa libertad de religión que los musulmanes tienen para construir la mezquita en alguna parte. Sin embargo, hay 100 mezquitas ya en Nueva York. Para elegir y ser tan inflexibles acerca de esa localización exacta a sólo una manzana o dos de distancia del 11-S, de nuevo, es ese cuchillo, se siente como tal. Ahora, si el propósito de esta mezquita, como nos están llevando a creer, es crear ese clima de tolerancia, para evitar algo parecido a un 11-S otra vez, hay que preguntarse ¿por qué una de esas 100 mezquitas no va a lograr tal cosa, permitiendo esa tolerancia y la aceptación de diferentes puntos de vista? Así que no creo en eso, que ése es el propósito de esa localización al ser elegida.

VAN SUSTEREN: Tengo curiosidad por qué tipo de efecto político causará la declaración que el presidente hizo. No era una especie de, ya sabes, improvisada, cuando le cogen llegando a un sitio y un periodista le lanza una pregunta. En realidad, ya sabes, pensó en ello. Él hizo una declaración en una cena pública. Así que debe haber habido alguna discusión al respecto.

PALIN: Tendría que haber habido discusión. Tendría que haber sido un comentario bien meditado y bien pensado el que hiciera y luego tuvo que aclararlo a la mañana siguiente. ¿Sabes por qué tuvo que hacer tal cosa, Greta? Tú lo publicaste en Twitter justo después de que él hiciera ese comentario. Tú tienes que haber obtenido tu información de los periodistas acreditados o algo así. Tú lo publicaste en Twitter esa noche, la noche del viernes después de que él hiciera ese comentario a la comunidad musulmana mientras celebraban el mes sagrado del Ramadán en la comunidad islámica allí en la Casa Blanca. Tú publicaste en Twitter lo que había dicho.

Y a continuación, a través de Internet, la explosión que siguió a su comentario. No he visto tal cosa en el debate político de este país en mucho tiempo. A la mañana siguiente, se dio cuenta entonces, creo, vaya, más vale retroceder un poco, y eso es lo que hizo a la mañana siguiente.

VAN SUSTEREN: Bueno, no puedo dar crédito a ello en su totalidad, pero lo que pasa es que es tenemos a los periodistas acreditados en la Casa Blanca que informan a través del BlackBerry y ocurrió tarde en la noche del viernes. Y quiso la suerte que yo sea una de las… yo soy la presentadora de noticias que cierra más tarde. Y al minuto de tenerlo, lo subí a Twitter y a GretaWire y la gente lo cogió.

PALIN: Y una vez que lo hiciste, cuando la gente lo cogió, sin embargo, nos horrorizamos. Nosotros… Estábamos… Fue chocante porque este líder del mundo libre tiene tanto poder en sus palabras. Debería utilizar ese poder en sus palabras para representar la voluntad del pueblo y no subestimar la sabiduría del pueblo en Estados Unidos. Y la inmensa mayoría de los estadounidenses ahora están diciendo, señor presidente, no, eso duele. Eso es una bofetada a las víctimas inocentes que fueron asesinados ese día, el 11-S. Construya la mezquita. Constrúyala en alguna parte. Que se una a las otras 100 mezquitas que ya existen allí en Nueva York, pero en otro lugar que sea menos ofensivo y provoque menos dolor e ira.

VAN SUSTEREN: Muy bien, va a tener efectos políticos porque nosotros… el senador Harry Reid ya está en desacuerdo con el presidente, desentendiéndose de él… en lo que podría ser una especie de manera de decirlo. Pero están las ramificaciones políticas, y luego también están los problemas reales de fondo (INAUDIBLE) ¿Qué debe hacer el presidente para tratar de curar la herida? Debido a que hay una herida en este país entre muchos musulmanes – no todos – y muchos estadounidenses – no todos – con los musulmanes. Quiero decir, ¿cómo se puede al menos hacer algún esfuerzo para solucionar este problema, apagar este fuego, mejor que echarle gasolina?

PALIN: Bueno, lo que el presidente parece estar sugiriendo es que todos tienen que ser tolerantes con las creencias de los demás. Eso está bien. Entonces que aprenda esa lección y trate de aplicarla al debate en el otro lado. Si estuviera aquí ahora mismo y hablara con ese imán, aquellos que quieren construir y eligen esa ubicación exacta para su mezquita que es tan ofensiva para muchos personas y pedirles que sean tolerantes. Pídales que comprendan los sentimientos de los Estados Unidos al respecto. Y a continuación, a ver si el presidente puede utilizar algo de su influencia de una manera más positiva, mucho menos divisiva. Esa es una forma que puede ayudar a salvar esta brecha.

VAN SUSTEREN: Bueno, creo que sin duda, dicen que el presidente no le presta atención a las encuestas, porque creo que (INAUDIBLE) los estadounidenses se oponen abrumadoramente a ello. Quiero decir, creo que los números – no he visto los números de hoy, porque he estado de camino contigo – de hecho, hasta en el aire contigo. Pero no he visto los números, pero desde luego – quiero decir, está tomando decisiones independientemente de las encuestas.

PALIN: No, yo no lo creo.

VAN SUSTEREN: ¿No lo crees?

PALIN: Creo que por eso hizo su comentario la noche del viernes. Él lo supo de inmediato porque sus consejeros se lo dijeron: Fuiste demasiado lejos en esto. Así que a la mañana siguiente trató de dar marcha atrás en eso. Y ahora, curiosamente, él no está saliendo y diciendo… Queremos saber… Señor presidente, tenemos derecho a saber. ¿Cuál es su posición al respecto? Una vez más, todos sabemos que existe ese derecho en la Primera Enmienda a construir una iglesia, una mezquita donde quieran, si es legalmente procedente. Pero ¿cuál es su posición al respecto? ¿Deberían? ¿Lo apoya usted? Y no tenemos su respuesta.

VAN SUSTEREN: Bueno, si él quiere venir a «On the Record«, estaríamos encantados de hacerle esas preguntas.

PALIN: ¡Espero que sí!

VAN SUSTEREN: En cualquier caso, gobernadora, como siempre, gracias. Y (INAUDIBLE) se ven en este hermoso patio trasero que ella tiene aquí. Y nosotros vamos a tener mucho más con la gobernadora Palin. Ustedes no querrán perderse «On the Record» mañana y el miércoles. La gobernadora Palin y su esposo, Todd, les van a llevar al corazón de Alaska para que puedan ver por sí mismos esta tierra, este ANWR, este campo de batalla de la guerra de perforación de petróleo, y tomar su propia decisión. Vamos a estar de vuelta aquí mañana por la noche y la noche del miércoles a las 10:00 PM hora del Este. Queremos que vuelvan aquí.

Y esto es todo por hoy. Me voy a escribir un poco de mi, nuestro, libro. Volveré con ustedes el próximo lunes. No me falten, ¿eh?


¡Por fin llegó septiembre!

01/09/2010

 

¡He vuelto! Después de sobrevivir a uno de los meses de agosto más calurosos que he conocido y de haberme casi arruinado comprando horchata fresquita en cantidades industriales, por fin estoy aquí de nuevo. Y me complace sobremanera ver que ustedes también. A ver, a ver… Sí, están todos. No falta nadie. ¡Fantástico! Confío en que me hayan echado un poco de menos. Por mi parte, no saben lo mucho que yo les he echado de menos a ustedes. Ríanse si quieren, pero de verdad que me he pasado todo el mes pensando: ”¿Y si vuelvo y resulta que ya no se acuerdan de mí?”. Gracias a Dios, no ha sido así (suspiro de alivio). Y como quiera que tenemos mucho de que hablar, me callo, que es lo que tengo que hacer, y paso ipso facto a relatarles lo que ha dado de sí este sudoroso mes de agosto.

“¿Estáis todos de vuelta ya? Pues yo también. ¡Vamos, que hay mucho que hacer!”, parece decirnos la incansable Sarah en esta estupenda foto suya. Y ciertamente tiene razón: las elecciones de noviembre ya están a la vuelta de la esquina y es el momento de hacer el esfuerzo final.

Sobre Sarah Palin y las primarias

Durante todo este mes de agosto, han seguido sucediéndose las elecciones primarias en los distintos estados que las tenían programadas para estas fechas. Tras las últimas de julio, las celebradas el pasado 27 de julio en Oklahoma, hemos visto las de Kansas, Michigan y Missouri (celebradas el 3 de agosto), las de Tennessee (celebradas el 5 de agosto), las de Colorado y Connecticut (celebradas el día 10), las de Washington y Wyoming (celebradas el día 17) y las de Alaska, Arizona y Florida (celebradas el día 24).

De entre todas ellas, las más interesantes a priori eran las tres últimas: las de Alaska porque es el estado de Sarah y, tal y como ya nos esperábamos todos, el grado de compromiso que ha mostrado ella allí a favor de sus candidatos favoritos ha sido el mayor que le habíamos visto nunca; las de Arizona porque estaba la cuestión de si John McCain sería capaz de vencer o no a la vista de lo mal que pintan las cosas este año para aquellos candidatos republicanos tenidos por unos RINO rematados como lo es él y del hecho que Arizona es un estado que, merced a su recientemente aprobada ley estatal de inmigración, se ha convertido casi en un símbolo; y en Florida porque se presentaba como candidato a senador Marco Rubio, quien ha logrado desbancar a Charlie Christ, uno de los RINO más RINO de todo el Partido Republicano, y en quien se tienen puestas muchas esperanzas por más que no sea uno de los candidatos respaldados expresamente por Sarah.

Finalmente, las cosas han ido de perlas en Alaska donde no sólo Sean Parnell, el antiguo vicegobernador de Sarah, ha logrado hacerse con la nominación a gobernador, sino que también Joe Miller, un auténtico desconocido a decir verdad, ha logrado desbancar a la hasta ahora senadora por Alaska, Lisa Murkowski, otra RINO e hija del antiguo rival de Sarah cuando ella misma optaba a la nominación republicana como gobernadora, Frank Murkowski. Si es importante este triunfo de Joe Miller que, al igual que los anteriores de Nikki Haley en South Carolina y de Carly Fiorina en California, ha puesto histérico al establishment republicano, hasta el punto de que el NRSC (National Republican Senatorial Committee) ha tenido la desfachatez de enviar a uno de sus abogados a Alaska a petición de Murkowski a ver si podían encontrar alguna manera (sucia, por supuesto) de arrebatarle la victoria a Miller a cuenta de los votos por correo. Con este acto, los del NRSC se han ganado el más profundo desprecio por parte de todos los que nos consideramos buenos competidores y despreciamos las artimañas, aguantándonos cuando nuestros candidatos favoritos pierden, que es lo que deberían hacer ellos. Tal y como he leído en algún sitio, a partir de ahora cuídense mucho de contribuir siquiera con un solo dólar a estos tipos y si quieren hacer un donativo, háganlo directamente al candidato de que se trate, pero ni se les ocurra dárselo a los del Partido Republicano porque lo utilizarán para cosas como, por ejemplo, ésta: tratar de torcer la voluntad mayoritaria de los votantes de un estado a favor de su propio candidato, el del establishment, el de las elites. Por mi parte, les informo que considero tan importante el caso de Miller que voy a incluirlo en mi libro como uno de los momentos relevantes de la campaña de las primarias, junto con los de Bachmann, Haley y Fiorina. ¡Faltaría más!

En cuanto a  Arizona, pues que John McCain se asegura la nominación republicana lo cual me deja frío, aunque no puede dejar de reconocer que sólo por el hecho de habernos dado de alguna manera a Sarah, McCain se merece eso y una apacible jubilación dormitando en su escaño senatorial, a poder ser sin más ganas de saltar el pasillo para ir a ver a sus amigotes demócratas del otro lado, que es lo que me imagino que acabará pasando con él. El hombre ya tiene una edad y confío en que sean sus últimas elecciones, pero no tengo ningún problema en que se retire a lo grande, como senador y con Sarah, ya como presidente de los Estados Unidos, haciendo el brindis de honor en su cena de despedida.

Por fin, respecto a Florida, pues ya les había hablado alguna vez sobre Marco Rubio, uno de los jóvenes valores del Partido Republicano (o tal vez vamos a tener que empezar a hablar del off Partido Republicano tal y como en New York se habla del off Broadway para referirse a los teatros que están fuera del circuito tradicional, tal y como todos estos conservadores de nuevo cuño están realmente fuera del partido tradicional, que tanto necesita que lo fumiguen a fondo). Rubio ha ganado las primarias, lo cual estaba más que cantado después de que lograra echar de la carrera a Charlie Christ, el candidato del establishment. Vamos a ver qué pasa finalmente con él. Yo tengo ciertas esperanzas en que sea uno de los buenos, pero Sarah, que es la que sabe, nunca se ha pronunciado sobre él y después del fiasco de Scott Brown, que más que el 41º senador republicano parece el 61º senador demócrata, a quien tampoco apoyo expresamente por más que le felicitara luego por su victoria, uno ya se fía poco.

En definitiva, que los RINO están en caída libre, los buenos conservadores en ascenso y Sarah Palin en alza en su papel de fina analista política y con un ojo casi clínico para escoger la buena opción a la hora de apoyar a un candidato. Y eso es lo que les aterroriza a los gerifaltes del Partido Republicano, que la ven cada vez más decisiva mientras que ellos y su niño bonito, Mitt Romney, andan de capa caída. Por cierto, ¿se acuerda alguien de un tipo alto, repeinado y algo chulesco llamado Mitt Romney? Pues eso.

Sobre Sarah Palin y España

Pues a falta de confirmación oficial, parece que los amigos del GEES (Grupo de Estudios Estratégicos) van a celebrar su vigésimoquinto aniversario, a celebrar el año que viene, trayendo a Sarah Palin a España. Uno de sus miembros, Rafael Bardají, así lo anunció (por más que fuera oficiosamente) el pasado 1 de agosto en el programa de esRadio «Por tierra, mar y aire», presentado por Óscar Elía. Aquí les dejo aquí un enlace para que puedan escuchar el programa y comprobar que no es un caso de aquellos de «quien tiene hambre, sueña con pan», sino que es verdad de las buenas, de las que el presidente Obama no podría decir ni una sin que le rechinaran los dientes. El momento concreto se da en torno al minuto 51.15 (¡gracias, Educantabro, por el enlace!). Por mi parte, ya me he puesto en contacto con ellos para intentar asegurar nuestra presencia allí (me temo que será un acto de esos de acceso restringido, siquiera para evitar a los alborotadores), así que a ver si conseguimos al menos una invitación.

¡Sarah Palin en España! ¿Qué puedo yo decir? ¿Qué podríamos todos nosotros decir? Por supuesto, si viene (que no dudo que lo hará porque los del GEES me consta que son personas serias), allí estaré. Y cuento con que todos ustedes también. ¡Oh, cielos! ¿Se imaginan que pudiéramos darle siquiera la mano!

Sobre America is ready!

Llevo un mes justo escribiendo America is ready! La verdad es que ha sido un mes complicado y durante el cual he tenido que visitar más de una vez el parque para reflexionar. Y es que cuando empiezas a escribir un libro, por más que tengas bien pensado cómo lo quieres, la realidad se impone y hay cosas que no encajan. A mí me ha pasado y la primera parte, la más educativa por decirlo de alguna manera, ha acabado saliendo de una manera bastante diferente a lo que me había imaginado. Y es que sencillamente, no funcionaba. Al final he tenido que rehacerla y es ahora cuando veo que sí funciona, pero me ha costado lo mío. Y para que vean cómo ha quedado finalmente esa primera parte, que constituye la cuarta parte del libro, les detallo los capítulos de los que constará y que son estos:

AMERICA IS READY!
Sarah Palin y la revolución del sentido común en Estados Unidos

Introducción: ¿Por qué Sarah Palin?

El nacimiento de los Estados Unidos de América

1776. El año en que todo cambió en América.
Una independencia que ganar: de trece colonias a trece estados.
Una nación que construir: de trece estados a una Unión.

El sistema político de los Estados Unidos de América

La piedra fundamental: la Constitución.
Un sistema bipartidista: El Partido Demócrata y el Partido Republicano.
Eligiendo a sus representantes: el Electoral Day.
Haciendo las leyes: el Congreso.
Aplicando las leyes: el Presidente.
Velando por las leyes: el Tribunal Supremo.
El otro platillo de la balanza: los estados.

Esta parte ya está lo bastante terminada como para poder dársela a alguien que yo me sé (mi amiga L., ya saben) para que la lea y me la corrija. Todavía tengo que hablar con ella, pero estoy seguro de que aceptará, ya verán. En cuanto al resto, he empezado ya con la segunda parte, la historia de Sarah Palin antes de 2008, y estoy convencido de que me resultará mucho menos dificultosa más que nada porque ya he cogido el ritmo y, aparte, aquí sí que puedo aprovechar parte del material publicado en el blog, lo cual me facilitará mucho la tarea. Sería muy importante que pudiera terminar septiembre con algo más de la mitad del libro listo y a ello me voy a aplicar. Confío en no sufrir interrupciones y que las musas no me abandonen.

En cuanto a la cuestión de si será publicado o no, vuelvo a la carga. Después de haber sido rechazado por una de las buenas editoriales de derechas que conozco, voy a intentarlo con otras tres. Dentro de poco me pondré en contacto con ellas a ver qué me dicen. De todas formas, si la respuesta acabara siendo negativa, sepan que mi elección será  la de editármelo yo mismo a través de uno de esos sitios web que hay ahora y que te permiten hacer eso: Bubok, por ejemplo. Por supuesto, preferiría no tener que hacerlo así, pero si no hay más remedio, se hará. Lo que no voy a hacer de ninguna manera es comerme el libro con patatas. Ya lo tuve que hacer con mi tremebundo novelón, uno que escribí allá por el 2000, y no me va a pasar una segunda vez. Palabra de Palin.

Sobre el blog

En cuanto al blog, no hay más novedades que una que me hace bastante ilusión: abrirlo a otras colaboraciones. Con esto quiero decir que si alguno de ustedes quiere escribir algo sobre Sarah Palin y mandármelo, estaré encantado de publicarlo. El caso es que estoy tan atareado con la cuestión del libro que temo no poder publicar todo lo que quisiera en el blog, así que un poco de ayuda no me vendría mal. Así que ya saben, este blog, su blog, es a partir de hoy más suyo que nunca. Todos aquellos de ustedes que quieran colaborar, sólo tienen que mandarme sus escritos (y las fotos, vídeos, enlaces, etc. correspondientes) a esta dirección de correo electrónico y pueden tener la certeza de que lo verán publicado en Conservador en Alaska lo antes posible:

colaboraciones.cea@gmail.com

Escriban lo que quieran y con la extensión que quieran. La única condición que les pongo es que lo que me manden trate sobre Sarah Palin o temas muy relacionados con ella y que lo hagan desde este lado de la trinchera, el palinista. Si no, el botón de “spam” lo tengo cerca y soy muy ducho en utilizarlo.

Y, finalmente, sobre este esforzado bloguista

Por otra parte, les informo sobre mis últimos movimientos, sobre todo a raíz de algún comentario que me ha llegado lamentando la poca trascendencia que tiene Sarah Palin en algunos medios como Libertad Digital, donde supuestamente deberían hacerse eco de ella más a menudo. El caso es que opino lo mismo y ya a mediados de julio envié una carta por correo postal a su director ofreciéndome para colaborar con ellos y cubrirles un flanco, el de Sarah Palin y el movimiento Tea Party, que me apena ver tan descuidado. De momento, no he recibido respuesta lo que no sé si achacar a que agosto es un mes de vacaciones o a que consideran a Sarah Palin «demasiado» para ellos y a mí algo parecido a un agente provocador. Algo me dice que lo más probable es esto último. Como ya saben, hubo un tiempo en que tenía buena prensa dentro de Libertad Digital, donde solían aparecer con cierta asiduidad las cosas que publicaba en el difunto Semanario Atlántico. Luego, de repente, dejaron de publicarme y tal como vino, se fue mi aventura allí. ¿Cambio editorial? ¿Olvido? ¿Otras prioridades? La verdad es que a uno le gustaría ver publicado allí, mi diario digital de cabecera, algo más que meras noticias de agencia sobre Sarah Palin, incluso aunque no las escribiera yo, pero no hay manera. Fuera de la famosa noticia de «Obama no tiene cojones», ¿quién de ustedes recuerda alguna noticia sobre Sarah Palin que valiera la pena leer? Pues eso.

Y esto es todo para empezar. El próximo día les ofreceré la traducción de una entrevista realizada a Sarah y Todd Palin (sí, él también sale… y habla) a mediados de este mes de agosto. Es una buena entrevista, bastante política, y vale la pena traducirla para que puedan leerla. Los dos hablarán sobre energía, fundamentalmente sobre los motivos que hay para autorizar la perforación de nuevos pozos de petróleo allí en Alaska, pero también hablarán sobre el lío armado por el presidente Barack HUSSEIN, HUSSEIN, HUSSEIN Obama y su entusiasta apoyo a la construcción de una mezquita cerca del lugar de los atentados del 11-S. Muy interesante, ya lo verán.

P.D. Finalmente Bristol Palin no se va a casar con el miserable del padre de su hijo. ¡Aleluya! Dios ha visto que iba a meter la pata de nuevo y lo ha evitado. Para que luego digan que no existe… ¡Ánimo, Bristol! Tú te mereces algo mejor y seguro que lo acabarás encontrando.